Matlacihua

La cerveza, la atención, la música, todo genial! Lo único malo es el calor pero una chela lo aliviana, 100% recomendable

Hay bares para todos los gustos y debo reconocer que éste no es del mío. A ver, sospecho que está dirigido a un público más joven, más bebedor y que se conforma con su chela enfrente, ya que no ofrecen NADA de botana, cuando pregunté por opciones para «picar» me dijeron que no tienen nada y que si quería le comprara a los señores que se colocan afuera… primer punto en contra. El lugar tiene ambiente, cómo no, acude mucha gente joven que no tiene ningún problema con la música estridente y el calor infernal, hay más público masculino y tienen algunas grandes televisiones para los consumidores.
Pues bien, mi experiencia mejoró en cuanto llegó la persona que nos había convocado ahí: fuimos a la parte de arriba que tiene menos gente (solo clientes leales, sospecho), la música ahí suena a un volumen más agradable y hasta un ventilador había. Él nos contó que venden alitas y hamburguesas, las cuales probé y debo reconocer que fue de lo mejor del lugar, sobre todo las alitas.
No es bar caro y una vez que salimos noté que los señores que venden dulces y cigarros en la entrada, tienen una gran variedad de botanas (jajajaja): cacahuates en diversas formas, pistaches, nueces y habas con sal de chile, así que quizá no es tan mala idea salir por tu botanita.
Sospecho que no volveré, pero insisto, simplemente no soy el público al que va dirigido.

Unos amigos os invitaron a mi esposo y a mí a salir por lo que nos dimos una vuelta por el centro. Cuando decidimos que era hora de entrar a algún lugar, uno de nuestros amigos sugirió ir a la Matlacihua. Como no la conocíamos, nos pareció buena idea ir al lugar para conocerlo. Se trata de un bar en el que te puedes tomar una cerveza o alguna otra bebida si lo prefieres, mientas platicas con tus amigos o escuchan la música de fondo que es de lo más variada.
Ese día que fuimos no hubo música en vivo, pero me comentaron que hay días en que un grupo asiste para hacer más amena la velada y poner el ambiente. El lugar es realmente pequeño, pero es muy agradable. Todo está muy limpio y la ambientación le va llegando a una de esas cantinas de antaño, pero estilo moderno. En cuanto a precios, me pareció que son realmente accesibles, ya que no recuerdo haber pagado una gran cuenta, sino todo lo contrario.

La Matlacihua (La Matla pa la banda) es una bar donde las cervezas no dejan de circular desde el medio día hasta muy (muy) entrada la madrugada. Sobre la calle de reforma, en un local que ha albergado muchos bares ya y junto a un hotel que se niega a desaparecer puedes encontrar La Matlacihua.
Cuenta con una barra muy larga y unas cuantas mesas, eso si, el lugar esta muy bien decorado con un estilo muy alivianado. El servicio es bueno y los precios son baratos, y por lo regular si es fin de semana puedes encontrar buen ambiente y buena fiesta, muchas veces con Dj´s tocando y uno que otro que se atreve a bailar. Me parece que también sirven de comer, pero mentiría si les digo que he ordenado algo.

Este bar tiene una excelente ubicación ya que está muy cerca del andador turístico, es un lugar pequeño y bien distribuido en cuanto a sus muebles y lo que te ofrecen. Hay una variedad de botanas y bebidas como cervezas o algún preparado que gustes probar.
También tienen música en vivo para cualquier gusto, desde rock, cubana, y hasta puedes sugerir la que a tí te gusta. Si quieres darte una vuelta y pasar un rato agradable con los amigos visite la Matlacihua.

Una amiga de la oficina siempre me hablaba de este lugar, al que ella es asistente asidua, por lo que una noche de jueves saliendo del trabajo, decidí junto con un compañero ir a conocer el lugar del que tanto nos hablaba esta compañerita.
Llegamos al lugar y estacionarnos fue en realidad fácil, había bastante lugar. Al ingresar al bar, nos percatamos de que había muy poca gente, seguramente por el día de la semana del que se trataba, que no suele ser de los mejores días para un bar. Nos sentamos en una pequeña mesa y pedimos una cerveza, la cual nos trajeron inmediatamente… pero sin botana!
Le pedimos al mesero si no podía traernos unos cacahuatitos de menos, pero nos dijo que no podía porque ya había cerrado la cocina. «¡Cómo es posible mi amigo!», le dijimos, si todavía el bar está abierto y son apenas pasadita de las 12 de la noche, «¿cómo que ya cerraron la cocina?» Pues así fue. Poco nos faltó para salir a buscar una tienda de esas de 24 horas para comprarnos una bolsita de cacahuates y regresar al bar, pero por supuesto que eso hubiera sido una imprudencia.
En fin que terminamos nuestra cerveza y nos fuimos a nuestras respectivas casas a descansar, pues al otro día teníamos que ir a trabajar. Cuando le contamos a nuestra amiga la experiencia de esa visita, le causó mucha risa, porque nosotros fuimos muy incisivos en criticar el lugar que tanto nos había recomendado. De esto, les estoy hablando que han pasado unos tres años.
Ahora, cuando recordamos esa anécdota, nuestra amiga nos asegura que las cosas han cambiado en el bar y que ahora sí tienen abierta la cocina hasta más tarde y que el ambiente es mucho mejor. Bueno, creo que tendremos que hacer otra visita para cerciorarnos personalmente y para ver si el lugar se reivindica con nosotros.

Hola chi@s:
Entre los bares que me gusta ir para relajarme e irme a divertirme con mis amig@s se encuentra la Matlacihua; debido a que existe un buen ambiente y el servicio del personal es muy bueno. Aunque el lugar no es tan amplio, puedes gozar de buena música en vivo, especialmente los viernes y sábados, puedes encontrar bandas de rock, dj o hasta un grupo de música cubana; me gusta mucho debido a que puedes gozar de todo y aparte expande diferentes alternativas que casi no encuentras en otros bares. Aunque se vea el bar que es más de la onda rock, no es así porque como acabe de mencionar puedes encontrar diferente música; entre semana tienen música de audio, lo padre es que te complacen con la música que deseas escuchar, hasta puedes pedirle al encargado que conecte tu celular o ipad y así ponen tu música que traes; aparte puedes ver donde esta conectado debido a que estas enfrente.
La primera vez que lo conocí fue saliendo de la universidad, mis amig@s queríamos un trago para relajarnos, debido a que tuvimos una semana de exámenes y merecíamos una pequeña recompensa; así que bajamos al centro y un@ de ell@ menciono el lugar, así que tod@s estuvimos de acuerdo y fuimos para allá; desde qe entras puedes admirar la decoración, aunque el lugar es pequeño lo tienen bien decorado, no lo tienen tan saturado pero puedes apreciar algunas figuras oaxaqueñas :). El servicio del personal es muy bueno y amigable, el encargado es gracioso y te dice si quieres una música en especial; aparte todos los días tienen promociones de bebidas y comida; porque ahora ya cuentan con el servicio de picar, puedes pedir desde alitas hasta una hamburguesa. Así que una tarde te puedes escapar, aparte esta muy cerca de Santo Domingo, Hotel Quinta Real, Jardín Pañuelito, Jardín Etnobotánico, el Restaurante la Olla (enfrente); puedes ir a relajarte o sólo consumir alitas, hamburguesa o entre otras cosas.

Al lugar (el local) en particular le tengo algo de nostalgia, ya que anteriormente aquí se encontraba un bar (más tipo cantina) que se llamaba «La Etnobotana», haciendo referencia que a solo una cuadra podría encontrarse el jardín etnobotánico, en fin ese era el sitio que más frecuentaba con mis compañeros de la universidad a la hora de acompañar la conversación con alcohol.
Obviamente los años han pasado y actualmente el lugar ha mutada a Matlacihua, un bar con mucho ambiente musical, tengo entendido que por las tardes ofrecen snack, las hamburguesas en sus recomendaciones principales, sin embargo no he tenido la oportunidad de probarlas. He asistido a este lugar a escuchar a las bandas que ahí tocan, generalmente sus opciones en bandas de rock son muy buenas, algunas con temas originales y algunos covers de esos que todos nos sabemos y que hacen agradable la estancia.
El espacio es pequeño y normalmente los días que hay música en vivo el sitio se llena. Por su parte el servicio es muy «equis», por llamarlo de alguna manera, ya que únicamente se enfocan en despachar tu orden, sin plan de sugerencia alguna o regalarte una pequeña conversación sobre el lugar, sus promos o sus recomendaciones, su cerveza de barril es la mejor opción ya que siempre está bien fría.
En cuanto a los baños (si me leen continuamente, sabrán que tengo un conflicto con los bares y los baños), estos son de los baños más decentes que he visto en algún bar del centro, aunque pequeños, se preocupan por que todos les funcione y no se vean sucios, el único detalle: son mixtos.

Debo admitir que siempre que paso por este lugar la música me llama pero lo cierto es que nunca me llena del todo. Cuando tienen música en vivo es bueno y puedes aprovechar la promo de cerveza. La comida es buena sin llegar a ser espectacular pero es cumplidora.
Yo no soy muy de tragos preparados pero tienen opciones varias y los precios no son altos. Para mí es un buen lugar para iniciar la fiesta, digo ir arrancando motores, no creo que sea un lugar para agarrar la fiesta a menos que neta tengas mucha actitud.
El servicio la verdad que es de lo más plano, obviamente no son groseros y así pero tampoco se esmeran mucho por destacar o sugerir. Igual estoy acostumbrada a entablar más conversación con quieres me ayudan a pasar un buen rato en el establecimiento; y entiendo que tampoco tengan que estar sobre mí como si fuera su única clienta pero para empezar nunca he visto este lugar lleno y pienso que si tienen un buen producto podrían explotar más el lugar con un mejor servicio pues su ubicación también es privilegiada.

Este lugar, tiene dos de las cosas que más me gustan de un bar, cerveza de barril y rock en vivo, además de comida –tengo pendiente probar lo que hay– y tragos, como su nombre –o lema– bien lo indica: «Matlacihua Snacks & tragos coquetos»
Los fines de semana es cuando hay música en vivo, y hay que aclarar que no siempre hay rock, pues también hay grupos de ska, reggae o DJ., y en ocasiones –año nuevo por ejemplo– primero tocó un grupo de rock y la noche la cerró el DJ, as´pi que hay música para todos los gustos.
En general es un buen lugar para tomar unos tragos con los amigos y pasar un buen rato sin gastar mucho, pues los precios son bastante accesibles, el servicio es amable, y si no hay grupo tocando, puedes pedir enla barra u canción favorita y seguro la pondrán

Este bar de «tragos coquetos» rápidamente ha cobrado popularidad y es una buena alternativa a dos calles del andador turístico, bebidas son buenas con variedad de cervezas a precio moderado, un buen dato es que nunca me han dado una cerveza «quemada», los cócteles son buenos, también tienen comida en la carta, mas para «botanear», las alitas me gustaron mucho, totalmente recomendables, el lugar es agradable aunque un poco reducido, la decoración es sencilla pero agradable. Los fines de semana tocan bandas de rock, ska, reggae, dj´s, no cuneta con espacio para bailar, pero puedes disfrutar la música y divertirte. La atención es bastante rápida, cuentan con personal suficiente para atender muy bien. Matlacihua claro que es un lugar para visitar.

En la página de internet promueven mucho las hamburguesas y se me antojo probar una. Debo decir que fue muy rica, la carne sabia fresca, contenía queso, aderezo de la casa, tocino, lechuga y jitomate; también acompañadas con papas a la francesa. Considero el precio es un poco elevado, si fuera una hamburguesa gourmet creo lo valdría. Por la noche es un bar donde tocan bandas de rock y el espacio no es tan rebuscado con muchísima decoracion. Creo que este lugar puede tener mucho más potencial. El personal es muy amable.

Nice, young bar in the central area where you can meet travelers and locals alike. We stopped in several times during our trip. Staff is nice and friendly, especially Edwin. They sometimes have live music or DJ.