Me encanta este sitio. Es un Diner que respeta no solo la estética de los años 60 sino la atmósfera. No hay TV, es tranquilo y te sientes como en casa. El trato es familiar, la comida abundante. Tienen una carta muy variada y lo hacen todo en el momento. Delante de tus ojos si te sientas en la barra. EL equipo…