El lugar donde está localizado este restaurante había tenido varios negocios anteriormente, una tienda, un café internet, un médico etc. En fin, el negocio que a perdurado a sido el Parador Santo Domingo. Este restaurante tiene como especialidad el mole y las enchiladas, las cuales podrás encontrar una gran variedad de ellas al momento de ver el menú. La comida es buena y tiene un buen sazón, a veces mi familia acostumbra a desayunar aquí, y mis papás siempre son incondicionales a las fajitas de pollo; de mi parte siempre pido pechuga o carne a la tampiqueña, puedo decir que son muy recomendables y sin duda tienen muy buen sabor. También puedes pedir una rica ensalada o un consomé. Finalmente las enchiladas como había comentado anteriormente son variadas desde las clásicas rojas, verdes y suizas hasta las que llevan plátano frito, te dejo de tarea ver las demás :) En sus inicios los precios eran sumamente baratos, pero bueno hay que reconocer que es muy difícil mantener precios así y a pesar de que han subido un poco lo que sin duda mantiene a flote este lugar es que nunca han bajado la calidad de sus productos y la atención. El único pero que tiene es que si encuentras muy lleno el lugar, especialmente los domingos en la mañana deberás ser paciente porque tardan los platos en llegar, pero de ahí en fuera recomiendo darse una vuelta por este lugar.
América H.
Tu valoración: 4 Mexico City, México
Hubo una época en la que mamá trabajó dos turnos, secundaria y primaria, por ende se le complicaba llegar a cocinar y nosotras huevonas nos aburríamos de empanizarnos siempre pechuga y comprar sopas maggi todo el tiempo. Así empezó nuestra búsqueda de comida, entre las cocinas económicas del mercado y otros lugares, al fin hallamos este rincón del cielo en el infierno culinario. La comida es abundante y baratísima, además de sabrosa. Tienen servicio a la carta y menú, nosotras siempre preferimos a la carta, y nos volvimos adictas a su arroz, que está súper bien sazonado, y al mole, ¡qué mole, señores, qué mole! He vuelto fanática de este lugar a mi novio y su mamá y ahora no salen de ahí, ellos han probado las enchiladas y dicen también que provienen de las mismísimas nubes. Abundante a más no poder, repito, y barato. El plato de arroz sale en 12 pesos y es muchísimo, y el mole con pollo en plato marca diablo 30 pesos. Súper recomendable.