Está muy bien, por combinación de asientos disponibles y su ubicación, cerca de un hospital, hará que triunfe. Cuando tuve la oportunidad de ir, me encantó la atención del personal, pero noté que hacía calor y no había aire acondicionado. Esperemos que fuera un hecho puntual
Toni C.
Tu valoración: 4 Valencia
Marengo Caffé es una cafetería de reciente apertura en la zona de Jesús, junto a la avenida Giorgeta y el Hospital Virgen del Consuelo, que seguramente vaya a convertirse en uno de mis sitios de referencia. Y es que lejos de quedarse en el simple pero efectivo trabajo de ofrecer cafés, este local va un paso más allá con una buena oferta de bollería, pizzas y dulces, una pequeña parte de bar con diferentes cervezas entre las que se incluye Turia, que muchas veces cuesta encontrar, y ofrece al mediodía hasta menús. La primera vez que la pisé fue precisamente para ello, eligiendo uno de los dos menús, el de pasta concretamente. Por 3,95 tienen un generoso plato de pasta, normalmente a elegir entre dos especialidades, y la bebida, que puedes pedir lo típico. Luego hay otro, al que a la pasta y la bebida le añaden un porción de pizza y si no me equivoco sube uno o dos euros más. Opción interesante si se tiene un poco de hambre. Los cafés que sirven, de una marca italiana según pude comprobar, están bien ricos. Además, como es natural, ofrecen una variada carta de cafés especiales a cada cual más apetitoso. El local es amplio y luminoso, decorado con mucho estilo y muy acorde a las corrientes actuales(pegaría por completo en Ruzafa, para que nos hagamos una idea) y se está muy cómodo. Dispone además de un sofá y algunos butacones, por reseñar algo que nunca viene mal en una cafetería. Y una cosa: hay que tener en cuenta que se pide en barra, por si se nos ocurre sentarnos, no nos damos cuenta y nadie se acerca a atendernos, y cuando se termina de consumir agradecen que uno mismo recoja la bandeja con la que te sirven lo que sea que hayas pedido y lo deposites en una estantería correctamente señalada.
Patricia H.
Tu valoración: 4 Valencia
Uno de los puntos fuertes de esta cafetería, sin duda, es su excelente café. Corto, intenso, sabroso. ¡Y con cualquier detalle dulce para acompañarlo! La primera vez que me fijé en este local, estaban de obras. Lo que antes era una tienda de muebles de pino, se estaba reconvirtiendo en algo que no sabía, pero que no tardaría en descubrir. Y así, poco tiempo después, ya habían abierto la persiana y se dejaba entrever una bonita y cuidadosa cafetería. ¡Y a Juan le encantó ver un tirador de cerveza Turia! ¡Excusa perfecta para entrar a probar! La mañana que entramos por primera vez, empezaba a hacer calor. Había gente pero no mucha. Me encantó que el dueño viniera a preguntarnos si se notaba el aire, puesto que se lo habían puesto hacía poco y, apenas se notaba el frío. Eso ya dice mucho de la atención que vas a recibir. Como era al medio día, nos pedimos unos refrescos, una cerveza y un pastelito de hojaldre para la «moza» y, nos regalaron unos trocitos de pizza. Dejamos pendiente el café para otra ocasión. Segunda entrada, domingo por la mañana. No es fácil encontrar un sitio relativamente cerca de casa que abran los domingos y que tenga buen café. En este caso, lo encontramos y nos acompañaron los cafés con unos mini bocaditos de Coca en Llanda, aunque en otras ocasiones nos han servido mini croissants. El local es muy luminoso, decorado«muy cuqui», con la zona de relax que le gusta a Juan, la del sofá, con sillas cómodas si no lo encuentras libre. La atención siempre ha sido muy correcta. Y los precios no son nada desorbitados, así que cambio mi cuartel general al Marengo porque se lo merecen.
Carles S.
Tu valoración: 4 Jesus, Valencia
Recientemente han abierto esta cafetería en el Barrio. Esta en la esquina de Callosa d’En Sarrià y c/Carcagente. Enfrente un poco pasado la Clínica del Consuelo. La amabilidad del personal es uno de sus puntos fuertes aun que se nota que a alguno de los camareros les falta rodaje, es normal con un local tan nuevo y lo suplen de sobra con simpatía. Vestidos de negro aun que informal. El local está decorado con mimo. Se nota que se ha hecho con mucho cariño y con la intención de crear un ambiente más allá de la cafetería, que sea acogedor y hogareño, lo cual se consigue de pleno. Sofás y butacas com mesas bajas que invitan al café reposado se alternan con las mesas de altura convencional con sillas con y sin brazos para un servicio más convencional y un par de pequeñas barras con taburetes para ese cortado rápido. Plantas, y separaciones entre mesas en tonos claros y unos grandes ventanales que hacen el local muy luminoso completan el conjunto. Como sitio es muy agradable. Suelen tener el detalle de ponerte con el café un detalle como un mini croissant o una pequeña pieza de bollería dulce. Aun que esto puede que sea un detalle de bienvenida durante los primeros meses de inauguración que después no continue, de momento aun lo hacen y ya hace semanas que abrieron. El café que tienen es muy agradable ni demasiado ácido ni demasiado«blando» para mi bien equilibrado. Tienen también bollería en dulce y salado muy rica para acompañar al café. Tostadas, zumo de naranja natural(y te lo cuelan si lo pides, les adoro por ello) que acompañan con una cortada de naranja y un hielo, al menos cuando lo pides colado. También hacen batidos y demás… y tapas laguna que otra vez he visto aun que no me he fijado aun suficiente. Me dijeron hace poco que consideran poner un menu los mediodías ¡ojalá lo hagan! por que si lo hacen todo con el mismo mimo que con el servicio de cafetería a buen seguro será estupendo. Tienen fuera, en su propio soportal un par de pequeñas barras con taburetes para los que quieran fumar… y esta es la única falta que quizá tengan, quizá por que las licencias valen una pasta y primero quieren ver como les va. N tienen terraza. Yo creo que si pones 4 ó 5 mesitas, que caben bien, será un éxito. El rango de precios está en la linea. Como vecino soy y seré cliente asiduo.
Juan V.
Tu valoración: 4 Valencia
Cafetería, sí, pero con sutiles diferencias. El local es amplio, muy luminoso y como lleva apenas un mes esta todo que da gusto verlo. Bien decorado y agradable en estancia. Incluso tiene un apartado con un sofá que es comodísimo. Pero no vayáis que es mío ¿eh? A parte de tener bollería, pan, cafés, tés y demás, ideal para tertulias, almuercitos«light», etc., tiene una parte de bar con cervezas de varias marcas y entre ellas Turia de tirador. Bien tirada, ya a un precio muy razonable, 1,40 € por un doble. Además las dos veces que hemos ido te sacan trocitos de pizzas(o de coca como diríamos aquí) para acompañar. Por cierto, que está muy buena. El café está al gusto de Patricia, que eso ya es mucho, y por supuesto del mío. El servicio es muy bueno, rápido y se les nota con ganas. Espero que dure. El dueño se interesó por nuestra opinión y estuvo muy receptivo a todo lo que le indicábamos. Es lo que tiene ir haciendo fotos de todo. Punto de referencia a partir de ahora, ya que en otros el ímpetu ha decaído y mucho.