El Toril

¡Claro! Aquí tienes la revisión con la adición de que es autoservicio: "¡El lugar perfecto para empezar el día! Sus desayunos son deliciosos, a un precio muy razonable y con servicio autoservicio, aunque a veces atienden en mesa. Además, disfrutarlos en su terraza en la acera ancha de la calle hace que la experiencia sea aún más encantadora. Los dependientes son atentos y amables, lo que convierte este bar de barrio en una escapada perfecta para relajarse. No es un sitio para ir con prisa, así que puedes disfrutar plenamente de cada momento. ¡Definitivamente volveré por más mañanas llenas de sabor y buen ambiente!

A este sitio le tengo especial cariño ya que era donde desayunaba habitualmente cuando vivía con mis padres. Ahora, aunque menos, lo sigo frecuentando un par de veces a la semana, pa la visita de rigor y para ver al gran jefe…
Se trata del típico bar de barrio que sirve desayunos y tapas varias, siendo su fuerte el café y las tostadas, pues suele estar a reventar de gente desde bien temprano.
Es autoservicio, estando detrás de la barra el dueño, que es el que sirve el café, y su empleada, encargada de las comandas de tostadas.
La que lleva el cotarro y es el alma del bar, es Carmen, pues es la que alterna con los clientes y conoce sus gustos, además de ser la que abre el garito y batalla con los ansiosos por hincarle el diente a la tostá de turno. El dueño suele aparecer con parsimonia y con aire despreocupado, ante el despiporre generalizado del personal existente.
Su punto débil es el servicio, que aunque hay que levantarse a por las cosas, eso no significa que tarden lo más grande o que vaya por un lado la bebida y 5 minutos después la comida. La criatura al estar sola no da pa mas y, eso, los fieles del lugar lo comprendemos y aceptamos como una parte más del mobiliario…
Por ultimo indicar que el precio esta bien y sus tapas se dejan comer…
Si andas por la zona, es una opción mas que aceptable para degustar un buen desayuno.

El Toril es un bar como otro cualquiera de los muchos que hay en Sevilla, típico negocio familiar al que se baja a desayunar, a una cerveza, o a unas tapas por el hecho de estar cerca de casa.
Fui el otro dia a desayunar, y me quedé un poco igual que como entré, ni chicha ni limoná.
Tiene una buena terraza en la que es agradable estar, aunque las mesas están bastante juntas unas con otras. El pan estaba bien tostado, y el café estaba bueno, pero tardaron la misma vida en prepararla, y no me quedó nada claro si te servían o si es autoservicio, el caso es que la persona con la que iba se tuvo que levantar para pedir y traer la tostada (e insisto, no se si es autoservicio o no).
El desayuno estaba bueno, una tostada de aceite, jamón y tomate, las chicas que estaban en la barra bastante amables y cercanas, el local un poco descuidado…
Vamos, un sitio del que tampoco se puede decir mucho, ni bueno ni malo.
Bastante dentro de la media.

Hoy he estado desayunando. Bar de barrio, muy simple y cierto es que a veces tardan. Sin embargo quienes lo llevan son bastante amables y simpáticos y es bastante baratito y con tapas ricas.
No es un sitio al que llevar a alguien para una cita romántica, pero sí para hablar tranquilo con amigos sin arruinarte en las tapas.

Este pequeño bar de barrio siempre suele tener bastante gente. Es bastante simplón un poco cutre y a veces tardan un poco en servirte pero no está mal. Por dentro tienen mesas y sillas de madera y una máquina tragaperras ambientada en el personaje de Torrente. También tiene una pequeña terrazita en la calle aunque no es un sitio muy bonito, el local es frecuentado sobre todo por gente del barrio.
Yo estuve hace poco tomándome una tapa de queso de cabra con mermelada, estaba buena y fue barata aunque tardaron un buen rato en ponérmela y a la gente que estaba a mi lado sin embargo la atendieron mucho más rápido. Además ese día el bar estaba bastante sucio. No es que el lugar tenga nada especialmente malo pero no creo que vuelva.