Dulce Regina

Es una tienda de galletas y nada más. Lo cual es perfecto porque se concentran en las galletas y están especialmente ricas. También tienen bebidas para acompañar el dulce bocado, pero vamos, yo siempre que he ido he salido con galletas y nada más, por lo que no puedo opinar sobre el café.
Si hablamos de las galletas en sí la variedad es notable, desde las clásicas con chips de chocolate a otras mas innovadoras como las de limón y pistacho, o mis favoritas de arándanos y chocolate blanco. Son tipo cookies americanas, hasta el punto de que una amiga mía de Oregon me ha confesado que son las galletas más parecidas a las de su madre que ha probado en España. Esto no es necesariamente ni bueno ni malo, depende del gusto del consumidor, pero al menos el gusto cookie está conseguido.
Lo mejor es pillarte unas cuantas y te las llevas a casa y las tienes para un momento dulce. Todo esto si consigues que alguna llegue a tu casa. Espero que vivas cerca.

¿Has pasado alguna vez por la calle Regina y un exquisito dulce olor te ha hecho salivar? Sin duda es el aroma que sale del horno de Dulce Regina, unas galletas de película, con una textura y un sabor que no te creerás. En apariencia, el sitio pasa desapercibido, ya que es pequeño, pero su olor te hará buscarlo. Mi favorita: la de tres chocolates.

Sólo por el olor que deja en la calle Regina merece las 5 estrellas.
Dulces Regina es sitio pequeñito donde venden galletas (o cookies) recién hechas, y café para acompañarlas. Su principal pero es que es para llevar, ya que no tiene mesas, por lo que tienes que llevártelas a casa o buscar algún rincón en la calle o en las Setas para comértelas.
Hay muuuuchos sabores, a mí me gustan especialmente las de chocolate… Además tienen pepitas bastante grandes, lo que le da más puntos: D
Gracias a su olor suele estar bastante concurrido, pero sirven rápido y normalmente no hay que esperar mucho.
Respecto al precio, es bastante correcto para lo que se consume, lo que hace que sea aún más difícil pasar por la puerta y no picar.
¡Pruebalas, no te arrepentirás!

¿Quieres merendar, desayunar o disfrutar del momento?
Se me hace la boca agua de pensar en ellas… son unas galletas perfectas. Tienen una buena textura, un sabor increíble y son caseras, además si están recién hechas y calentitas ni te cuento!
De todas las que he probado la que más me gusta es la «Doble chocolate y nueces». Aún me queda alguna por probar porque siempre cojo varias de estas y una para probar de otra.
He escuchado muchos comentarios de que son caras, pero son galletas caseras, son pesadas y si compras media docena salen más económicas.
Sinceramente tienen un precio justo. Creo que ahora hay galletas pequeñas que son más baratas.

Yummy cookies. Tried the lemon pistachio and the chocolate chip with nuts. Pair with a café con leche for 2 euro. One of the few spots in Seville where they give you your coffee to go (no seating available).

Dulce Regina es uno de esos pequeños rincones que te pueden alegrar el día. Un local pequeño pero con mucho encanto donde el olor a galletas recién hechas es sufiente motivo como para dejarte llevar.
La chica de detrás de la barra parece simpatiquísima y te aconseja con total sinceridad. La misma sonrisa que se le ve cuando atiende la notas en las galletas, que están hechas con cariño y eso se sabe. Las galletas pueden ser auténticos manjares, y eso lo confirmas aquí. Triple chocolate, nueces y chocolate blanco, arándanos, naranja… Pequeños pedacitos que se cuelan entre una masa perfectamente cocinada y sabrosa.
Valen 1 € y hasta tiene una oferta de café + galleta por 2 €, que total, ya que estás allí… El local tiene el espacio justo para asomar la cabeza y la nariz, oler, enamorarte, pagar y seguir calle Regina arriba o abajo (según se mire).
Es uno de estos sitios que una vez pruebas es imposible que pasen desapercibidos, y cada vez que estés por la zona, casi que te llamará.
Sitio perfecto para reivindicar las galletas como dulce delicioso.

Mi primera reseña se la voy a dedicar a Dulces Regina, una pequeña y acogedora pastelería situada en una de las calles más céntricas de la ciudad.
Si paseas por la enrevesada red de estrechos callejones sevillanos, rodeado de comercios exóticos, bazares árabes o estrafalarias tiendas de ropa, lo que menos esperas encontrar es este oasis para los amantes del dulce.
Nada más entrar te inunda un olor a galletas artesanas recién horneadas, dispuestas en un mostrador con todo tipo de variedades que te dejarán los ojos como platos: desde una simple cookie con pepitas de chocolate hasta una deliciosa galleta de triple chocolate o de canela con nueces.
Pese a que puedan parecer algo caras (1 € las más grandes), para lo buenas que están y lo que alimentan os aseguro que merece la pena. Si además eres un café-​adicto, ¡no dudes en pedir la oferta de galleta + café por 2 €!
Eso sí, no podrás tomártelo allí mismo pues no hay mesas donde sentarse, pero siempre puedes disfrutar de tus galletas sentado en Las Setas, a sólo 1 min andando. ¡El tiempo en Sevilla siempre acompaña!

Dulce Regina, ¡Mater misericordiae! Estas galletitas están divinas.
Tenía ya ganas de reseñar este local y hoy no me he podido resistir. Paso muchas veces por la puerta y alguna que otra vez he probado sus deliciosas cookies. Se merecen cinco estrellas y porque no hay más.
Es un negocio que está situado en la calle Regina, mi lugar favorito de Sevilla. ¡Toma ya! Qué gusto da pasear por esta calle tan alternativa y dejar atrás el olor al rancio incienso para dejar paso al dulce aroma de las galletas en el horno, ¿quién se resiste a eso? Yo desde luego no.
Un local muy cuqui, que vende cookies. Casi ná. Pequeño en espacio y enorme en sabor. Se especializan en una sola cosa, la fabricación de galletas artesanas, y en eso son los mejores, sin duda. Hay de muchos tipos, a mí me apasiona la de tres chocolates, pero la clásica es también espectacular.
De precio también está bastante apañado. Un euro la galleta, pero merece la pena porque la calidad es SUPREMA.
Nada, a pasear por esta calle tan mágica de Sevilla y ya sabes, siempre con una galleta en la mano.

Pocas palabras hacen falta para esta reseña: Clásica. Triple chocolate. Avena y pasas. Chocolate blanco y nueces de Macadamia. Y otras variedades, a cual mejor.
Este minúsculo Obrador de galletas (porque sólo despacha eso, galletas y café) inunda la calle Regina del olor celestial que sale de sus hornos. Efecto llamada inmediato.
(Han sido más de dos palabras. Es que el sabor de la galleta que me estaba comiendo mientras escribía me ha distraído)

If you ever have a cookie or dessert craving, La Dulce Regina is the place to be!
Ordered 3 cookies; the classic chocolate chip, dark chocolate with white chocolate chips, and a pistachio lemon.
The pistachio lemon was by far my favorite thing on the menu. These cookies have more of a fluffy scone consistency, with subtle flavors, and without the overload of sugar. Very filling and amazing when they come straight out of the oven!

Stopped in for a cookie break today! It was amazing. I had the milk chocolate and orange, the classic chocolate chip and the dark chocolate with nuts. The dark chocolate with nuts was a bit dry. But the classic chocolate chip was mind blowing. I will definitely be back to fill myself with these scrumptious little snacks! The cookies are very fairly priced. I suggest getting a dozen – it seems to be the best deal! Great atmosphere, great treats!

Como descubras esta pastelería…¡estás perdido! Vas a engordar. Es muy fácil de localizar, solo entra en la calle Regina y guíate por el olor a galletas. Llegarás en seguida. Por suerte trabajo cerca y me encanta pasear y la calle Regina desde hace un tiempo se ha convertido en una de las calles más «especiales» de Sevilla. Digo lo de especial por la variedad y originalidad de sus tiendas. Una de ellas es esta pastelería especializada en galletas. A simple vista, puede parecer un poco caro, pero las galletas son grandes y alimentan, como se suele decir. Además si la acompañas con un café, el precio es más atractivo. Lo malo es que crean adicción, por el sabor que tienen. Así que si vives o trabajas cerca, corres un gran peligro de convertirte en adicto.

Vas por la calle y piensas que la han perfumado con los olores más dulces de mundo, pero cuando entras, salibas y pruebas sus galletas y magdalenas, descubres que es posible hacer de ese olor insuperable, un sabor aún mejor. Por cierto, hartan muchísimo, pero eso no evitará que compres una de cada!

¡Madre mía! Es una locura lo buenas que están las galletas. Íbamos andando por la calle con un olor a cookie que te atraía tanto que era inevitable no entrar en el local. 1 € la galleta, y nosotros nos llevamos 6 por 5 €. ¡Y valió la pena! Probé la de 3 chocolates y la de nueces y chocolate con leche. Yo que era fan de las cookies del Starbucks las supera con creces, además que la chica que las hace es un encanto. Viva Dulce Regina!!!

En los últimos meses, para mí, pasear por la estrechita calle Regina, es sinónimo de galletas. El aroma de estas galletas atrapa a todo aquel que pasa por delante del local. Para mí se ha convertido en uno de los lugares más recurrentes cuando quieres sorprender a alguien. Da igual que sean de chocolate, pasas… todas están fantásticas, ¡y a un precio muy competente!
Si te acercas a la calle Regina, no dejes de probarlas, sobretodo si están recien hechas y calentitas

Hay días en los que me siento con pocas ganas y puedo decir que las galletas calentitas de Dulce Regina me suben los ánimos, principalmente las de chocolate blanco y arándanos y las de triple chocolate. La pena es que no tengan lugar para degustarlas, así que si estás por la calle Regina o vas de paso merece bastante alegrarse el día con una de estas cookies.

Definitivamente me tienen cautivado estas galletitas caseras, el olor que impregna a la calle, la amabilidad de su dueña y obviamente de su sabor. No me canso de ver cómo salen recién hechas y se posan ahí, calentitas, frente a los ojos de cualquier paladar hambriento por la majestuosa Calle Regina.
1 euro=1 galleta, pero qué galletas. Estás viendo con tus propios ojos cómo se gestan esas galletas y lo pequeñito del local ayuda a asomarte y comprobar por ti mismo cómo nacen esos dulces. La chica es simpática a más no poder y siempre que he ido, tiene galletas de cada una de las especialidades. Y a mí que me siga guardando la de arándanos y chocolate blanco.
Acostumbrado a las galletas empaquetadas, estas son un manjar de los Dioses con orgasmos por cada pepita de chocolate o trocito de arándano que encuentres. En serio, la masa está buenísima, en todas y cada una de ellas y merece muy mucho la pena pensar en una galleta como ese dulce que te alegra la tarde.
Es un sitio pequeñito, no tiene donde sentarse, donde comer, donde hacer cola, pero eso es la calle Regina, coge tu mojito, tu galleta, tu cerveza y quédate en pié, disfrutando del entorno y de ese majestuoso bocado.

Dulce Regina es un pequeño local situado en la calle que le da nombre, y que en sus horas de ajetreo creo que puede ser perfectamente capaz de atraer público a decenas de metros de distancia. ¿Que por qué? Pues porque en Dulce Regina cocinan unas galletas caseras que… ¡huelen a gloria cada vez que las sacan del horno!
Tres chocolates, nueces, limón y pistachos, pepitas de chocolate… ¡Están todas buenísimas! Bien gorditas, grandes (aunque las tienen también algo más pequeñas), jugosas, «cargadas» de ingredientes… las cookies de Dulce Regina son el complemento perfecto a un buen café en La Cacharrería, local que encontrarás justo enfrente.
Los sabores mencionados no son los únicos: tienen cookies diferentes cada día, así que no puedes dejar de probarlas todas porque tienen una pinta deliciosa. Además, te las ponen en bolsitas o cajitas para llevar a casa si no las vas a consumir en el momento. Porque eso sí… Dulce Regina es un establecimiento para despachar a modo de quiosco, pero no tienen mesas o sillas ni en interior ni en exterior. Como mucho, podrás acercarte a la mencionada Cacharrería o a alguna otra cafetería de la calle y tomarlas allí (con permiso de los camareros, claro).
Las galletas grandes salen a un euro, lo que me parece algo caro y por lo que no le doy las cinco estrellas. Aunque también es verdad que luego te paras a pensar en precios como los de las cookies de Starbucks (que rozan los dos euros y no tienen ni pinta de comparación) y la cosa cambia: éstas son artesanales e incomparablemente más ricas. También hay que decir que tienen una oferta de 6×5 galletas a cinco euros, lo cual se agradece. Pero aun así, e incluso entendiendo que un negocio de este tipo debe ser difícil de rentabilizar, un euro por pieza me parece algo excesivo. No obstante, para darse un capricho es genial y el producto es casero y muy, muy rico. Así que… ¡a probarlas!

Hoy he entrado en este establecimiento después de mucho tiempo pasando por el local y quedándome salivando un rato por el buen olor que sale por la puerta.
La verdad es que las cookies, que son el producto estrella de la tienda, no defraudan para nada: son caseras, de una gran variedad y a muy buen precio.
Además, la chica es un encanto y tienen ofertas muy interesantes si te llevas medias docenas, docenas enteras o si te pides un café…
Después también tienen otros dulces como magdalenas caseras…
Recomendado 100%

Para una galleta por la calle y café para llevar.
La verdad que en el ambiente de la calle Regina no podía faltar. Es un recuerdo anglosajón con ese frío inglés: café calentando las manos y cookies para acompañar.
Con Dulce Regina lo puedes hacer en Sevilla, y aunque no haga ese frío «a nadie le amarga un dulce»… Tienen una gran variedad de galletas, con diferentes tamaños y a precios muy buenos y más si te las tomas acompañadas de café, cuando te hacen una oferta irresistible. (todo por dos euritos de nada).
La pega, que no dispongan de un saloncito donde te las puedas comer a gusto y charlando. Esto invitaría a pasar allí la tarde entera y, quién sabe, quizás aumentarían su negocio. :)

¿Que la calle Regina es super indie y cosmopolita europea?
Si, y me encanta…
Y el olor a galleta, o como los viandantes de la calle con nombre de reina latina la llamarían, cookie, que inunda esos metros de acera es orgasmatico…
Pero estoy harta de tanto moderneo por muy buenas que estén las galletas de jengibre, pasas, chocolate blanco, negro o del color del arco iris: 60 céntimos la galleta pequeña y 1 euro la grande… es un abuso!

First, a word on the pleasures of Calle Regina. Like Calle Feria, Regina is just filled with treasures — two cute cafes, a funky t-​shirt store, a little bookstore, lots of knick-​knack stores, and then this: Dulce Regina.
Dulce Regina is the place, *my* place. The cookies here are pure heaven — buttery, sweet but not too sweet, filled with big chocolate chips. The classic will transport you back to childhood, and the various cookies of the day will make you feel like you’re in NY. Oftentimes, the cookies are right out of the oven and the chips are still fantastically melty and gooey. And the folks who work there are actually friendly and chatty (it’s rare to find a chatty store owner in Sevilla!)
This is the perfect pre– or post– Metropol Parasol pick-​me-​up. It will make the trip to that big, silly mushroom feel worthwhile.
Though some have bemoaned the price of Regina’s cookies, I will say in Regina’s defense that these cookies are pure buttery genius — so amazing, so tasty, and ALWAYS warm. Well worth the one euro-​per-​cookie price.
TIP1: 6 cookies for 5 Euros. Yes please.
TIP2: On Saturday afternoon, it seems to be a tradition that people go and buy one cookie apiece and stand outside hanging out. Cookies tend to sell out at this time. And it’s not ever clear who is waiting on line, and who is just hanging out by the entrance.
TIP3: I have no idea what Dulce Regina’s hours are but I know it’s not open by noon on weekdays. (ADD: I can also confirm it’s not open by 3:30PM. This makes me think its hours might be something like 4 – 8 PM). On Saturdays, it seems to be open by 12:30PM.

Oh oh! No se si es un defecto o una virtud, pero yo hace unas 5 horas que las probé, y deseo que amanezca para volver a por más! Ñam ñam ñam! Riquiiisimas!

Si la calle Regina ya molaba, ahora Dulce Regina suma más puntos aún a su favor. Se trata de una tienda de dulces pequeñita especializada en cookies. Lo mejor al entrar es que hueles lo que estén haciendo porque tienen allí mismo el horno. En su diseño hay un toque retro sin exageración, con el suelo de baldosas hidráulicas y algún toque rojo en las paredes. Ese punto vintage lo alimenta la muñequita que corona la fachada y que estampan en sus cajitas y tarjetas, dibujo digno de los 60 españoles.
Las cookies son una verdadera delicia. Nada más verlas ya hay algo bueno: ¡son irregulares… y por tanto caseras! Hay varios sabores que van cambiando según el día y van desde triple chocolate, chocolate blanco con nueces de macadamia o arándanos, doble chocolate con nueces, pepitas de chocolate… Vamos, una locura y un sufrimiento para elegir. No está nada mal de precio, porque por 5 euros te puedes llevar 6, y son grandecitas y contundentes, aunque con lo ricas que están seguro que te saben a poco y quieres más.
Está recién abierto, así que pasad a conocerlo, que además os tratarán fenomenal.