Delicioso siempre, esta vez probé los tirabeques, increíbles de sabor y textura, y las mollejas, deliciosas de punto de sartén y añiño
Sergio G.
Tu valoración: 4 Madrid
Raciones creativas y nada típicas en un ambiente agradable. El servicio es realmente amable y la decoración muy peculiar. Todos los platos que he probado estaban riquísimos, con especial mención al pulpo y las patatas con salsa de atún. La única pega que le saco al local es el espacio. Hay que estar de pie y agobia un poco cuando alguien trata de llegar al cuarto de baño pasando entre la gente.
Tom O.
Tu valoración: 5 Madrid
Ha sido todo una experiencia gastronómica divertida i inesperada buena. Desde las patatas que te regalan en la calle mientras estás esperando en la cola hasta las copas de vino en la entrada hasta el tomate rosado perfecto, el huevo con trufa, asparagus verde con un toque picante y costilladas impresionantes. Buena musica, decoración si como estuvieras en un bar guay de Nueva York además servicio top. Fenomenal. 5 estrellas.
Jacqueline C.
Tu valoración: 5 Newton, MA
Five stars for the beef carpaccio! Must order. We also like the Rolex. Other than that, the red pepper picadillo w/honey was soso, grilled baby squid was juicy but nothing special. We came here once it opened its door at 7:30, and was full by 8:15pm. The chefs were very friendly and explained the menu very detailedly. The presentation of the food was unique.
Michelle D.
Tu valoración: 5 Austin, TX
Oh man, where do I begin? and will I be able to give this place justice with the few words I have? Who am I kidding? Me? One of few words? My husband originally was trying to see if we could make our way into the reservation tasting menu at the restaurant part(Acadamia del Despiece). There were no cancellations so we hopped in line here — luckily close to the beginning of the line. I guess I can’t say what I missed at the tasting menu part but with the food we had here — I don’t even care. It was like an episode of Anthony Bourdain. You walk into what looks like the back of the house modernized butcher shop. Everything was like a haze. All around me chefs hustling and bustling in slow motion. People sitting and even standing ordering and eating. Our eyes wandering and taking notes — our next dish being the yummy one that the person in front of us ordered, the one after that being the one the person beside us ordered, and so it continues. Chuleton con tartufata y tomate — this was my absolute favorite. This was our first and I wanted to order another to be our last but our full stomachs wouldn’t allow anything more. The pile of sea salt and truffle paste spread from one end and the tang of the tomato purée spread from the other form a unique flavor of surprise as the beef is rolled into a little ball. It was like a taste of heaven! Rolex con panceta, trufa, y foie — this was one of the more fun to watch. The panceta was see through thin and the egg yolk perfectly formed by itself. If you have time to look there are several of pictures to try to capture the process. Lomo de Vaca con ajo negro, sesame, y te verde — this came out on a frozen block and they used a used a brulee torch to warm it up and take it off The other dishes we enjoyed were more simply made but a still a treat for the tastebuds. Huevo con foie y tartufata Pulpo — octopus with chimichurri Navajas — Razor Clams Boquerones — fried anchovies The environment, the art of preparation, the quality of food, and the amazing food make this a MUST eat at when in Madrid. If I still didn’t convince you, come and let the food speak for itself.
Clara Á.
Tu valoración: 4 Arganzuela, Madrid
Qué ganas tenía yo de hincarle el diente a los platos de la sala de despiece :) Sí, el local es pequeño. Sí, hay que esperar. Sí, vas a estar justo. ¿Estás dispuesto a eso? Pues relájate y disfruta :) Al entrar puedes ir pidiendo un vinito y te traen unas chips(el vino tinto es regulero, no pidas el de la carta). Cuando te sientas te dan la comida en una especie de lista al estilo carnicería que comentan los Unilocalers. Nosotros pedimos como cosas baratas de la carta que no podéis perderos, el huevo trufado y el tomate(sobre todo el huevo, qué brutal está). De segundo pedimos el steak tartar de solomillo. Muy bueno. Mucho. También pedimos unos níscalos con regaliz negro, plato de temporada, pero no me gustaron demasiado. No estaban malos, pero no era mi sabor favorito. Da igual, si pedís el huevo ya habéis amortizado la visita: P
S K.
Tu valoración: 5 Manhattan, NY
AMAZING. AMAZING. AMAZING! By far the best food we had in Madrid! We went to about 10 different restaurants in Madrid(all highly rated or on some top 10 list) and nothing even comes close to how good this place was! We initially went around 9:30pm at night and it was packed to the gills. We went back the next day at 3pm and it was super chill with enough patrons to fill the seats but not super crowded like it was at night. So it’s best to go at an off time if you want to beat the crowds. We had the tomato with sea salt(amazing), chuleta(thin slices of steak with truffle sauce, tomato and sea salt(amazing), shrimp with garlic(amazing), octopus with chimichurri(very good and flavorful), burratta(good but couldn’t compete with the other dishes), steak squares which were blowtorched at the table(good but flavors were more subtle), flan with dolce de leche, fresh fruit and toasted quinoa(amazing and not too sweet). The BF enjoyed their wines and the waiters were patient with their recommendations and very sweet and attentive and also spoke English well. Décor was also super hip. THISPLACEIS A MUSTIFYOUAREINMADRID!
Sara B.
Tu valoración: 5 Madrid
Cuando un sitio está de moda, está de moda por diversas razones, a veces es más postureo que calidad en la materia prima, y otras veces, combinan las dos de manera excepcional y este sitio hace muestra ejemplar de ello. En pleno Agosto, ya estaba bastante lleno pero tuve la suerte de encontrar un sitio y hacer tiempo a la espera de mis acompañantes mirando la carta y optando por un huevo rossini(4 €) con un rueda(2 €), el vino fresco que hacía un buen team con el plato que aunque sencillo estaba sabroso y diferente. Después con la llegada de los que faltaban pedimos chipirones(6,50 €) con salsa alioli y cilantro, tiernos y con la salsa que te invitaba una y otra vez a no parar de mojar. Después pedimos un tomate de la huerta con albahaca frita(4 €)que simulaba ser las hojas del ramillete, sabroso y tierno que parecía recién cogido de la huerta, y lo acompañamos con el plato estrella del lugar, solomillo con tartuffo(10,50 €), tomate y sal que tenías que hacer DIY, y que te sabía a pura gloria. Las mollejas(4 o 5 €) pasaron sin pena ni gloria para mí que no soy fan de la casquería, aunque a mis acompañantes si les gustó. Para rematar la faena pedimos panceta ibérica con cereza en almíbar y foie(5 €), que con el soplete te lo fundían y creo que fue el que más nos impactó por la mezcla de sabores tan exquisita. Todo regado con unos cuantos ruedas y algún tinto más un café, salió por 54 € tres personas, es un sitio para visitar, pero para ojear bien la carta e ir a por platos más económicos porque como te pongas a coger los platos que superen los 10 €, comerás de lujo pero dejandote el sueldo del mes. El servicio, estuvo correcto y cercano, así que todo de diez.
Food L.
Tu valoración: 5 Manhattan, NY
Found this place after a Ny Times 36 hour review of Madrid. The chef stated he wanted to give patrons«orgasms of the culinary kind» and indeed they do. The place seems to be always very busy and I believe is walk in only. The biggest hassle is trying to lock down a table or get to your table, but if you’re okay with standing and be packed into a space the food is dazzling. Every single dish we devoured was stunning, sensational, delicious, fresh — Come to the U.S. please! The servers were very accommodating with recommendations and didn’t rush you. At times it was so busy it was a bit hectic to order another dish or two but overall, your tastebuds deserve a visit. Bottom Line — When in Madrid, go to Sala de Despiece.
Reyes A.
Tu valoración: 3 Madrid
Movida por todo lo que había leído por aquí de este local, había que probarlo. Local estrecho y alargado, lleno de gente, pero con buena organización por parte del personal que según entras toma nota de un nombre, del número de personas, bebidas y más o menos te dicen el tiempo que tienes que esperar para conseguir un huequito en algún lado de la barra. En nuestro caso fueron unos 10 – 15 minutos. Que pasan rápido mientras cotilleas los platos tan originales que la gente está comiendo y prestas atención a la decoración tan curiosa y original del bar. Los camareros ultiman los platos delante tuyo y he de confesar lo curioso que resulta verlos. Son platos de cocina«moderna», delicatessen en pequeñas porciones y nada baratas. Pero la mezcla de sabores y texturas es bien rica. La carta es muy, muy extensa. Carta muy«de andar por casa» escrita a mano en la que te pone el nombre, su elaboración y lo que lleva, acompañado de la última columna en la que se indica el precio. Pedimos un tomate(mejor dicho, tomatón) con albahaca y aliño de la casa(¡muy rico! El tomate sabía a tomate y era de los enormes. Osea, que parece que el género que manejan es de calidad. Luego pedimos unas tiras de panceta con foie y cereza que acababan de preparar a la vista de todos os clientes. Sobre todo en este plato es donde los diferentes sabores inundan tu boca de una forma muy peculiar. El sitio invita a volver e ir probando poco a poco los platos que tienen. Para cenar yo no lo recomendaría, puesto que sería necesario pedir bastantes platos, lo cual subiría mucho la cuenta y no me parece un sitio cómodo para poder charlar y disfrutar relajadamente de la comida y de la compañía. Desde luego el sitio da de que hablar y para bien. Mis tres estrellas se deben a la «incomodidad» del local. Por la cantidad de gente y de ruido.
Cristina A.
Tu valoración: 4 Madrid
Estuve ayer por primera vez en este MUY curioso lugar. Había pasado por la puerta como millones de veces pero siempre está llenísimo y me daba una pereza enorme esperar a ser atendida o tener que tomar mi cerveza y comer mi «todavía no lo sabía» apretujada y empujada en medio de un pasillo. Ayer era distinto… a pesar de encontrar el mismo panorama, decidimos entrar y esperar. Lo primero que nos encontramos es que no puedes simplemente buscarte un hueco, meter codo y culo y apañártelas como buenamente puedas, no… la cosa es mucho más civilizada :). En la puerta hay una persona del local que toma nota del número de personas, de la bebida y de un nombre para referirse a nosotros cuando(1) la bebida esté lista y(2) cuando haya un hueco para acomodarnos. Bien, la ESPERA no fue eterna y más teniendo en cuenta que a ese lugar no le falta detalle. Se nos pasaron los minutos(creo que fueron unos 10) sin darnos cuenta observando la barra, los desagües del suelo, las paredes, los carteles, las comidas de otras personas, los«platos» que utilizan(son esos papeles de la carnicería sobre una bandejita de metal), la botella de vino de los de al lado enfriándose en una garrafa de plástico, la «puerta» del baño(digo puerta porque era una de esas cortinillas de tiras de plástico de matadero) y ¡un largo etcétera! ¡Y ya nos llegó el turno! Nos acomodaron en un lugar de la barra con perfecta visibilidad ya que veíamos cómo preparaban los platos. El camarero sale, lo prepara/monta delante de ti y te va explicando qué hace, cómo y para qué. ¡Incluso te da consejitos de dónde encontrar esto y lo otro: D! A la hora de pedir… ufff, ¡la carta era inmensa! Por supuesto todo escrito a modo de inventario; a mano y con información de ingredientes y elaboración. Como resultaba harto difícil decidirse, el camarero se ofreció a ayudarnos y nos comentó los platos que más se piden. Al final, pedimos: — Un TOMATE(sorry, no recuerdo cómo se llamaba en la carta) de esos de Navarra rosas, gorrrrdos y tiernísimos(!!). ¡Lo pudimos cortar con el tenedor! Le inyectan el aliño y lo sirven con unas hojitas de hierbabuena/albahaca(no distingo bien estas cosas) en sus curiosos platos. Suena raro lo de pedir«un tomate» pero chicos, ¡¡no podía estar más bueno! — Pedimos también PANCETA con cerezas y foie. ¡Espectacular! Los 8 trocitos de panceta vienen cortados finísimos(transparentes) con media cereza y un trocito de foie en cada extremo. Para rematar la jugada, la panceta la cocinan delante de nosotros con un soplete. Nuestra siguiente experiencia será con el solomillo/trocitos de VACA envueltos en su propia grasa blanca… la grasa la derriten con el soplete y luego separan cada filete(hasta ahora uno encima de otro) para darle un poco más de calor de nuevo con el soplete y añadir los diferentes aliños(ajo negro, sangre de remolacha, wasabi…). En cuanto al PRECIO, me parece un lugar carete, no voy a decir que no… pero merece la pena ir a conocer el lugar y una vez conocido, ir de vez en cuando a tomar una caña con una plato diferente cada vez. Es también ideal si quieres sorprender a alguien que viene de fuera. ¡Para que vea lo bien que nos lo montamos en Madrid y lo originales que somos! Si bien no lo recomiendo como lugar para ir a darse un homenaje de los de salir con la barriga a tope, SÍ es definitivamente un lugar para ir a tomarse una o dos cañitas acompañadas con un par de tapas. También lo veo complicado para grandes GRUPOS ya que el lugar es bastante pequeño y una vez lleno, resulta difícil que se quede un gran hueco libre… A modo de RESUMEN…¡¡este lugar no tiene desperdicio alguno!
Amir D.
Tu valoración: 3 Madrid
Sala de Despiece es un sitio muy pequeño que casi siempre está lleno de gente. Tienes que comer en el bar y hay pocas sillas. La comida es tipo degustacion, las raciones son muy pequeñas y las que tienen pan como acompañante, suelen venir con obleas pequeñitas de pan. La comida es muy rica y la preparan delante del cliente. Muchas cosas del menú vienen crudas y las que necesitan freír, se hacen con un soplete muy mono. Eso sí, todo es carísimo. En resumen, nos gustó la experiencia, pero no vamos a repetir.
Antoine P.
Tu valoración: 5 Victor Hugo, Paris
C’est la première fois que je me trouve dans un bar-restaurant aussi original à Madrid, que j’y rentre alors que je n’ai plus faim, juste pour boire un verre, et que j’émets un avis sans avoir rien goûté. Rien qu’à l’ambiance, la vue et les odeurs: le choc culinaire assuré. Le produit est de qualité, son traitement est simple, mais toute l’originalité et le plaisir sont dans la présentation, sans parler du style de la salle. Impressionnant, mais tout me paraît bon, délicieux, succulent, goûteux …etc… Bref, il faut absolument que j’y retourne, j’en salive d’avance. INCONTOURNABLE. ENFIN, nous voilà de retour. Les mots me manquent tant nos papilles furent chatoyées. Inutile de décrire les plats, c’est original et inoubliable du début à la fin. Conclusion: né pas essayer La Sala de Despiece c’est rater une exceptionnelle expérience à Madrid.
Adam S.
Tu valoración: 5 Madrid
He ido a Sala de Despiece ya cinco penséis veces, y diría certeza que es mi restaurante favorito de Madrid. Siempre llevo a mis invitados estadounidenses aquí para que tengan esta experiencia culinaria. Es un sitio muy pequeño, y siempre hay un montón de gente, así que es imposible ir con más de cuatro personas. Y aun con cuatro es difícil, y hay que tener un poco de paciencia. A veces hemos cenado en una«mesa» que es más bien un estante metálico que no cabe mas de un plato. Pero la comida… el chuletón es una maravilla. Y tienen el puño más rico que nunca he probado. Mi mujer, una vegetariana, siempre pide el tomate y la burrata.(Recomiendo que mezcles las dos.) También tienen otra carne — se me olvida el nombre — que se quema y que es riquísima. El servicio es perfecto. Después de dos veces como cliente allí, habían memorizado mi nombre. Una vez se les olvidó nuestro orden, y nos regalo una botella de vino — una reacción que demuestra la importancia que ponen en su buen servicio. Y nunca ha pasado otra vez. Los camareros siempre están atentos y amables. El ambiente es peculiar y único — un poco hipster. Tienen cuchillos por todos lados y paredes de espuma de poliestireno. Mola mucho. Seguro que volveremos muchas veces más.
Jeanette L.
Tu valoración: 5 Santa Monica, CA
Amazing — so yummy and what a fun place to eat! We were INLOVE with the Carpaccio. Delicious, interesting and the way they show you how to eat it… also fun to eat. :)
Olaya O.
Tu valoración: 4 Madrid
Chamberí es un barrio que no frecuento nada(pese a que lo frecuenté hace años muy mucho) y que siempre me da pereza por las combinaciones de metros y autobuses necesarios para ir por lo que la sala de despiece estaba en mis favoritos desde el principio de los tiempos. Dato importante: está abarrotada, no sé si hay horas mejores y horas peores pero no cabe un alfiler. Nada más entrar un camarero/maître/encargado/llámalo x muy simpático nos preguntó cuántos éramos y qué queríamos beber, al poco de recibir nuestras bebidas y un cartucho de patatas chip nos indicó que ya teníamos hueco. Pedimos burrata la cual es excelente y viene acompañada de pulpa de tomate y pesto de rúcula, navajas con bilbaina de frambuesa, ricas con un punto picante, butifarra a la plancha la cual viene acompañada de una especie de pantumaca con cebolla y creo que puerro, y tartar de solomillo, impresionante. Todo regado con unos dobles de cerveza, salimos a unos 16 € cada uno, 3 comensales, yo cenada. Las raciones varían en cantidad, en el «menú» puedes ver de cuántos gramos se compone y su precio, por lo que la cuenta puede ser muy superior o inferior dependiendo de las alecciones que hagas, Visita recomendada(casi diría obligada).
Claudia G.
Tu valoración: 4 Madrid, Spain
Hemos estado esta noche 4 amigos y he de decir que es un local MUY pequeño, pero la fama que tiene está justificada. Una mezcla de show-cooking de tapas y «raciones» ideales para tomar con una copa de vino o caña. Abrían a las 20h y había cola en la calle, a pesar de que estamos en diciembre y encima llovía. Si vas a esa hora, te sientas sin problemas. Eso sí, media hora más tarde ya no cabía ni un alfiler. A pesar de ser un sitio(aparentemente) informal, la atención es bastante buena y son súper rápidos. Hemos pedido la burratta(impresionante), el tartar de atún(muy bueno, pero muy muy mini), el tomate(tomatón gigante, con buen AOVE y albahaca), pulpo(muy bueno también) y las alcachofas con requesón(he de decir que este plato es el único que nos ha decepcionado). En definitiva, muy buena opción para tomar un picoteo amigos(no más de 4…). Bravo por los nuevos locales que innivan y ofrecen modelos de negocio nuevos en Madrid!
Julio G.
Tu valoración: 5 Benalmádena, Spain
Es uno de mis sitios favoritos en Chamberí para comer informal(de pie casi siempre). No voy mas por lo lleno que está. Los chipirones, el tomate, los tirabeques mis favoritos. El concepto divertido y la decoración genial. El ambiente muy agradable. Como odio que este siempre a tope… Dejad ya de ir!
Fernando S.
Tu valoración: 4 Madrid
El sitio estrella del moderneo madrileño actualmente. En fin de semana es(casi) imposible, mejor aprovechar alguna noche entre semana. Es caro pero la decoración es genial y los camareros muy atentos. Un paraíso para los amantes de lo crudo, de lo hecho en directo y de la comida presentada de manera espectacular.
Daniel M.
Tu valoración: 4 Gràcia, Barcelona
Desde que lo vi por primera vez tenía ganas de entrar a este pequeño local con una decoración que recuerda a las carnicerías. Con los ganchos donde se cuelga la carne donde ahora ocupan su lugar las cartas, los cubiertos están colgados también y la pared esta recubierta de corcho de colores. Aquí no podrás pedir tapas si no mas bien raciones para compartir, eso si, variedad tienes para aburrirte, empezamos por un tomate con lascas de sal y albahaca, huevos con setas, chipirones, pulpo… todo muy rico. Por supuesto los precios están acordes a la calidad de sus productos. Aunque me gustó mucho lo que comí, bien es cierto de que como no llegues en cuanto abran, vas a tener mucho problema en encontrar sitio y es que tiene mucho éxito el restaurante, tanto que llega a agobiar de toda la gente que intenta tomarse una caña y comer un poco.
Natasha S.
Tu valoración: 4 Madrid
La Sala de despiece, pertenece a Bonet, quien ha querido interpretar en este restaurante un sala de despiece de carnicería décorándola con diferentes objetos que te hacen sentir en la misma, con sus camareros vestidos con batas de carnicero y sirviendo sus platos en bandeja y papel como cuando compras carne. Lo ideal es pedir varios platos y poder probar, tiene una materia prima brutal, el tomate tiene un sabor, color y tamaño que es espectacular y el sabor y frescura de la burrata es lo mas, tenía tiempo que no probaba una que estuviera tan buena. Dato importante para poder estar comodo hay que llegar temprano, ya que es pequeño el espacio al estar de moda se llena rápidamente y no aceptan reservas. De precio, para la calidad que tiene esta bien no es de lo mas caro que he probado pero tampoco es barato.
Jen H.
Tu valoración: 5 Los Angeles, CA
Best meal I’ve experience in Spain! I know many would argue, but with the week I had in Spain, Sala de Despience ISIT! My order: Tartar De Atun, 12(Tuna Tatar-3stars; Flavor is excellent; Tuna wasn’t fresh) Pulpo Plancha, 10(Octopus 3-stars; tomato+onion based) Chuleton(Beef Tartar-5 stars; The BEST; spread everything that’s given on each slice and roll it up like the locals) Burrata(Best Burrata 5-stars; it’s a GIANT glob of goodness w/pesto(slightly bitter + marinara sauce) It can get SUPER busy here, so prepare yourself! You’ll need to find a spot at the counter or against the wall and someone will help you. The best seats in the house would be at the counter since the waiters will be readily available to assist you. The menu is only available in Spanish, so make sure to bring a translator! The waitress also spoke minimal English, which helped. My tip for your is to brush up on your food vocabulary. Overall, a great place with lots of local! Thanks, Lolo, for this awesome recommendation! PS parking is a nightmare, so take the metro! It’s less than a 2-minute walk from the metro!
Scooter S.
Tu valoración: 5 Portland, OR
One of my favorite dining experiences in Europe. The food is terrific, service is patient and helpful and the atmosphere is crazy cool. If you want a quiet place to sit at a table and eat, you are in the wrong place. Odds are you will eat standing up and might have to crawl under a counter to get there. If you can deal with that, it’s so worth it.
Joy F.
Tu valoración: 5 Madrid, Spain
Sala de Despiece is an amazing new-ish tapas bar on the up-and-coming Calle Ponzano. Super, hyper, mega recommendable. Some friends, one of whom lives around the corner, had been talking about this place for a long time. Wednesday, work day, long day — beer is needed. The boys are having drinks on Ponzano. But we’re hungry. Finally! The moment arrives to try Sala de Despiece. Yiiiiiissss. First impressions: beautiful. Interesting decorations, all put together with things from a typical butcher’s/slaughterhouse/meat-cutting room(you know, I’m a native English speaker and I’m not even sure how to translate Sala de Despiece) — coolboxes, knives, crates, etc. Second impressions: the menu. Wow. Starting with drinks, I was really impressed with the variety, and the prices weren’t bad, considering the style and the location and the«classiness» of the place. My only complaint about the Sala is that the menu is incredibly hard to read. Like, crazy difficult. So small. So full. So much information. But! Once you decipher the menu — wow. The food is enticing. Interesting. Sexy. Surprising. Everything looks and sounds amazing, but I can only speak to the three dishes we tried: beef carpaccio, a fried egg with foie, and the steamed bun with morcilla.(Note: all of these dishes have completely different names, of which I don’t remember… any. You’re kind of on your own at ordering time… sorry.) The beef was the universal favorite, and then the morcilla steamed bun was #2 for me, though my friends didn’t love it – it was like a Chinese-dim-sum-style steamed pork bun but with delicious Spanish blood sausage instead. Yum! Definitely give Sala de Despiece a try when you’re working your way down Ponzano(also a must-do!), though try to arrive early — it gets busy, fast.
Sergio A.
Tu valoración: 4 Madrid
Sitio muy bueno. En ocasiones un poco agobiante porque hay mucha gente(recomiendo ir pronto). La relación calidad-precio es correcta. Recomiendo sin duda el pez mantequilla macerado en agua de coco, estaba increíble! Luego he probado la burrata(queso tipo mozzarella) con un pesto y también increíble. Y por último el carpaccio de ternera espectacular. Los camareros muy amables y simpáticos. Lo único a echar en cara el poco espacio.
David C.
Tu valoración: 5 Madrid
Nos costó venir porque es el local de moda, siempre está a tope, pero si llegas pronto hay sitio y sino hay que esperar que se vaya liberando. Pedimos vino blanco para acompañar los platos una buena elección el albariño Pazo Barrantes. Aunque son como 22 €. Luego hicimos una selección de la carta empezando por un jamón especial con un aceite de trufa, sal y tomate que te enseñan a prepararlo para comerlo. Después tómate entero a modo de ensalada. Un solomillo que está en su punto y realmente sabroso aunque también algo caro. Además probamos el bacalao y también una patata con chimichurri. Desde luego es un lugar de moda al que hay que venir, aunque de precio sobre todo si tomas vino te subirá. Pero merece la pena.
Borja A.
Tu valoración: 4 Madrid
A ver, no es el ambiente de Tribunal o Lavapiés, que es lo que más me pone a mi. Pero en este caso se pueden soportar las camisas, polos y el ambiente afterwork, la comida bien lo vale. También es cierto que no es un sitio para ir todos los días, porque de precios populares… no mucho, pero merece la pena. Dos veces que he ido, dos veces que había más gente que en la guerra y aunque suele haber bastante rotación del público usuario(siempre he querido usar esta expresión) ir con un grupo de más de 5 personas es un problema y cuesta encontrar un hueco. Estas dos veces que he ido he probado: la Burrata, los huevos con foie, el tartar, el tomate con albahaca, y las gambas. He probado más cosas, pero los golpes que me di de pequeño en la mollera y me sigo dando todavía hay hecho estragos. De todo lo que he probado me quedo con los huevos, hemos repetido y el tartar. Las cantidades no son ni de cerca grandes, pero entiendo que no es el rollo del sitio. En mi lista de próximos platos tengo: el chuletón muy fino, los calcots y las navajas. La decoración es bastante original y es fiel reflejo del nombre del sitio. Que para qué vas a engañar al personal, llamándo a un sitio«Le Fromage» y luego lo más parecido al queso es el olor. Y el servicio es bastante rápido, tienen la mayoría de los platos a medio preparar, sólo falta darles el golpe de calor, o aderezar con salsas, sales, etc.
Paulino M.
Tu valoración: 3 Ciudad Universitaria, Madrid
Mis expectativas de este lugar eran altísimas… es uno de esos locales de los que todo el mundo habla, si el concepto está basado en una sala de despiece y se habla mucho y bien de el, tiene que ser muy bueno. La comida estuvo a la altura de lo esperado: productos de muy alta calidad a un precio razonable. A destacar: chuletón(carpaccio) delicioso, un sashimi de bacalao con arroz crujiente que sorprende y varios platos a base de verdura buenísimos. Por qué un tres? Porque es la incomodidad hecha restaurante… no es sólo que perdiéramos la esperanza de conseguir una silla sino que tardaron en servirnos cuatro platos casi dos horas. Además, el mínimo espacio vital por comensal no es soportable más de un rato. Sólo la amabilidad de los camareros compensa un poco este desorden… Una pena… si sirvieran menos cenas por noche la experiencia sería muchísimo mejor.
Rosa G.
Tu valoración: 4 Madrid
Llevaba mucho tiempo queriendo probar este sitio y durante la Semana Santa, aprovechando una visita al fantástico Museo Geominero, por fin pudimos venir a comer. Llegamos temprano, a las 13:30, porque había leído que se ponía hasta arriba, ya que es más bien pequeño y bastante popular. Efectivamente, a esa hora había ya bastante gente pero pudimos sentarnos sin problemas. Sin embargo, 40 minutos más tarde ya no se cabía y los que iban llegando tenían que estar de pie. La decoración mola mil, como comentan todas las reviews, es lo que más llama la atención, con las típicas cajas en las que viene el pescado y el marisco recubriendo las paredes, los ganchos donde están colgadas los cubiertos, la carta como un inventario de un mercado… Y la comida no se queda atrás en absoluto, no es para nada un sitio normal de tapas o raciones. Cómo presentan cada plato, las explicaciones que recibes por parte de los camareros, los ingredientes y los sabores son propios de un restaurante de alta cocina, aunque en una barra que compartes con más gente tienes que atravesar por debajo para acceder a una de las zonas. Nosotros pedimos todo para compartir y probamos el chuletón poco hecho, que es más bien carpaccio, con aceite de trufa y tomate(había leído que era uno de los platos estrella), el huevo rossini con foie, los chipirones con mayonesa de wasabi y el bacalao en formato«sushi crujiente»(lo sirven como si fuese sashimi, con un cuenco de arroz inflado lleno de polvo de alga nori, en el que lo mojas para se queden los granos pegados, muy bueno!). Estaba todo súper bueno. Aparte, con la bebida te ponen un platillo de patatas fritas con pimentón. De postre nos pedimos la caja de frutas, que son frutas del bosque con un sirope de manzana casero, servido en una mini caja de frutas como las de las fruterías. ¡Muy chulo! Si no le doy las 5 estrellas es por el precio, es un sitio carete, no para ir todos los días a comer ni mucho menos, si no más bien para una ocasión especial o para probarlo. A nosotros nos salió todo por 38 €, con una doble y un refresco, y desde luego nos mereció mucho la pena. No era mucha comida pero estaba todo delicioso y era original y diferente.
Ana C.
Tu valoración: 5 Chueca, Madrid
Tengo que admitir que en mi mente la Sala de Despiece había conseguido las 5 estrellas ya antes de que entrase por primera vez. A mi un sitio o me entra por los ojos o yo difícilmente entraré por mi propio pie. Y con una puesta en escena como la de la Sala de Despiece casi sería feliz de formar parte del mobiliario. Este uno de los poquísimos locales que conozco en los que todo, absolutamente todo, gira en torno a un concepto. En este caso, la recreación de una sala de despiece. La iluminación fría, la barra del bar metalizada que da la sensación de ser completamente aséptica y las paredes y techos recubiertos de cajas para transportar carne son sólo acompañamientos de detalles magníficos, como los menús colgados en ganchos en rieles del techo o los camareros formalísimos que atienden tomando nota en sus ipads y vestidos con bata de laboratorio. Puede que sea porque he visto mucho la serie Dexter y el camarero que me atendió la primera vez era pelirrojo, o tal vez la colección de cuchillos, tijeras y guantes de carnicero que decoran la pared de una manera escrupulosamente ordenada me haya dado una pista. Pero cuando he entrado en este lugar casi siempre me ha venido a la cabeza hablar más de puesta en escena que de decoración. Y es que la ambientación de este lugar le da un espíritu propio, como si entrásemos en una película o en una obra de teatro en los que unos cuantos elementos muy bien puestos convierten la estancia en un personaje más. Y en este caso le dan un «algo» único a la experiencia. Una vez dicho esto, sólo queda analizar lo que en otros bares seríà la parte importante: las cañas, los vinos y las tapas. Y lo cierto es que la Sala de Despiece en este aspecto no decepciona en absoluto. Las cañas bien tiradas y una selección amplia de vinos de todos los rangos de precio convierten este sitio en un buen lugar para quedar a tomar algo sin que suponga crear un agujero en el bolsillo. En cuanto a las raciones, esa ya es otra historia. Aquí hacen alarde de ofrecer siempre productos frescos y de alta calidad, y los precios de las raciones muchas veces van en consonancia. Si bien es cierto que he visto pasar platos con una pinta deliciosa, tampoco he llegado a probar una gran variedad de ellos. Eso sí, no hay que preocuparse porque siempre hay alguna alternativa low-cost. En mi caso, he probado unos calçots de temporada que quitaban el hipo y unos bollitos rellenos de morcilla que no sólo me encantaron por su sabor y su textura, sino que cerraron el círculo de todo lo que me encanta de este sitio con su presentación: envueltos en papel de carnicería con esquemas del despiece de la carne, y con una reducción de vinagre de módena que hacía que pareciese que había gotitas de sangre. ¿Alguien da más?
Lolo R.
Tu valoración: 4 Madrid
La verdad es que tenía infinitas ganas de probar La Sala de Despiece prácticamente desde que conocí de su existencia, porque aquello tenía una pinta maravillosa, aunque solo fuese hablando de la decoración. Pero la cosa es que, como me pilla un poco lejos de «mi circuito», al final no había ido nunca jamás. Y oye, qué sitio tan magnífico, tan maravilloso y tan chulo. Claro que es por eso que su popularidad ha ido creciendo exponencialmente, y se están haciendo literalmente de oro. Y muy bien que me parece, porque al fin y al cabo el que haya tenido la idea ha sabido ejecutarla muy bien. Toda la Sala de Despiece está decorada como si fuese precisamente eso, una sala de despiece. Los camareros están vestidos con batas y con monos de trabajo, y las cartas cuelgan de un raíl de esos en los que suelen ir colgadas vacas. Es simple, pero es realmente divertido, y hace que la experiencia sea única totalmente. Desafortunadamente, ayer era tan pronto que no nos dio ni para probar una ración, pero tengo que ir sin falta, porque cuando nos íbamos empezaron a sacar comida, y aquello tenía una pinta divina. Así que actualizaré mi reseña en consecuencia, pero de momento diré que además de ser un lugar realmente visual; tienen copas de verdejo a 2 €. Vamos, un precio mucho más bajo que otros bares menos atractivos que este…