Naturaleza Divina

Hace algunos años había probado sus comidas, más que nada postres y la verdad me parecían muy bien.
Después de mucho tiempo volví a este lugar de comida naturista/​Krishna y sufrí una gran desilusión
La comida era desabrida y de dudosa calidad. Quizás fue un mal día, quizás el recuerdo la idealizo.
Los platos salados que compre ese día no fueron para nada buenos.
Si esta muy bien un postre muy similar a un brownie
Para mi fue una experiencia bastante mala
Los precios no están mal y al ser medio día estaba lleno de gente. Por eso insisto que quizás fue una excepción

Excelente propuesta. Es una casona con varios espacios diferentes para ubicarse. La onda es de restaurante gourmet. Decoración hindú con onda. No es un «hippón», al punto que hasta daría para un almuerzo /​cena de negocios. La carta es variada. No es vegano estricto sino vegetariano. Sin embargo, en la carta te indican y aclaran que puede pedirse la versión vegana del plato, a opción del cliente.
Fuimos con mis señora y pedimos el plato del día: Por $ 75 x persona incluye un plato principal (muy abundante), vaso de limonada y postre. Nos pareció súper rico y conveniente así que fuimos dos noches seguidas.
El plato del día es siempre diferente pero volvimos a salir muy satisfechos en ambas oportunidades. Imperdible la mayonesa vegana que dan como entrada.
Es sólo con efectivo. Hay lugar para estacionar a una cuadra sobre J. Newbery (sin convenio con el restaurant).

Siempre que pasaba por la puerta el lugar me llamaba la atención. Sobre la misma cuadra hay un templo budista, un local de productos de la India y otras partes de Asia y cosas por el estilo. Si no me equivoco todo es parte de lo mismo, el templo, la tienda y el restaurante.
Naturaleza divina es un típico restaurante de comida vegetariana/​vegana y saludable.
El menú tiene muy buenas opciones (milhojas, tartas, ensaladas, pastas y muchísimas cosas más siempre dentro de este rubro, obviamente). Todo muy rico y original, pero sinceramente me pareció bastante caro para lo que era el tamaño de la porción y sus componentes (¡En el fondo es verdura muchachos!).
Lo bueno es que también hay otras cosas interesantes en el lugar, por ejemplo, cursos de comida vegetariana. Es muy difícil poder hacer este tipo de comida y, digámoslo, que no sea un bodrio insulso. Entonces que la gente que realmente sabe prepararla te tire unos buenos tips, recetas formas de condimentar y mezclar, siempre es un plus.
Vale la pena probar.