En cuanto mi familia supo de este lugar ubicado a unas calles de mi casa, fuimos ver de que se trataba, el lugar parece una casa por fuera, pero a dentro no le pide nada en decoración, servicio y sabor a los mejores bistróts de la ciudad. Aquí por lo general la comida es en tres tiempos, sopa crema, el plato fuerte acompañado de su respectiva ensalada y un postre todo echo con la mejor calidad posible. aquí hace unas años tuvimos una cena familiar y amigos ya pesar de que éramos muchos, el servicio se mantuvo, los platos llegaban en su tiempo y el mesero fue de los mas servicial. Vale la pena que se den una vuelta a este restaurante y lo conozcan a pesar de su ubicación poco conocida para muchos, los que ya lo hemos visitado sabemos que es de lo mejoren en el área, les recomiendo el salmón en crema de almendra.