Rincón Yucateco

This was recommended to my friends and me by a local. It was amazing! The service was very friendly, and it was in a cute open air restaurant that was covered by a canopy.
We got the cochinita pibil, which was highly recommended. My favorite dish! So flavorful and the meat was very tender. The Poc-​Chuc was also delicious! It’s essentially puerco asada — super light and flavorful. The pan de cazón was the special of the day and delicious, saucy, and flavorful! The corn tortillas came in a cute round gourd which kept them very warm. I also got the piña agua fresca, which was light, refreshing, and homemade.
The price was unbelievably affordable to top it off! For 4 dishes, 4 bottled waters, and 2 drinks, it cost a total of $ 22 USD. I would love to come back here if I ever find myself back in Quintana Roo!

El servicio leeeeeeento. La cochinita, nada extravagante. O me toco mala suerte con mucho pellejo. Un lugar tan poco visitado que están acostumbrado a preparar poca comida. A pesar de cerrar hasta la tarde, a las 11am ya no habían salbutes y panuchos. A las 10.30am no había ya jugó de naranja ni algún otro jugo.
Hay muchos lugares más para comer en playa. Prescindiría de este lugar.

Este lugar es buenerrimo! Y como no amarlo si yo soy 100% yucateco y encontrar este tipo de lugares en cualquier parte de la Riviera Maya es la gloria cuando ya esas un poquito harto de lo mismo en mariscos o estilo mexicano-​defeño. Ya cuando estés en Playa del Carmen y extrañes el sazón de la abuela puedes recurrir a este rinconcito de cielo.
Como su slogan lo dice: «El sazón de mi chichi». Chichi es un modismo yucateco en el cual nos referimos a nuestros abuelitos o bisabuelos que en estos casos es muy probable que sigan vivos nuestros bisabuelos como mi chichi que apenas cumplió 101 años la semana pasada. La comida es riquísima, la familia que maneja este negocio es lindísima, muy cálida super amable. Lo mejor en antojitos yucatecos, sopa de lima, panuchos, salbutes, escabeche de pavo, cochinita pibil, huevos motuleños y demás exquisiteces al mejor precio. Literal con $ 50 pesos desayunas o comes super bien.

Qué puedo decir, ya le traía ganas a este lugar desde hace mucho tiempo. Me llamaba la atención su decoración tan yucateca, mucha madera, jícaras, trajes típicos, mucho verde, no sé, el ambiente de este lugar es muy amigable, invita a pasar.
Y bueno, hace poco salí temprano sin desayunar y ya era como mediodía y estaba a nada de una huelga interior, así que decidí alimentar al cuerpecito. No andaba cerca, pero me acordé y no iba a dejar pasar esta oportunidad. Llegué y ya era mediodía, justo la hora en la que dejan de servir desayunos, pero bien buena onda los chavos, me dijeron que no habría problema. Pedí unos huevos motuleños, ¡señores huevos motuleños! Para los que no saben, los huevos motuleños son dos tortillas doraditas, con dos huevos estrellados arriba, bañados en una salsita roja y se sirve con jamón en cuadritos, chícharos y rodajas de plátano macho, ¡qué cosa más deliciosa!, hacen una salsa picante de habanero, que está increíble, queda perfecto con los huevos o con lo que quieras.
El precio está como para mexicanos, mi desayunito costó $ 55 MXP, así que súper accesible y una sazón, riquísima. Descansan los domingos, porque como dice su letrero «Si tu xnuck (esposa) no te cocina los domingos, nosotros tampoco». Chistositos y todo.