Escaleras del fortín

Mi mamá venía a caminar diario y quería que yo hiciera ejercicio estando pequeña. Me moría en estas escaleras pero lo digo en serio! (Resulto que era asmatica la niña) jajaja si ya después de controlar el asma empecé a amar el ejercició y con el grupo de entrenamiento urbano nos tocaba de repente venir a correr aqui. Ahora me gusta mucho. Ademas de que la gente viene con sus peluditos y me divierte mucho verlos, actualmente se encuentra bien iluminada de nohe y todo. Hace años no estaba asi, no queda mas que disfrutarlo y conservarlo asi. No tiren basura, recoje las heces de los peludos y etc.
Las escaleras llevan al auditorio guelaguetza al planetario al observatorio o a los jueguitos que no se si esten todavia. Para hacer ejercicio genial.

Ideales para hacer ejercicio, para platicar, para salir con tu mascota, pero si eres de las personas que no hacen ejercicio y odian subir escaleras, mejor no vengas ya que si son muchas, para los demás pues no queda más que decir que van a tener un buen chamorro con 2 vueltas :)

Si lo que necesitas es bajar unos cuantos kilitos, en este lugar seguro lo haces, las escaleras del fortín son la mera onda para hacer ejercicio, lo mejor es que la recompensa que tienes al llegar al final del camino es que llegas al Auditorio Guelaguetza.
Normalmente no son muy recurridas pero cuando se lleva a cabo la fiesta más grande Oaxaca están a reventar.
La gente que vive a los alrededores se ha preocupado mucho por cuidar la limpieza y el aspecto del lugar pues siempre que he necesitado transitar por aquí está muy limpio.

Uno de los lugares más emblemáticos para los enamorados o para aquellas personas que gustan de hacer ejercicio por las mañanas, ya que están de subida, si que sudarás la gota gorda.
He tenido la oportunidad de recorrerlas tanto en la mañana como en la tarde, y he de decir que disfruto más caminar por las tarde, ya que su iluminación es muy tenue, algo que en lo particular te relaja después de un día muy movido, el cantar de los pájaros, será música para tus oídos, ya que estos se buscan árboles frondosos para dormir.
Los días en los que estas se encuentra más transitadas, son los Lunes del Cerro, ya que estas llevan al Auditorio Guelaguetza, donde se celebra la máxima fiesta de Oaxaca; algo que me gusta del lugar es que hay murales muy representativos para nosotros los oaxaqueños.

Estas escaleras son idóneas para hacer ejercicio, te llevan directo al cerro del fortín. Comienzas a subirlas desde la calle de crespo y mientras corres, trotas o caminas la sombra de los arboles te va acompañando, así que n hay problema con los rayos del sol. Insisto que son buenas para hacer ejercicio porque las escaleras no son seguidas, suber unos 6 escalones y hay un descanso, después otros 6 escalones y un descanso y así sucesivamente. Pero solo con caminarlas ya aceleras los latidos de tu corazón. Lo malo es que aveces por las mañanas están solas y se ha prestado a que asalten a las personas, por eso tienes que ir acompañado o bien atento.
Todo esto cambia cuando son las fiestas del Lunes del Cerro, porque se llena de puestos ambulantes, vendedores de comida, de recuerdos, de vídeos, etc. Lo mejor es que los mismos vecinos de las escaleras hacen su agosto y también se ponen a vender comida u ofrecen el servicio de baños públicos. Es totalmente diferente cuando son os lunes del cerro a cuando es un día normal.

Pensar en las escaleras del fortín que suben desde la calle de crespo hasta el auditorio Guelaguetza, me hacen recordar la época en que iba a correr aquí y saber que iba a ser muy muy cansado, subir y bajar al menos dos veces era todo un viacrucis para mí, pero realmente valíà la pena por el ejercicio, aunque tiene unos años que voy a correr, aún veo en las mañanas a las personas corriendo y ahora que fue remodelado y cuenta con mayor iluminación el lugar es mucho más seguro que antes, ahora durante las noches el lugar es muy hermoso con la iluminación de colores, lo que me agrada mucho ya que durante un tiempo el lugar comenzó a tomar muy mala reputación por la falta de iluminación.
Durante la época de las fiestas de la Guelaguetza estas escaleras se encuentran muy transitadas ya que a mi parecer son la mejor ruta para llegar al auditorio, durante esta época el lugar se llena de un sin número de puestos, donde puedes encontrar desde ropa típica, recuerdos, chapulines, dulces, sombreros, etc.

Estas escaleras son la mejor manera de subir al auditorio Guelaguetza, sobre todo cuando es la fiesta de los lunes del cerro (Guelaguetza) en cada mes de julio.
El recorrido empieza en la calle de Crespo llegando directamente a la explanada del auditorio, y no es que sea un destino turístico pero si estas pensando ir en julio seguro las ocuparás.
Ahora están bastante cuidadas e iluminadas, puedes encontrar gente que las ocupa de manera constante para ejercitarse ya sea de día o de noche. Cuenta con una gran cantidad de arboles lo que hace que sea mas fresco el caminar por aquí.
También en algunas partes encontrarás puestos ambulantes que ofrecen de desayunar o simplemente una bebida refrescante.
Ir a dar una buena caminata ya sea solo o acompañado de verdad que nunca le cae mal al cuerpo y mas en este lugar que no es del todo cotidiano.

Las escaleras del Fortín son uno de esos espacios típicamente oaxaqueños. Conducen desde la calle de Crespo hasta el auditorio Guelaguetza. Es una subida obligada para los paseantes y asistentes a la fiesta de la Guelaguetza los lunes del Cerro, en julio de cada año. En estas fechas la escalera se llena de puestos de comida y chácharas y gente que sube y que baja incesantemente. Los demás días del año es un muy buen paseito para mejorar la condición física o parejitas de novios que buscan un lugar un tanto escondido de las miradas indiscretas.
Recientemente las autoridades municipales en el plan de embellecer la ciudad de Oaxaca le dieron su manita de gato, podando árboles, mejorando la iluminación con luces azules y arreglando algunas partes muy dañadas. Eso más un plan vecinal ha aumentando la seguridad y la afluencia de visitantes en la zona, que hace no mucho se evitaba por los asaltos y los historias que corrían de las escaleras del Fortín.

En el reencuentro con unas amigas decidimos caminar por estas escaleras, el motivo es por el hecho de que cuando se rompen los lazos de amistad por uno u otro motivo hay que encontrar el lugar preciso para poder hablar y hacer las pases, caminando nos dimos cuenta que ya estabamos subiendo estas escaleras y fue un patetico juego de por cada insulto que te di subamos un escalon, terminamos llegando hasta la ultima escalera y tuvimos que bajar y volverlo hacer mas de dos veces. Caminando y subiendo cada una de ellas me di cuenta que quizas para nosotras solo fue un reto mas de lo que en realidad refleja el lugar, aunque fue bastante comico darnos cuenta que en verdad es una gran subida, aparte que el panorama a la hora de caminar es muy acogedor, asi que es un buen lugar para ir a caminar, aparte que puedes llegar a lo que es el mirador. Dentro de lo que cabe las escaleras empiezan en sabino crespo y aunque no es una de las opciones mas viables para caminar de noche, de dia si es una muy buena opcion cuando se trata de hacer un poco de ejercicio.

La primera vez que fui a un evento en el auditorio guelaguetza tenía 15 años, y era emocionante subir las escaleras y como estas te llevaban al auditorio a disfrutar de tu evento favorito.
Pero no es por esto que son famosas éstas escaleras, no. Todas las mañanas cuando era adolescente, pasaba por el lugar, y veía como personas se ejercitaban subiendo y bajando esas escaleras; después, platicando con unos compañeros de escuela, decidimos ir cada Sábado a hacer ejercicio allí. Debo decirles que el primer día fue bastante para mi deteriorada condición física, pero te aseguro, que ahí es donde te reencuentras con parte de tu salud y condición. Así es, sin necesidad de pagar en gimnasios o cosas por el estilo puedes hacer muy buena pierna.

Recientemente mi peor temor volvió a suceder, subir las escaleras del Fortín y es que es el medio para llegar más rápido al auditorio Guelaguetza pero rápido nunca ah significado ser fácil. Desde hace muchos años al llegar julio mi papá y yo siempre subimos estas escaleras (somos fanáticos de la Guelaguetza) como tradición, es padrisimo ir junto con otros tantos compartiendo la emoción del momento, desde que vas subiendo ya se escucha la música en el auditorio y se puede sentir la emoción de la gente que se contagia a todos los que apenas van subiendo, es un ambiente lleno de alegría, una verdadera fiesta dentro de la fiesta (como un precopeo). Los descansos de las escalinatas se llenan de vendedores con muchos productos diferentes, desde juguetes para los niños hasta ropa y artesanías. Venden diferentes frutas de temporada, mis favoritas son las tunas, las que ya venden peladas y bien frías. Otra fruta de mis favoritas y que solo consigo en esta época son son cajinicuiles, una vaina de color verde que por dentro lleva sus semillas recubiertas de una clase de algodoncillo que es la parte que se come y que tienen un sabor muy peculiar y sobre todo es muy refrescante.
Recientemente utilice de nuevo estas escaleras para llegar al auditorio, recientemente fueron remodeladas, no las hicieron automticas, pero el tunel para evitar el tráfico de la calle quedo bastante bien, esta totalmente iluminado y esta adornado con murales que contrastan con el folclor del estado y que para los lunes del cerro queda ideal para los turistas. Si van a utilizar estas escaleras es necesario un bote de agua o algo para refrescarse, eviten llevar muchas cosas, solo lo necesario y nada más.

Es imposible dejar de admirar los bellos paisajes de la capital Oaxaqueña mediante vas subiendo escalón por escalón, cuando se transita por las escaleras de acceso al Cerro del Fortín se puede disfrutar del hermoso juego de luz y color que se aprecia por la iluminación arquitectónica.
Aparte de admirar la belleza que se puede apreciar, asistir a algún evento del Auditorio Guelaguetza o simplemente por puro placer es una excelente idea para ejercitarte y mira que te lo digo por experiencia realmente son cansadas de subir y bajar, y bueno el resultado será maravilloso pues mantendrás buena condición física.

Hola Unilocalers:
Cuando recién llegué a vivir a la ciudad de Oaxaca, conocí y diariamente podía apreciar desde el otro lado de ellas (es decir desde la universidad que está al lado, mi segunda casa) como las personas se ejercitan subiendo y bajando las escaleras.
Y un día mis nuevos compañer@s y yo nos animamos a caminar y subimos las escaleras fue tan divertido porque varios eramos de otras regiones y no conocíamos lo larga y cansado que era el subirla, la verdad nos costo mucho pero entre risas y platicas y con la lengua de fuera llegamos hasta el mirador, y el auditorio Guelaguetza, y por un rato apreciamos y tomamos muchas fotos de la gran ciudad en la que ahora sería nuestra casa.
En ese entonces aún se podía caminar con seguridad, pero con el paso del tiempo ya no es un lugar muy seguro porque con frecuencia se escucha que hay uno que otro robo, así que tomen sus precauciones. Pero cuando está el evento de la Guelaguetza en el mes de julio hay bastantes personas transitando por el lugar y vigilancia.

Este sitio sin lugar a dudad es para personas con excelente condición física o para aquellos que quieren practicar algún deporte. Si quieres conocer una forma de acceso al cerro del Fortín, estas escaleras es una de ellas. Hubo un tiempo en que a diario subía y bajaba esas escaleras por que trabajaba en el cerro del Fortín. La subida es cansada y muchas veces llegaba sudado y hasta con la lengua de fuera, la bajada como siempre es más fácil aunque no deja de ser cansada.
Hace no mucho volví a ir a un evento que se realizo en el auditorio Guelaguetza y yendo con los amigos se hace más ameno el camino. Aunque para todos es un reto subir estas larguísimas escaleras. Ya para bajar fue súper divertido. Definitivamente si eres de esas personas que no tienen condición física o si ya sientes pasos en la azotea evita a toda costa estas hermosas pero desgastantes escaleras.

Las escaleras del fortín o de Crespo, como se conoce, es un recorrido que si vas a pasar varios días en Oaxaca y sobre todo si coincides en algún Lunes del Cerro, debes hacer, digo esto porque creo que hay sitios más importantes y cosas más trascendentes para hacer que cansarte con esta subida, pero vale la pena hacerlo por ser un clásico recorrido para los oaxaqueños sobre todo en el mes de julio.
No son aptas para cardiacos, pues se trata de subir al cerro, literalmente, a través de una larga escalinata que te quitará el aliento (a mí me ha hecho sudar frío) y que conduce al auditorio Guelaguetza y en general al cerro del fortín donde está el mirador, el planetario y el observatorio.
Todo esto es una fiesta los dos últimos lunes de julio, pero los demás días se respira paz, ya que en otras fechas casi no hay gente caminando por aquí, tal vez en las mañanas hay corredores ejercitándose; pero el resto del día debes ser cauteloso ya que lo de «paz» no tiene nada que ver con lo peligroso que una caminata puede resultar ya que desafortunadamente ocurren algunos asaltos en este recorrido; mientras más alto, más peligroso, es decir, en el observatorio ya debes tener mucho cuidado.
Si no fuera por lo del peligro, diría que es altamente recomendable subir a ver la ciudad, pues de aquí se han tomado las mejores fotografías de la Verde Antequera.