Me sorprendí, llegué a la confusión hasta el punto de pensar que estaba en otro de mis sueños hiperrealistas, y es que iba caminado por la ciudad de México cuando de un momento a otro ya estaba inmerso en alguna ciudad de China… Claro, poco después mi acompañante me dijo que me calmara, que se trataba de la comunidad orienta de china que había forjado un barrio en nuestra capital. Pero vaya sorpresa, incluso, en la parte superior de los múltiples locales chinos, pude ver cómo viven apilados, tal como en su tierra. Decidí aprovechar la oportunidad e ingresamos a este restaurante para ver de qué lado masca la iguana, es decir: para conocer qué tan buenos son los chinos de este lugar para producir sabores exquisitos capaces de envolver de manera magistral la boca de un comensal exigente al punto de quedar satisfecho en plenitud. No diré mucho, sólo que el sazón es mucho mejor al de los demás lugares en el Distrito Federal en donde te ofrecen comida de este tipo; considero que al ser el corazón de los chinos, se apasionan más por representar su comida, o tal vez ahí se hallen los primeros y más expertos de la cocina, no lo sé, pero sí quiero que vayan a conocer la diferencia.
Jonathan S.
Tu valoración: 5 Mexico City, México
Desde hacia tiempo que mi abuela quería comer buena comida oriental. Nuestra cruzada para conseguir los regalos navideños nos llevó al Barrio Chino, instalado en la calle de Dolores, en donde decidimos clavarle a algo el diente. A pesar de la copiosa cantidad de restaurantes que ofrecen esta clase de servicio, la amabilidad de un mesero nos llevó al Restaurant Bar Oriental, que a pesar de tener un nombre bastante genérico, cuenta con un servicio y un cuerpo de meseros que no dejarán molesto ni al más exigente cliente. Se pueden ordenar platillos a la carta, aunque los paquetes que ofrece el establecimiento me parecen bastante bien balanceados y abundantes. En nuestro caso ordenamos el paquete número dos, planeado para dos personas en adelante. Como entrada se ofrecen unos palitos de pan que pueden sumergirse en salsa de tomate de la casa con una pizca de fortísima mostaza. Luego llegan los platos fuertes: chop suey, arroz frito con verduras, alitas de pollo fritas, camarón rebosado, rollos primavera y una deliciosa sopa de pollo, con grandes trozos de carne bien cocida. En cuanto a las bebidas, el menú no sólo ofrece aguas de temporada y refrescos, pues se pueden pedir distintos cocteles, desde los más rudimentarios como la cuba hasta bebidas más elaboradas, como el tequila sunrise. Como detalle especial, la casa ofrece una tetera con té de jazmín, que además de fragante aperitivo, funciona muy bien como sabroso acompañante de los platillos.