En esta pozoleria sin duda el pozole está muy bueno, pero hay otros platillos del menú que tienen mi corazón, como la cecina de res, una buena porción de carne acompañada de frijoles charros, cebollitas, y nopales, las clásicas enchiladas de mole, con un mole más dulson que picosito, enchiladas verdes, birria, tacos de cochinita, tostadas de pata, pollo y lomo, estas últimas que no he probado en ningun otro lugar me parecen muy buenas y a veces solo manejo hasta allá por ellas. Sin duda lo que me gusta más del lugar es la posibilidad de preparar tu pozole como tú quieras, a diferencia de otras pozolerias grandes, ya que a tu mesa llevan un platón con lechuga, cebolla, rabanitos y aguacate y para acompañarlo crema y tostadas incluidas también. Y para los niños, que ahora que mi hija crezca nos vendrá muy bien, hay mini pozole un platito con una porción pequeña de pozole, que igual no necesitas ser niño, puede ser para cuando se antoja el pozole y otra cosita. Y por difícil que sea siempre dejo un huequito para el postre, pues tienen una buena selección de ellos: flan casero o napolitano y una selección buenísima de pasteles(que he podidio ver son de Montparnasse), acompañadito de un café de olla como no.
Alfonso R.
Tu valoración: 5 Mexico City, México
En el barrio de Santa Anita, zona con una amplia tradición culinaria como lo demuestra la presencia histórica de los huaraches del mercado de Jamaica o de la birria El paisa, en la pozolería La troje se cocina uno de los pozoles más ricos que la Ciudad de México puede ofrecer. Ubicado sobre la acera sur de la calle Plan de Ayala y a media cuadra de la avenida de Calzada de la Viga, este pequeño negocio se especializa en preparar, además de pozole, algunos de los platillos típicos de la zona centro de nuestro país: enchiladas, chilaquiles y tostadas de pata. Así, La Troje, que cuenta con poco más de diez años desde su fundación, ofrece el ambiente familiar y la calidez típica de una fonda tradicional que invita, a precios accesibles y con porciones generosas, a pasar la tarde de cualquier fin de semana rodeado de un ambiente festivo, propio de uno de los tantos barrios populares de nuestra ciudad. Además del pozole, te recomiendo las tostadas de pata y las enchiladas verdes. Eso sí, aguas con las salsas, son de consideración.