Ésta reseña puede que no sea la más objetiva, porque fue el festín post-Spartan Race y teníamos tal ansia viva por comer que hasta una coliflor guisada nos hubiera parecido gloria bendita. Estábamos reventaditos de la carrera y pedimos el pequeño festín vía una de tantas apps de reparto a domicilio; puntazo a su favor estar presente en tales plataformas, es muy cómodo cuando no tienes efectivo en casa y no quieres levantarte más que a abrirle la puerta cuando llega con el pedido. Pedimos arroz, dos tipos distintos de tallarines –alerta de adicta a los noodles!!!- cerdo agridulce, pollo frito empanado con almendras y dos coca colas, que resultaron ser de 1,5L cada una, lo que nos infló un poco el total, pero aún así el precio fue correcto, llegaron en media horita a casa y la comida estuvo muy buena. Especialmente los tallarines chinos(eran noodles de arroz) con verduras y pollo. Habrá que echarles una visita en el local, porque la comida estaba muy buena y hay cosas de su menú que quisiera probar.
Palo G.
Tu valoración: 5 Oakhurst, Estados Unidos
Sin duda, el mejor chino de la ciudad. Bueno, bonito y barato. Tanto para comer allí, como para pedir a casa. Sin duda, el Pato Pekín mas bueno que he probado.
Celes T.
Tu valoración: 4 Valencia
Bueno, bonito y barato. Este es mi chino para que me traigan a casa los domingos que no me apetece cocinar. También he comido allí bastantes veces(lo tengo al lado de casa) y el trato es maravilloso, qué majos son, de verdad. :_) Recomiendo la ternera con cebolla o la ternera con pimientos, cortada en tiritas, tierna y con una salsita riquísima. La sopa de tiburón también está buenísima. No recomiendo pedir el sau-mai(creo que es congelado, vamos que no está muy allá). Salvo eso, todo lo demás que he pedido ha estado bueno, nada grasiento. Si pedís por las páginas de «comida rápida» como la nevera roja y just eat, siempre hacen descuentillos para llevar a casa.
Patricia H.
Tu valoración: 4 Valencia
Hace mucho tiempo, cuando pensaba en comida china, siempre me venía a la cabeza los chistes de mal gusto sobre la desaparición de mascotas por la zona, así que no era muy aficionada. Bromas aparte y ahora que ya soy aficionada a probar comida de diferentes países, la china es un tipo de cocina que incorporé a mi dieta hace años. Hace años, una amiga me habló muy bien de este local, que además, está por nuestra zona, así que decidimos probar. Ahora somos asiduos a él, sobre todo, a su servicio a domicilio, ya que suele ser un aliado perfecto para las cenas en casa con amigos en las que no te apetece cocinar. Pese a no ser una comida por la que mataría ya que prefiero la española, los tallarines de la casa los hacen muy buenos y es el plato fijo de nuestro pedido, así como el chop-suey de ternera. El pollo solemos alternar entre el clásico con almendras o con limón. Según los que seamos esa noche, o el hambre que tengamos, hemos llegado a probar cerdo agridulce, ternera con bambú y setas, wan-tun frito, rollitos de primavera, … En general las raciones son adecuadas y la calidad es buena y, como norma general, suelen regalarnos el pan de gambas o algún bote de cerveza. También hemos cenado en el restaurante, una noche de fallas cualquiera. Los platos que nos pedimos en estas ocasiones, suelen ser diferentes a los que solemos pedirnos para llevar, por ejemplo probamos los combinados con dim sum que siempre te sirven en las«cajas sorpresa» que llamo yo y que sirven para mantener el calor. Lo sorprendente es que, al nano pese a lo «especial» que es con la comida, puede pedirse el pollo al limón o arroz tres delicias, que se lo comerá sin rechistar, aunque no solemos incluirlo como comensal cuando pedimos para casa. Servicio rápido y amable, buena relación calidad-precio, local limpio, … seguiremos utilizando sus servicios. Por cierto, han dejado olvidada la puerta que tanto le gustaba a Maria P. tipo Port Aventura.
Maite F.
Tu valoración: 3 Gandia, Valencia
En mi piso creo que desde siempre hemos tenido la publicidad de este restaurante chino para utilizar en caso de emergencia(llámese tener perritis agua y ser incapaz de acercarte a por comida a ninguna parte y excusarte en que llevas el pijama) Y además es que nos hace mucha gracia su nombre: «Satisfecho». Nunca he tenido la oportunidad de ir a cenar al local. Me basta con que me traigan su arroz tres delicias, sus tallarines y su pan chino a casa. Buen precio. ¡Y rápidos!
María P.
Tu valoración: 3 Valencia
Paso varias veces al día por delante de este restaurante y lo que más me fascina de él, de entre tantos similares que hay, es que es de los pocos que conserva esta entrada con aspecto de Port Aventura. Considero que es algo que, junto con esa música tan relajante, no debería desaparecer de los restaurantes chinos. Sólo he tenido el gusto de cenar una vez en él, por el simple hecho de que cuando voy a cenar a estos sitios mi mente de alguna forma elige el más alejado de casa. Supongo que para que todo lo engullido vaya bajando un poco por el camino. Y es que en el Satisfecho te quedas… pues eso mismo; si es que son los padres del marketing, nada de Mad Men americanos. Hay dos detalles que me gustan mucho. Uno, es que las mesas son redondas y cuentan con esa ruleta de madera en el centro que permite ir rotando los platos para hacer más fácil el autoservicio para los menús compartidos. Lo segundo, es que los camareros son el colmo de lo servicial, pero no al estilo esclavista al que suelen acostumbrarnos, sino que el trato es cuidado hasta el punto de servirte al final de la cena unos cuenquitos individuales con pequeñas toallas húmedas para limpiarse las manos. Quizá estas dos cosas sean más que habituales en otros restaurantes asiáticos, la verdad no es que sea una experta en el tema, pero en uno de presupuesto moderado es la primera y única vez que lo he visto. Ah, los abanicos con escenas costumbristas de una familia de pandas también me parecen esenciales, equivalentes a las de caza con perros de la pared de tu abuela.