La Tasqueta

La verdad es que estaba lleno cada día que pasaba por aquí y a cualquier hora y eso dice bastante.
El camarero que nos atendió fue un solete. No solo atento y rápido sino que además era un cachondo :)
Es cierto que para cuando nos sentamos en su terracita, no tenían de todo pero rápidamente nos trajo la lista con lo que sí tenían y la verdad que salimos encantadas y bien cenadas y, sobre todo, relajadas después de unas cuantas risas :)
Probamos su pulpo a la gallega, ensaladilla rusa deliciosa y patatas bravas con un toque especial de hierbabuena en su salsa que la verdad me gustó bastante y para mí, todo un placer tomar esas patatas con la reina de los bravatones de Barcelona jejeje.
Estoy segura de que el resto de su carta bien merece que vuelva a seguir probando cositas, así que seguro que si tengo oportunidad, volveré.
Por cierto, me encanta el barrio donde está ubicado este bar. Está lleno de comercios curiosos, con una pinta estupenda y cuidando mucho los detalles.

Pues estaba entre las 3 y las 4 estrellas, pero gracias al camarero este bar se va a llevar la valoración naranja :)
Servicio rápido, amable y familiar (tan familiar que en una de las mesas de la terraza estaba la madre del camarero con unos amigos en plan risas).
No tenían todo lo que pedimos (se nos habían antojado una carrillada y unas croquetas artesanas pero se les habían acabado), pero lo solucionamos con unas bravas (con especies y un toque a hierbabuena), una ensaladilla rusa (estaba muy rica), y un pulpo a la gallega (muy bueno también).
La verdad es que estuvimos muy a gusto; si viviera en Valencia seguramente acabaría allí a menudo :)

De momento lo dejo en 3 estrellas.
Antiguo bar de toda la vida, que tuvo que cerrar, y en su lugar han abierto este. Una buena remodelación. Servicio atento. Buena terracita con estufas. Sombrillas también, no sea que llueva (ahora en invierno), o nos achicharremos (en verano).
Sólo he probado el café, y correcto.
Las tapas tienen buena pinta, pero hoy no puedo probarlas. Los precios tienen mejor pinta aún. Comedidos
Seguiremos informando…

Fuimos a cenar a la Tasqueta, y la verdad es que estaba lleno!
Menos mal que fuimos previsoras y habíamos reservado mesa.
Eramos 4 y cenamos todo de tapitas:
— Tortitas de camarón: no soy muy fan de este producto en sí, así que puedo dar pocas referencias.
— Croquetas caseras: Muy buenas! y con un tamaño interesante!
— Patatas bravas: a ver, malas no estaban, pero tenían un fondo de sabor a curry que a mí no me convención, pero olé por intentar innovar!
— Cazuelita de patatas, huevo y jamón: lo de cazuelita es sólo un decir, porque aquello era una sartén enorme!
En resumen, la cena no estuvo mal, pero tampoco me fui entusiasmada y deseando volver… eso si, el precio muy muy asequible, cenamos por 10 €!!
Así que si quieres reunirte con amigos, picar algo y pagar poco es buen sitio, pero no para una cena para deslumbrar, correcto y punto.

Está lleno desde el primer día, y es que la oferta es buena, bonita y barata ¿qué más queremos? Los desayunos ricos y abundantes, las tostadas buenísimas, el almuerzo con unos bocatas que se salen del plato y a un precio único (4 euros con bebida, café y olivas). Se nota que tienen ganas de tratar bien al cliente y lo consiguen.
El cocinero es un artista, usa productos de primera y hace unos potajes y pucheros que son equivalentes al significado de contundente. ¿Habéis oído hablar del puchero de Segorbe, pues lo tenían una vez de plato del día y aquello alimentaba de olerlo. El local por dentro es pequeñito, con una barra de madera y unas mesitas, muy acogedor. Tienen una tele grande para disfrutar de los partidos (a los que les guste) y su fuerte es la terraza, abarrotada a todas horas, con solecito en época cálida y estufas-​seta en invierno.
La oferta es variada, pero principalmente hacen platos caseros y tradicionales. Tenemos pendiente ir a comer, porque los almuerzos son de categoría. Siempre tienen un bocata del día y es el que incluye la oferta de los 4 euros. En cuanto a la atención son muy amables, están pendientes, te plantan la sonrisa en cuanto pueden, en fin yo creo que así les va a ir genial.
Están abiertos muchas horas, eso es verdad, y una de las dueñas me comentó que nunca saben cuándo les va a llegar el mogollón de gente. Yo creo que con el planteamiento que tienen el mogollón va a ser la tónica del lugar. Si existiera un inhibidor de humos y puros en la terraza ya sería perfecto ¿cuándo lo inventarán?

Nuevo bar en el barrio. Por ahora sólo he ido a almorzar una vez y genial porque los findes tiene almuerzo popular! Los chicos son muy majos y se les ve con ganas e ilusión. Espero que les vaya genial. Yo les echaré una mano.