Muelle de Nueva York

#LunesDeReseña
Creo que la recuperación del Muelle de Nueva York que se ha hecho en los últimos años, y concretamente gracias a las obras que terminaron (si no recuerdo mal) allá por 2012, ha sido un enorme acierto para la ciudad de Sevilla.
Se ha recuperado para el público un entorno, junto a esta parte del Guadalquivir, por el que da gusto pasear, correr o ir en bici. Y se nota el esfuerzo por integrar esta zona de la ciudad y hacerla más abierta tanto al turismo como a los propios sevillanos.
Si te gusta pasear y quieres «escapar» del jaleo del centro, que sepas que Sevilla tiene mucho más que sus monumentos de piedra: el Guadalquivir es todo un monumento natural al que le debemos mucho, y creo que el recorrido que ofrece el Muelle de Nueva York bien merece una vueltecita de vez en cuando, seas o no de por aquí.

Es un lugar agradable por la zona en la que se encuentra (rehabilitada hace poco) y con el río de fondo hacen que la estancia sea muy recomendada. El local es pequeño pero justo para lo que es, un bar de copa. Tiene buena música y las copas no son muy caras.
Si te encuentras en la zona del Prado/​Chile recomiendo que andes un poco más, que dejes los bares de siempre de lado y pruebes este lugar

Me declaro fan incondicional de este renovado espacio en Sevilla, en una de las orillas menos transitadas del río en esta ciudad y que con un lavado de cara enorme ha recibido una bocanada de aire fresco que la convierte en una zona de los más apetecible para muchas actividades.
Últimamente están de moda dos locales de café y copas con vistas al río en este espacio conocido como Muelle de Nueva York, en los días soleados y con temperaturas primaverales estos dos bares con ambiente chil out, silloncitos de mimbre y barra de mojitos, caipirinhas y otras bebidas alcohólicas se ponen hasta la bandera. ¿Tipo de ambiente? sobre todo gente joven con ganas de tomarse una copa en una zona de moda (postureo), para que os hagáis una idea el ambiente es similar al del kiosko Ojeda en el Paseo Colón.
Pero el Muelle de Nueva York es mucho más que esos dos bares, es una zona de paseo con unos soportales ajardinados y una fuente donde se dan cita deportistas y gente con ganas de tomar el aire junto al río. Es de lo más habitual cruzarse con corredores, ciclistas, parejas o gente paseando a sus animales. Sirve de enlace entre el Puente de San Telmo y el Muelle de las Delicias, poco a poco se está convirtiendo en una zona agradable que le roba parte del protagonismo a la tan manida orilla del río paralela al Paseo Colón, monumento a la tolerancia y Torre del oro.
¿Por qué se llama Muelle de Nueva York? la respuesta es más que obvia, se construyó este muelle en 1905 (maravillosos año) y desde él se embarcaba a Estados Unidos.
Ahora solo toca ir a comprobar las bondades de este muelle y salir a pasear por esta orilla del río.

Sin duda un sitio de referencia para los días de sol en Sevilla, no sólo por poder pasear tranquilamente al lado del río, sino por la posibilidad que te brinda este sitio de disfrutar del ambientazo que hay las tardes-​noches del fin de semana.
La culpa de ello lo tienen los dos nuevos chiringuitos situados en este muelle, preparados para tomar algo bajo el sol. Puedes elegir entre coger una amaca, beber de pie o sentados en torno a una mesita, pero todos con música electrónica de fondo al más puro estilo ibicenco.
Intenta llegar tempranito, a eso de las 16h, porque suele llenarse rápido, y aconsejo quedarse de pie, puesto que al ser un espacio muy amplio y abierto al aire libre, estés donde estés podrás seguir escuchando música.
Los precios no están desorbitados para la demanda que hay, puesto que las cervezas de importación valen a 2’5 €, que en otros sitios encuentras a 3 €, el servicio muy eficiente y el ambiente también me gusta porque hay de todo, y a diferencia de los sitios cerrados, aquí sí puedo venir en botines (faltaría más).
El único inconveniente del sitio son los baños, para los que tienes que esperar largas colas, pero bueno, el buen rato que puedas echar en un marco inmejorable (al lado del río), lo merece.
¡No lo dudes un día de sol y pásate! :)

Paseo público abierto a finales de 2012 y que, en mi opinión, ya se ha consolidado bastante entre los sevillanos, a pesar de rehabilitarse con una clara vocación turística.
Viejo muelle del puerto, se encuentra entre el Puente de San Telmo y el de los Remedios, dando continuidad al paseo fluvial de la dársena (en la margen este) desde San Jerónimo hasta el cercano Muelle de las Delicias.
Bien ajardinado, destaca la pérgola vegetal que discurre paralela al camino de albero, así como las fuentes, bonitas ornamentalmente pero quizá algo ruidosas. Otros elementos del paseo son un mosaico recientemente inaugurado famoso por sus erratas, varios puntos de atraque para acceder a embarcaciones y, por supuesto, el kiosco-​bar, donde en las tardes soleadas se junta mucha gente a tomar copas y que pone música (comercial) al recinto.

el sitio es muy bonito pero, todavía huele a nuevo como quien dice y los días en los que e ido yo a estado un poco solitario. las ventajas que tiene, es que te puedes sentar en los banquitos mirando al rio, tomar el solito, leerte un libro o simplemente observar el ir y venir de gente haciendo
cuestión es que vayas solo o acompañado disfrutes de el sitio y haz como yo relajatee !!!