Copérnico

Compras la entrada y después de hacer cola durante más de media hora quedas a expensas de que los matones de la puerta te dejen entrar. Así que si no queréis jugárnosla y perder el dinerito de la entrada y vuestro tiempo, no vayáis por allí porque el sitio no merece la pena. El ambiente está masificado y no es nada recomendable; mi amiga vio como le ponían un aditivo a su copa. La policía comenta, que es un sitio poco recomendable donde prácticamente todos todos días hay peleas y sangre. A las porteras se las va la cabeza y se lían a repartir puñetazos sin argumento. Están frustradas y hasta ese trabajo las viene grande.

He ido bastantes veces y no realmente porque me apasione, simplemente era un lugar medianamente próximo para todo el mundo cuando salíamos juntos los compañeros de clase.
A ver… Ambiente hay, como en cualquier discoteca, pero según el día el petardeo que puedes encontrarte allí es importante. Si lo que te apetece es echarte unos bailes sin complicarte demasiado, sirve perfectamente.
Eso sí, el garrafón que ponen… agüita.

El Copérnico tiene dos facetas. A saber:
La primera y la que más aprecio es la de sala de conciertos. Es bastante más pequeña que la Riviera y más grande que salas del centro, tipo La Palma o el Laboratorio. Así que sigues estando cerca del escenario y se ve bien, pero no estás empotrado contra la pared y sin poder dar un trago al tercio. Y el sonido… pues en la línea de la Riviera.
La segunda faceta es su pan de cada finde, la de discoteca/​pub que cierra más que tarde. Le hace la competencia a la Inn y Penélope en horario. Aunque la fauna que encuentras es algo diferente, menos choni. Su franja de edad es la habitual de la zona. Porque en el Copérnico encontrarás universitarios recién desvirgados o que buscan serlo. También es habitual encontrar algún grupo o individuo mayor, pero son los menos.
Bebidas, precio y acceso? Lo habitual de la zona.
*Aclaración del autor: desvirgarse en el ambiente universitario

Si acabas en este bar es siempre porque estás por el barrio y no quieres irte lejos, ya que es tarde y cierrra a las 8 de la mañana. Pero sinceramente me parece un sitio horrible, música mala y copas peor. Parece mentira que sea el mismo sitio donde ví por primera vez a The Killers hace muchos muchos años.
El bar esta decorado tipo barco de capitán y algunas veces se organizan cocursos de conciertos de gente joven pero para salir mejor no ir.

No he conseguido salir de este sitio con un buen recuerdo, ni siquiera con un recuerdo nítido. Pub eminentemente universitario en el que la pachanga y el pop español se mezcla con posadolescentes buscando amor.
Pese a que no me gustase la música podría habermelo pasado bien, si no fuera por la que los pijos pasados de rosca, nunca fueron mi fuerte.
Las copas no eran gran cosa y ya no recuerdo su precio. Es un buen sitio para ir con grupos grandes y en determinadas fechas como navidades o fin de exámenes es impracticable

Recuerdo aquella noche perfectamente: era mi cumpleaños. Odio mis cumpleaños por una especie de trauma infantil que ahora no viene a cuento. El caso es que no los celebro nunca. Mis amigos me han preparado varias fiestas sorpresa con la idea de que le coja un poco de amor a este día, pero yo lo único que quiero es encerrarme en mi casa todo el día y por la noche salir con mi amiguísima Laura.
Ese 27 de Diciembre decidimos cumplir con lo que solíamos hacer siempre, pasar por el Chapandaz a que nos invitasen a la botella de cava que te regalan si enseñas tu DNI (y es tu cumple) y a desfasar un poco por ahí. esa noche tocaría el Copérnico, pero nosotras aun no lo sabíamos. De esto hace ya como 4 años.
El caso es que terminamos allí y la noche nos encantó. El sitio: Grande! que se agradece, y de estética muy bien cuidada. Copas… pues a precio normal de discoteca que cierra a las 6. Porteros majetes y todo! A lo mejor porque era mi cumple (para no gustarme lo iba gritando a los cuatro vientos). El ambiente era muy bueno y la gente quería pasárselo bien. Pusieron todos los temazos del momento y no paramos de bailar hasta el cierre.
Ese año, decidí volver prácticamente cada fin de semana durante tres o cuatro meses.
De eso hace ya, como he dicho, cuatro años. Y cómo pasa el tiempo!
He vuelto, sí, pero el Copérnico ya no es lo que era. Colas horribles para el baño, porteros antipáticos y elitistas y precio en puerta distante de aquellos cinco euros que pagué. Por cierto, ya te puedes pedir todas las copas que vayas a beber del tirón porque hasta que te atienden… telita.
la media de edad estará en los 20, así que eso ya depende de lo que busques.
Lo peor es que aun termino yendo alguna noche… será la nostalgia de las gloriosas noches.

Sólo se salva por las noches que él me ha salvado a mí de irme a la cama bien prontito. Es una especie de galeón pirata del que muchas veces me han entrado ganas de tirarme directamente al mar y otras (pocas) hasta me lo he pasado bien.
La sala en sí está bastante chula. Tiene un rollito pirata original y es amplia, se sale un poco de lo normal. He estado muchísimas veces, sobre todo en mi época universitaria, cuando era la única discoteca de la zona de Moncloa que abría hasta las seis. Total, que si querías o todavía tenías ganas de ver el amanecer sin previo paso por la cama, acababas en Copérnico.
Hace poco estuve otra vez, más o menos por la misma razón, era lo que había por la zona. Tuvimos que pagar por entrar una cantidad nada despreciable y estaba hasta arriba, un agobio constante que no recordaba pero que también había sufrido cuando era estudiante.
Otra cosa que no ha cambiado son las inmensas colas que tienes que esperar como llegues después de las 2:30 — 3:00 horas. Música regularcilla y bastante caluroso. Es lo que hay en el barrio si te quieres quedar hasta tarde. Tú decides.

Sala carismática de Madrid, mas conocida como discoteca de universitarios.
Su decoración en madera es muy significativa. Hace recordar a los exploradores de los s. XVII y XVIII. Falta encontrar un sextante o un catalejo sobre alguna de las barras. Le da un aire de romanticismo que choca con el aire frío que se respira en otros locales.
Existe una zona de fumadores y otra de no fumadores, ¿para qué si se respira el mismo aire?

Una sala perfecta para huir de las salas tan pobladas de jovenzuelos. Hay un ambiente universitario muy agradable de jueves a sabado. Los precios de las copas son razonables y tienen dias de barra libre desde 9 euros la entrada.

El copernico es un bar mitico de la zona de moncloa, que destaca por su excelente ambiente universitario todos los dias del fin de semana, y por su decoracion interior, asimilando la de un antiguo galeon, como el de cristobal colon ejeje.
Muy buen ambiente, con gente universitaria, y muy buenos precios de las copas y de la cerveza, sobre tdo cuando hacen promociones de barra libre de cerveza hasta determinada hora.
Me gusta ir siempre que puedo, porque me recuerda a cuando iba recien cumplida mi mayoria de edad, y siempre te deja buen sabor de boca porque el lugar merece y mucho la pena.

Mitico pub de la zona de moncloa, no está mal, dependendo de la hora van variando la musica, desde un poko de pachanga a cosas mas hosue.
Tipico pub. mucha gente.

Situado en el conocido distrito de Moncloa, Copérnico forma ya parte de las salas más carismáticas de Madrid.
También usada como sala de conciertos (Copernico-​Nova Club). La sala tiene unos 800 m2 aprox., dispuestos en una sola planta. Con 4 barras y modernas instalaciones de luz y sonido, dispone a su vez de guardarropas.

Música de todo tipo, 10 euros la entrada con consumicion, abierto hasta el amanecer.

Fernández de los Rios 67, Madrid, 28 015
Horario: J-​S 0 a 4
Metro: L3, L6 Moncloa
El Copérnico está ocupado en su mayoría por universitarios con ganas de buena fiesta y ambiente tranquilo, suele llenarse bastante rapido apesar de lo grade que es, un lugar más que mítico; un recurso cuando tenías 19 años pero nada mas