En esta pequeña clínica dental, el cirujano es un profesional dedicado, amable y preocupado de la atención de sus pacientes. Veronica, la asistente, es muy amable y te hacen sentir cómodo y(no muy posible) pero casi olvidar que estas en el dentista. La atención es un 7, los precios son muy pagables y el doctor Juan Pablo es el mejor. De toda mi vida yendo de dentista en dentista, me quedo aquí.