Casa Prada Pastas Artesanales

Llegó a mi puerta hace cosa de unas semanas un dúo de volantes de muy linda calidad y diseño, ofreciendo, ambos comida. Los eran de negocios desconocidos por mí y, a la vez, tentadores. Uno de ellos, el de Casa Prada (el otro… misterio). Pocas cosas suenan mejor que la frase: pastas artesanales.
Y dejé el folleto por ahí, a mano, porque me dio la impresión de que podía llegar a estar rico lo que anunciaba. Cuestión que al primer día lluvioso, que refrescó un poquito, aproveché y llamé. Las entregas a domicilio son coordinadas. Pedí sorrentinos, porque si la hacemos, la hacemos bien.
La entrega fue impecable, en el horario pautado, casi o’clock. Los sorrentinos de mozzarella y jamón ahumado, y los de cebollas moradas y repollo colorado con semillas de mostaza en masa de trigo duro cubiertos con salsa boloñesa, estaban riquísimos.
Me encantó, además, lo de llamar por las pastas, así, a ciegas, y que me haya ido bien. De ahora en más creo que voy a llamarlos más seguido, por lo menos hasta que termine de probar los que para mí son los puntos fuertes del menú: los ñoquis con semillas de lino y chía, hechos con papa y salvado de trigo serán lo próximo que solicite.

Casa Prada es un comercio que lleva tiempo como pieza del rompecabezas del barrio Fisherton. Situado sobre una de las principales calles de este barrio de Rosario, se da el lujo de tener clientes de todas partes de la ciudad, personas de distintas barriadas pueden comentarte algo acerca de las pastas que allí ofrecen, porque su tradicionalismo en la forma artesanal de fabricar pastas, ha hecho que el boca en boca haga llegar la noticia de la excelente calidad de comidas que maneja Casa Prada. Tiene horarios muy flexibles para que nadie se quede afuera de probarlas. En verano trabajan martes, miércoles, jueves, viernes, sábados y domingos. Así que, salvo el lunes, podés disfrutar de comprar ahí ricas pastas caseras, pero también han anexado otra variedad de productos como pizzas tradicionales o con harina integral, empanadas, patas de ternera asada, pavos con los más deliciosos rellenos y también patas de cerdo o de cordero asadas. Si querés saber lo rico que elaboran todo lo que venden en Casa Prada, llégate hasta ahí, siempre cerca, si vas en auto, de casi cualquier parte de la ciudad. Y no sólo no te vas a arrepentir, ¡sino que va a volverse un vicio hacerte una escapada a comprar pastas a este local de Fisherton!

El hecho de pertenecer al barrio Fisherton, me dio la posibilidad de conocer hace ya tiempo a Casa Prada Pastas Artesanales. Este comercio está ubicado en Juan José Paso 7678, en el epicentro de ese barrio rosarino. Poder contar con una casa en donde te venden pastas caseras con la calidez propia de un negocio de barrio es mejorable sólo por el producto terminado que allí te ofrecen. Desearía probar todo lo que venden ahí a la vez, porque soy de sangre italiana y la primer comida que se me viene a la cabeza cuando me preguntan cuál es mi preferida, es fideos spaghetti con tuco, ¡y vaya si saben de elaboración artesanal de este y otros tipos de pasta acá en Casa Prada! Su fachada no es la de un comercio normal, porque está acorde a cualquier casa típica de esa zona de Fisherton, con una sobria entrada luego de traspasar un tapial con rejas, techo con tejas naranjas vistosas, alejada de las paredes vidriadas de cualquier comercio. Además de responder consultas por teléfono, también manejan para las inquietudes su página de Facebook, que me pareció era muy práctico, porque responden con suficiente rapidez. Destaco que no van a quedarse con las ganas de probarlas, porque siempre tienen stock fresco de productos, se ve que calculan bien las cosas, seguramente por la experiencia en el rubro. El tradicionalismo de la pasta italiana, lo llevan en su adn.

Los domingos, cuando el clima no acompaña para hacer el asado, o en invierno siempre compramos con mi familia pastas en Casa Prada. Si la elección está en mis manos, compro ravioles de ricota, panceta ahumada y nuez, son una delicia. O los sorrentinos de ricota y rúcula que también son muy recomendables. También hay fideos caseros, ñoquis con salsa especiales para los 29, agnolotis, tortellinis, lasagnas y canelones.
Más allá de las pastas, también podés conseguir patas de cerdo, ternera y cordero, pavos y pavitas rellenas, empanadas, pizzas caseras, sándwiches de miga, tartas, vinos, salsas caseras para llevar y hasta pan casero los días domingo.
También tienen menú especial para vegetarianos
El local es muy lindo, con un aire de otros tiempos, con una calidez especial. Los pizarrones coloridos que indican los productos, el mostrador de madera impecable, muebles de diferentes estilos con un toque moderno, plantas y objetos cuidadosamente elegidos para decorar le dan a uno esa sensación de hogar y comida casera, que probablemente se termine convirtiendo en hábito como me pasó a mí.