Treffen Beer Bar Museum

Como productor y amante de la cerveza artesanal, hace tiempo que adeudada conocer este lugar. La verdad es que me decepcionó bastante. Lo mejor que tiene sin duda es la ambientación. Lo peor es la cerveza artesanal. Cuando fui tenía más de 10 canillas de cerveza a la vista pero solo 6 estilos disponibles. Ok… Suele pasar. El problema es que pedí una porter y estaba medio pelo, no parecía porter, pedí una honey y estaba levemente avinagrada, y finalmente una golden que estaba ácida e intomable y que tuve que pedir que me la cambiaran. Lo peor de todo es que aceptaron el cambio y olvidaron traerme el remplazo. ¿Qué más? Ah, si. 75p cada pinta, por estas marcas de cerveza, creo que es caro. Quizás, quizás, tuve mucha mala suerte. Tendré que volver en un largo largo tiempo para chequear si algo cambió.

Re lindo sitio tipo pub inglés con mucha madera oscura y luces bajas, buena atención, lindisima música y muy rica pizza.
El sitio es grande, tiene una suerte de sótano que no visitamos pero desde la entrada se pueden ver un par de sillones que lucen cómodos. Toda la decoración es de latas de cervezas de todo el mundo, todas las paredes están repletas de estas y le da un lindo toque que enseguida lo hace distinto a un bar normal.
Cuando lo visitamos no había nadie más; bola de heno y nosotras. Tienen una amplia carta de comidas (cazuelitas calientes y frías, tablas, las usuales papas, pinchos, etc). Optamos por algo básico, una pizza de muzza grande. Cuando la recibimos trajeron una pizza más chica pero nos adelantaron que por tema de semana santa y esas cuestiones eran las únicas en tamaño que tenían por ofrecer. Bien ahí por la honestidad.
Respecto a las bebidas, vimos muchísimas opciones de cervezas artesanales y comerciales, pedimos la usual IPA, que en esta ocasión no falló; estuvo fría y de fuerte y amargo sabor. 2x $ 150
Lo recomiendo porque es un bar que según nuestra visita se nota lindo, tiene buena atención, muy buena música y muy rica cerveza.
Comida: 4 estrellas
Ambiente: 4 estrellas
Atención: 5 estrellas

El lugar es angosto y largo. Tiene varias mesas y también te podés sentar en la barra. Tiene un sótano con más espacio. Aunque no lo recomiendo porque ahora en verano hace mucho calor ahí abajo.
Pedimos una porción de papas fritas solas y otras con cheddar. Eramos 6 y nos alcanzó re bien! Eran platos super abundantes ($ 60). Pedimos cerveza y daiquiris de frutilla. Riquísimo el daiquiri. Les pedí con poco alcohol y así lo hicieron. El vaso era enorme así que justifico el precio ($ 75).
La atención es buena y bastante rápida por ser un bar.

Treffen es un bar para recomendar y de lo mejor que podés encontrar en la zona si te gusta la cerveza artesanal. Tiene muchas canillas, diez o mas, de donde salen distintos estilos de marcas amigas. La atención es buena y distendida, los mozos te recomiendan según tus gustos y no son los típicos mala onda que no soportan mas de tres preguntas. La comida para acompañar la cerveza es variada y las porciones son generosas. Pero lo que hace a este bar genial es la decoración que tiene, ya que es un «bar museo» donde podés encontrar centenares de latas de cerveza y barriles traídos de todo el mundo. Lo único que deberían mejorar es el baño, bastante flojo.

La cerveza es excelente, muy buena atención. Es un muy lindo lugar para hacerse habitué.

La cerveza no me gusta demasiado, pero últimamente me dio por tomar cervezas artesanales que realmente me gustaron.
Llegué a este bar por un amigo que me comentó del lugar ¡La decoración es impactante! Latas de cerveza de pared a pared en ambos pisos del lugar.
La cerveza de la casa es marca Zeppelin, probé una variedad de Ale muy rica, pero tienen para elegir varias más de diferentes lugares del mundo. El Happy Hour es de 2×1 a $ 100, lo que me pareció espectacular y te dan para picar pochoclos salados o palitos salados caseros (justo cuando fui no habían hecho, pero dicen que los traen tibios a la mesa y son una locura).
La atención es buena, nos tocó una moza muy atenta y dispuesta a guiarnos sobre cualquier consulta! Eso suma 1000 puntos en los iniciados en la cerveza como yo :)
Punto en contra: las sillas, los sillones, son un poco incómodos. Igual, voy a volver para probar la oferta gastronómica de este rincón escondido de Buenos Aires.

Muy bueno el lugar! Tragos ricos! La musica es una onda ACDC, y lo mejor a mi gusto es que está a un volumen ideal como para apreciar la musica y a su vez poder charlar con amigos.
Los platos muy abundantes y ricos!

Awesome German bar in BA. We went there we many of my Ibero School friends for a social night out. I have to say that they were very friendly and they actually agreed to charge us separately something rare for Buenos Aires standard. Great draft beer!

Muy bien ambientado el lugar. Inrerminable coleccion de de latitas. Cervezas de afuera pero no llega a ser un gran lugar. Una birra y ahora la seguimos en otro lugar. La

Cuando lo descubrí, el local por afuera no me decía nada. Se veía pequeño, con una puerta chiquita, entre medio de dos edificios. Apenas en la vidriera, tenía un cartel de Warsteiner por lo que me di cuenta de que era una cervecería.
Abrí la puerta para chusmear y me encontré con un lugar buenísimo. Todo el estilo irlandés.
Lo que más me llamó la atención de todo, fueron la CANTIDAD de latas y botellas de cerveza que tienen en repisas en las paredes. De todos los tipos, todas las marcas y de todas partes del mundo. El lugar es tranquilo, con un subsuelo, es muy grande el espacio, con mesas por todos lados y barra.
El menú es el típico de cada cervecería. Está bueno, es para acompañar la cerveza que te vayas a tomar. Particularmente, me pedí una negra (trato de probar todas las marcas y tipos de esta, que es la que más me gusta). Ahí tenés para experimentar y degustar porque hay miles.
Funciona mucho como after office, por la zona en la que se encuentra y por el estilo del bar.

Convengamos que autodenominarse «el museo de la cerveza» es probablemente un poco ambicioso. Treffen, un local medio escondido fuera del «circuito» de bares de la ciudad se animó al desafío, y algo bien están haciendo.
Cai medio de casualidad en el local (está cerca de casa, tenia ganas de tomar una cerveza tirada), y me llevé una muy agradable sorpresa. El local es enorme, con esa decoración estilo pub inglés que gusta tanto entre los bebedores locales, y lo más distintivo es que, si bien no será un museo de cervezas, si lo es de LATAS de cerveza, que decoran todo el local, con los orígenes más extraños (si son amantes de la cultura japonesa, no sorprende que se trate de algunos de los envases más originales).
En cuanto a los productos en sí, hay una muy linda mezcla de marcas locales e internacionales, incluyendo algunas como la Boris, de origen francés y extra fuerte (en nivel de alcohol) que no se consiguen en cualquier lado.
Por tratarse de un local tan grande, se puede estar tranquilo, como para tener una charla o un momento íntimo, y hay variedad de mesas, mesas altas, barra o sillones según el tipo de encuentro que uno quiera tener.
Muy ricas papas fritas también (no congeladas, punto a favor) si quieren comer algo mientras toman.
También hay otros tragos y platos como para comer, pero no pude probarlos (aun) como para dar fe.