La Esquina de Vargas

el precio y la variedad de menues te invitan a conocer el lugar, la atencion es buena (no me puedo quejar de las pocas veces que fui), lo que tiene en contra este lugar y es por eso que ya no voy tanto, es que la ubicación de la cocina (algo asi como en un subsuelo) + que los extractores no andan, hacen que te replantes el volver a entrar, porque salís con un olor a comida, que cualquier perro de la calle que te olfatee te va a seguir por cuadras y cuadras en el mejor de los casos, y en el peor de los casos te va a querer comer jajajajaja.
La comida es muy rica pero una cosa no quita la otra. Asi que si venis a comer a este lugar, tene en cuenta la reseña que puse y no te asuste si te sigue una jauria de perros. jajajajaja.
EL QUE AVISA NO TRAICIONA.

El típico bodegón de barrio, pero más higienico de lo que se espera de un bodergón.
Está justo en la esquina y los menús del día tan baratos tientan a entrar y probar.
Esta vez comí ñoquis a la bolognesa ¡riquisimos! abundante salsa (tal vez un poco salada), ñoquis cocinados perfectos y una porción bien grande que no pude terminar. El queso rayado en el momento termina por darle su toque.
Como hacía bastante frío noté que casi todas las mesas habían pedido pastas o milanesas (deben ser la especialidad de la casa).
Las gaseosas/​aguas saborizadas estan $ 28 y los platos al rededor de $ 60, hay una especie de «menú ejecutivo» todo incluido (milanesa de pollo, bebida y postre o café) a $ 95 nada mal con respecto a los precios de la zona y teniendo en cuenta las porciones abundantes.
Mozos muy atentos y simpaticos.