Reparacion de calzado KARIM

Y seguimos hablando de sacar de apuro a mi persona, pues ellos no se quedan atrás, la verdad es que les tome mucho cariño porque reviven mis botas cada vez que mueren y mis tacones después de una buena fiesta. Me agradan porque no te quieren cobrar el trabajo como si te hubieras comprado unos tacones nuevos, no son usureros y además son rápidos, a mí nunca me han fallado en nada y tengo entendido que a mi mama tampoco. Ellos llevan ahí muchísimos años, inclusive antes de que yo naciera, así que los que ahora atienden son los hijos de los primeros dueños y pues hacen su trabajo muy bien.
Antes estaban ubicados como a una cuadra, y el lugar no era muy agradable a la vista, pero ahora ahí donde están ubicados ya puedes entrar al negocio y esperar sentada si así lo quieres. Esta resco y los chicos que hi atienden son muy amables.