Hot Dogs Don Mario

Es un sitio muy bueno para degustar un perro caliente. Hay de todas las razas, es decir, cada una representa el tamaño del Hot dog, los precios son accesibles. El único inconveniente es que el lugar es pequeño.

Es casi ya un lugar muy tipíco de la zona, desde que era niño venia a comer aqui un delicioso perro caliente, preparado con las menos exigentes normas de salubridad, que le dan a tu hot dog ese sazón tan deseado.
Lo malo es que cierran muy muy temprano (aproximadamente a las 11 pm)
Me gustaría que le dieran mas impulso a su marca, y le sacaran mas provecho al concepto que tiene, para dejar de ser un «!local informal» (digo informal porque pareciera medio chafa) y sea protagonista de hotdogs, que se diferenciara de los carritos.
Por cierto, tienen un hotdog que se llama GRAN DANES y si te lo terminas en cierto tiempo, es gratis jaja.

Estos jochos son algo super tipico en la ciudad, al menos los que estudiamos en la buap los conocemos si o si porque están bien cerca de cu. El local no es muy grande, pero pues igual eso le da esa esencia de localito de comida rápida y deliciosa, una vez haciendo la plática con el dueño me dijo que son tan famosos y tiene un concepto tan original que les han escrito varios articulos en periódicos, revistas y han salido hasta en la tele. Los precios son cordiales, y depende del tipo de jocho que quieras consumir, a mi me gusta pedir el pastor alemán, cuesta 25 pesos pero está llenador. No crean que le ponen tocinito o que hay papas para acompañar, son simplones, pero esa esa su gracia, solo tienen zanahoria con chile, mayonesa, mostaza y una salsa catsup que sabe inusual pero rico. Recomendable pero eso sí que les dejen bien doraditas las salsichas, sabe más rico así

Es un concepto original, el pan de los hotdogs es super rico y no es un sabor común, es simplón en sí el «jocho» la salchichas, mayonesa, mostaza, zanahoria con rajas y catsup, pero hacen una buena combinación, la catsup tiene un sabor único y nada comercial, sería genial que vendieran acompañamientos como papás a la francesa, pero por si solos los jochos sin protagonistas y no necesitan actores secundarios bastante recomendables y como sugerencia pidanles que frían un poco más las salchichas.

Estupendos hotdog’s su tamaño y precio son perfectos, como sugerencia pidan que sus salchichas las frían un poco mas de lo normal por que en ocaciones quedan un poco crudas.

Un gran local de comida rápida nocturna, tradicional de Puebla y la verdad es que sus sabor es increíble. El precio es muy accesible y sus hot dogs de verdad son únicos.

Increíble lugar, aunque pequeño y muchas veces tardan en atenderte o en desocuparte una mesa. Sin embargo si tienes hambre y poco dinero este lugarcito me parece el ideal, varios tamaños de hot dog a elegir, sabrosos y sencillos y sobre todo muy llenadores. Lo recomiendo.

Los originales Hot Dogs de Don Mario, el lugar donde comenzó esta magnífica idea de hacerle honor a su nombre y vender los «perros calientes» por tamaños y nombrarlos de acuerdo a un canino que busca reflejar su tamaño, desde el más pequeño de 15 centímetro y llamado Pekines, hasta el de 45 centímetros que se llama San Bernardo. Si crees que el tamaño no basta, puedes pedir todo «especial», o sea, con más salchicha aún.
En la pared del pequeño local en un pequeño cuadro muestran orgullosamente la página de un periódico donde se habla de ellos y no es para menos pues el lugar merece eso y más. Aunque no son las clásicos Hot dogs y eso de inicio no me pareció tan buena idea, una vez que los probé me convencieron, desde la cátsup casera hasta el picante que ellos mismos preparan, es una muy buena experiencia de algo nuevo con nombre de algo conocido.

Tenemos un amigo con el que nos encanta probar y hacer cosas diferentes, y fue precisamente con él con quien fuimos a este changarrito. Aquí te venden todo tipo y tamaño de hot-​dog (si leíste bien) yo tampoco podía creer que hubiera variedad en un producto como éste, yo sólo estaba acostumbrada a ver el cásico y normal (pan, una salchicha, y condimentos). Pues sí, encontrarás desde los pequeños y comunes hasta unos gigantes que ni te cabrán en la boca (no te miento). Todos tienen nombre de raza de perro, es así como identificas las dimensiones que tiene cada uno. El enorme se llama San Bernardo (no me sorprende) y es un pan como de 40 cm de largo al cual le caben unas 15 salchichas cortadas por la mitad. Lo bueno de esto es que no importa cual escojas, todos están preparados con el mismo «sazón», así que el tamaño sólo dependerá del hambre que tengas.

Que buena puntada esa de ponerle nombres de razas de perros a los «jochos» según su tamaño, ya sabes: va desde pekinés hsata el gran danés; ahora si que según tu hambre, la raza.
La verdad es que yo no le hago feo a la comida, y donde me agarre el hambre tengo que comer sí o sí. Justo fue así como di con este localito, vi a la gente comer, descubrí que había de todos tamaños; y pues nada, me hice fan.
Siempre está lleno, por lo que debes llevar algo de paciencia, eso sí; el dueño del lugar siempre te atendera con mucha amabilidad.
Según cuentan, la tradición de este lugar nació hace ya mas de 50 años, imagínense, toda una vida deleitando los paseantes poblanos.

Es un sitio que a pesar de ser pequeño la verdad les va muy bien por las noches, por ser un puesto colocado sobre un boulevard tan importante en la Ciudad de Puebla. Puedes probar unos deliciosos hot-​dogs a buen precio y con un sazón muy agradable a comparación de los llamados «puestesitos» en cada esquina de la Avenida Juárez. En verdad tienes que ir ya que te atenderá Don Marío, un tipo que le sabe perfectamente a esta onda de la comida rápida. Asimismo, los nombres de «hot-​dogs» llevan razas de perros como Gran Danés, Pastor Alemán, entre otros. El buen servicio es lo que más cuenta ya que no son nada amargados como en muchos restaurantes de la ciudad. Tienes que ir te los recomiendo. He comido aquí en dos ocasiones y te llevarás una grata impresión, no esperes más, amigo o amiga, no lo dudes ni dos ni tres ni cuatro veces, es seguro comer en este sitio, limpio.

La cosa es muy simple, ya les he contado que no soy tan fan de la comida rápida como hoy goda, hamburguesas, etc. Pero si puedo decir que esta hoy dogs son cosa de otro mundo, resulta que existe de deferentes tamaños y lo peculiar es el hombre que cada uno de ellos recibe, claro, en función del tamaño. Todos son nombramos con razas de perro; san bernardo, pequinés, etc.
La primera vez que comí por ahí fue cuando vivía en CU, había escuchado hablar de ellos pero nunca me había atrevido a comer, pues cuando llegué me sorprendí al ver el tamaño de los alimentos, sin duda es un lugar muy curioso que deben visitar.
@aaldahiro

Unos muy especiales hot dogs que iniciaron su tradición en 1949 con Don Nicolás Rosas, tío del actual propietario, quien comenzó a venderlos en el paseo bravo y en diversas ubicaciones del centro histórico de manera ambulante. Además de sus tamaños y nombres peculiares, cada uno cuenta con su versión especial que lleva más ingredientes, son hot dogs muy bien servidos y de gran sabor, tienen mucha gente por lo que el servicio es lento, así que debes ser paciente si quieres disfrutarlos, la atención es muy amable, el lugar es sumamente sencillo pero no encontrarás otros iguales en Puebla. Los precios son accesibles y es un lugar recomendable cuando vas con amigos de buen apetito.

Este es uno de los mejores lugares para comer cerca de Ciudad Universitaria. Los hot dogs que venden aquí son enormes y muy sabrosos y sí, tienen nombre de raza de perros, por ejemplo el más pequeño lo pides como «Pequinés» y mide 17 centímetros, el más grande lo pides como «San Bernardo» y este mide 45 centímetros. Es gigante y dudo mucho que una sola persona lo termine.
Otro se llama «Pastor Alemán» (de los más solicitados) y mide 20 centímetros. El último se llama «Gran Danés» y mide 30 centímetros.
Una vez que te sirven tu respectivo hot dog debes saber que si requieres rajas o catsup extra, esta te cuesta $ 5.00.
Recomiendo ir por las tardes ya que no está muy lleno y se puede comer y platicar a gusto, sobre todo porque es un local algo pequeño.
Si llegas en carro puedes dejarlo estacionado en la calle (sin quitarle un ojo de encima) y si no, la mayoría de las rutas que pasan sobre el Blvd. Héroes del 5 de Mayo y van a CU te dejan justo en frente. Así que no hay pierde.
Cierran al rededor de las 9:00 p.m.

Simplemente riquísimos!, siempre que me salgo de mi dieta es por uno de sus hot dogs pero sin duda vale la pena. No crean que es el mega restaurante, ni al caso, el lugar en realidad es pequeño y lo atiende nada más, ni nada menos que el propio Don Mario, junto con otra señora que siempre es muy amable, y de vez en vez tienen algún mesero que les ayuda.
Los hot dogs aquí tienen nombres de perros: San Bernardo, Gran Danés, Pastor Alemán y Pekinés son las variedades, de acuerdo a la raza y su tamaño es el tamaño del hot dog, y literal un San Bernardo es como para compartir entre 3 (que coman moderado).
Lo que particularmente me encanta de este lugar es el pan de sus hot dogs, debe ser un pan especialmente hecho a los tamaños que ellos manejan, y sabe muy bien; eso y la cátsup que utilizan que no es la misma que uno puede ir a comprar a cualquier súper. Además para aquellos que disfrutan del picante, ofrecen una mezcla de zanahorias con chile que sabe muy rica. Definitivamente se los recomiendo muchísimo, pueden ir cuando tengan mucho, poco o muchísimo apetito que para todo encontrarán el tamaño ideal.
Provechito! =D