Hamburguesas Gigantes Búfalo

Un buen lugar para comer una hamburguesa gigante tu te la preparas a tu gusto con los ingredientes q quieras no son caras y ya tienen un buen de tiempo de estar en el mercado

Si tienes mucho apetito con una hamburguesa ya la hiciste ademas cuenta con area de juegos para tus peques… rico y barato…

Desde que soy niño son mis hamburguesas favoritas ahora ya me puedo acabar una antes nadamas la mitad =D logro desbloqueado: acabarme una bufalo
. Son muy buenas su sabor delicioso y las puedes preparar a tu gusto y son enormemente sabrosas.

A mi gusta la comida gigante y estas hamburguesas son una buena opción, la puedes preparar a tu gusto porqué los ingredientes están en una barra para que tu pases a servirte. La atención es buena, pero aveces se tardan un poquito con tu orden.

Al principio vi los precios y se me hicieron caras. Pero al ver el tamaño de las hamburguesas ya no me pude quejar. Son ENORMES. Y a diferencia de muchos lugares donde sirven en grande, pero sabe feo, aquí tenían buen sabor. Mis nuevas favoritas en Puebla

El lugar está muy bien atendido y siempre muy lleno la experiencia es casual y funciona.
En cuanto a las hamburguesas, ofrecen variedad pero la verdad es que el sabor de la carne no es increíble ni nada sorprendente y personalmente eso lo que busco de mis hamburguesas.

Yo sabía de estas hamburguesas desde que vivía en el D.F. pues mis tíos decían que cada vez que pasaban por Puebla iban a comer ahí ¿el aliciente? Su tamaño, el lugar tiene tamaños para todos los apetitos.
El lugar debe tener al menos unos 20 o 30 años y su fórmula, según entiendo, es la misma desde el comienzo y es ésa su gran virtud, tú vas y eliges el tamaño de tu hamburguesa, el mesero no te la lleva a tu mesa sino a una barra donde están todos los ingredientes extras a el pan y la carne, tú eliges qué y cuánto ponerle de cada cosa, hay personas que son muy moderadas en este aspecto, la verdad es que mi hamburguesa queda enorme y muy difícil de morder, pero muy buena. Quizá mi único pero es el pan, lo siento un poco seco. Pero de ahí en fuera el lugar es un clásico de las hamburguesas poblanas.

A uno le encanta el atracón y cuando viene por parte de una buena hamburguesa, puedo asegurar que el cielo estå en la tierra; y este lugar es mi pedacito de cielo en Puebla.
Sin duda he probado mejores hamburguesas y de tamaños, estilos y formas diferentes; pero estas se han vuelto parte de mi adn y siempre siento la necesidad de volver a ellas y darme un atracón.
Aquí se viene a comer con hambre, pues las porciones son grandes, la carne es mucha y la felicidad eterna… o al menos eso parece mientras estas comiendo. Si eres vegetariano o vegano, seguro este lugar te parecerá una aberración, pues aquí se sirve la carne de forma generosa y sin algún remordimiento.
Ya sabes, si lo que buscas es el atasque y el buen sabor, caele a este local, seguro se convertirá en uno de tus favoritos.

Tienen años de existir, bueno yo iba cuando era pequeñita y jugaba en su resbaladilla con mi hermanita, es más creo que es la misma que está ahora así que ya se darán una idea del tiempo que tienen estas hamburguesas.
Lo atractivo de este lugar es el tamaño de sus hamburguesas, hay desde las mini hasta las gigantes, que a mi parecer son suficiente como para que coman bien dos personas, regular tres. Sus hamburguesas son muy ricas pues son al carbón y la carne está buena. Además te la puedes preparar como gustes pues tienen una barra donde tú eliges qué vegetales y aderezos ponerle. Además de hamburguesas venden otros productos para aquellos a los que no les gusta, incluso tienen caldito de pollo.
Un excelente lugar para ir a comer en familia.

Si quieres atascarte comiendo hamburguesas llegaste al lugar indicado, como su nombre lo dice en verdad son gigantes, pero si tienes buen diente no podrás resistirte.
La primera vez que vine pedí una hamburguesa sencilla, pero me costó mucho trabajo poder acabármela, a tal grado que tuve que compartirla con una de mis mejores amigas, que fue la que me llevó.
Te recomiendo venir, creo que es uno de los lugares de hamburguesas en donde de verdad quedas satisfecho, además de todo los precios son bastante accesibles.
No todos son fans de este sitio, pero yo he de confesar que a mi me gustaron, por eso te recomiendo venir para que de verdad sepas de lo que te hablo.

Lo de gigantes va en serio, así que agárrate. Son tan pero tan grandes, que si vas en cuaresma te ex comulgan.
Como 300 gramos de carne de res (ish) en un bollote que puedes retacar de lechuga, jitomate, cebolla y bañarla en aderezos.
Mi favorita es la barbecue porque amo ese sabor en lo que sea y aquí se la rifaron.
Por lo general tiene gente pero es rarísimo que no halles lugar para sentarte. Eso sí, los lugares al frente para estacionar el auto sí que se llenan a veces y las calles aledañas no dan total tranquilidad para dejar el coche, pero si vas de día es poco probable que pase algo.
Con menos de 100 pesos la armas con papas y refresco pero no querrás comer más en varias horas.
No tienen nada gourmet así que ni te viajes, el asunto en este local es simple tragalona.

En lo personal siempre me enfermo mal plan cuando como estás hamburguesas, pero, por enfermo e irónico que suene esto que les voy a compartir, al menos una vez al año siento la necesidad enorme de irme a «enfermar» con ellas porque son enormes y deliciosas.
Desde muy chavo mis papás me llevaban a comerlas — si, así de viejas son — y tienen un sabor que no encuentras en ninguna otra parte, además son verdaderamente grandes!!!
El ambiente de su local es muuuuy familiar y es de esos sitios a los que puedes llegar en pants o con tus peores fachas y nadie te va a juzgar porque todos están bien clavados en la hamburguesa, tienen algunos postres y hacen malteadas, la verdad es que estás si no tienen nada de extraordinario, las hamburguesas son las que definitivamente vale la pena que pruebes

De lo bueno, mientras más mejor. Un día traíamos el monchis a todo lo que daba, y como dicen que tomar pulque es casi tan nutritivo que comer un bistec, pues esta vez mejor dejamos el pulque pa la noche y buscamos algo para quitar el hambre, pero encontramos algo mucho mejor que eso.
Las hamburguesas me encantan, pero si son gigantes, el encanto es aún más gigantesco. Muchas veces uno se deja llevar porque mientras más lleno quedas, mejor es el sitio, y así es mi amigo el hawaiano, yo no tanto, pero mientras él disfrutaba estar aquí por las dimensiones de su platillo, yo me concentraba más en lo enormemente jugoso de la carne y lo grasoso de las papas.
Si tienes muchas ganas de algo muy grande o de algo muy rico o simplemente andas hablando con puro superlativo este podría ser tu lugar.

Una delicia más son las hamburguesas, de hecho no puedo creer que existan personas que no las coman peor en fin, una opción para comer es esta, aunque la verdad no me super encantaron, no sé, ellos dicen que la carne es 100% de res pero a mí me quedan dudas, como que siento que mezclan la carne con otra cosa porque el sabor es un tanto diferente a otras que he comido y que en verdad saben a carne, aunque puede que esté equivocado.
El lugar es grande y la atención es buena cuando no hay mucha gente porque cuando es hora de comida en fin de semana y se llena me ha tocado esperar un buen rato por mi hamburguesa, sí, he ido varias veces pero porque a mi amiga le gustan no es porque sean mis favoritas.
Lo que sí es que tiene un menú bueno para que puedas pedir la combinación que más te guste, yo no les recomiendo la que tiene piña porque no me encantó el sabor, la tradicional sólo con queso es la mejor para mi paladar.

Quieres comer una hamburguesa real y después digas, «todo eso me comí»? este es el lugar correcto.
Si la memoria no me falla es el único que sigue existiendo, cuando surgió recuerdo estaba en la secundaria y lo mejor de todo era cuando mis papás pasan por nosotros y nos comentaban que comeríamos en Búfalo; en algún momento de la historia hubo una promoción la cual consistía en comer x número de hamburguesas y no pagabas, mi hermana siempre decía que mi llevaría por que tengo un pierna hueca¡¡¡
Para hamburguesas al carbón están son las que se deben disfrutar.

Con sólo asomarme a este restaurante de hamburguesas y oler la grasa de la parrilla, logré enamorarme de este lugar, que ofrece una hamburguesas inmensas para cuando el hambre llama. En mi opinión las hamburguesas que están llenas de grasa y se deshacen mientras te las comes son las mejores, ¿o no?
No se porqué, puesto que no conocía alguna sucursal de este restaurante previamente, pero me trajo un aire de nostalgia. Me recordó a esos lugares de hamburguesas de colonia que fueron quedando relegados con la llegada de los McDonald’s y Burger King, y que quedaron relegados a pequeñas pinceladas de sabor de puestos callejeros. Desde que quisieron hacer la hamburguesa algo fast food, todo se fue a la goma. Una buena hamburguesa es la que te deja los dedos llenos de grasa y te tiene minutos eructando después de comerla. Las hamburguesas Búfalo son colosales y cumplen con la tarea de llenarte el estómago. ¿Complementos? Papas, alitas, refrescos, lo típico. La hamburguesa de camarones es una completa experiencia.
Lo mejor es el ambiente, sumamente relajado y hogareño. El área para niños convive junto con el resto del restaurante y si bien los juegos no son nuevos ni lo último de lo último, brindan horas de diversión sana. Hamburguesas, risas, niños jugando, recuerdos. ¿Necesitas más para tener una excelente tarde?

Cuando tu llegas puedes observar inmediatamente el área de juegos para los niños, hay una resbaladilla y un tío vivo. También puedes ver una máquina de chicles (sí, de esas que son tradicionales).
Por otra parte hay varias mesas color naranja, alusivo al color de la marca. Cuando tu llegas y escoges un lugar, el mesero inmediatamente te llevará una hoja con el menú, en él tu marcas lo que vas a pedir.
El tiempo de espera es muy corto y una vez que están listas tus hamburgesas, el mesero te avisa para que vayas al centro del lugar y puedas terminar de prepararla, encuentras cebolla, pepino, lechuga, jitomate, etc.
Cabe mencionar que hay hamburgesas de diferentes tamaños, mini, chica, mediana y grande y hay letreros que te muestran el tamaño de las hamburguesas.
Lo que no me gusta de éste lugar es el alto volumen de las pantallas, puesto que están en canales de televisión abierta, y por lo mismo del volumen se genera un eco.
Por otra parte hay letreros que dicen: «grabación protegida vía satelital», por cualquier cosa.

Jamás había entrado a uno de estos establecimientos, había escuchado que las hamburguesas eran sabrosas, pero noté que el concepto mejora cuando entras por tu propio pie y comes aquí.
Una vez que llegas de inmediato te atienden. Te dan un menú en el que eliges qué quieres comer o beber. Es bueno que sepas que manejan cuatro tipos de tamaño en hamburguesa: Mini, chica, mediana y grande. En lo personal te recomiendo la mediana (y eso si tu hambre es muy extrema), y creeme si te digo que con esa quedas satisfecho. Debes de saber que una vez que está lista tu hamburguesa, tendrás que ponerle los condimentos extra que necesites. La mesa con todo eso se encuentra en el centro.
El sericio de Hamburgues Bufalo es muy bueno, los meseros se muestran muy accesibles en cualquier momento de tu estadía al igual que cuando les dices que requieres factura.
Si tienes niños y también aman las hamburguesas, este lugar tiene su propia área infantil. Solo que antes de que accedan, procura leer las normas del lugar.

¡Ay Dios! No sé por qué cada que pruebo una hamburguesa en un lugar nuevo pienso que son las mejore… Por casualidad y por mi hambre tremenda llegué a este lugar, las hamburguesas al carbón de este establecimiento son la onda. Me gustaría decir que son como las demás pero ¡no! He probado hamburguesas de cadenas de comida grandes y están buenas, pero muy fresas para mi gusto. He probado hamburguesas grandes sí, pero leves de sabor, aquí llegué y al ver la carta no sabía si pedir la de arrachera o la de BBQ. Realmente fue una decisión muy difícil, me animé por la de arrachera, pedí mi combo con papas y refresco. Una hamburguesa grande y cuando digo grande es porque sinceramente el tamaño no es normal y de que quedas satisfecho, quedas satisfecho.
El lugar no es muy grande pero sí es una excelente recomendación para que comas con tu familia, vale la pena. Recomiendo que cada uno pida de un sabor diferente para que prueben todas. Cuentan con una pequeña terraza para quienes terminando de comer deseen echarse su cigarro. No son caras, pero tampoco son de $ 20 pesos. Por personas mínimo te gastas $ 100 pesos, un precio considerable.

Conozco las dos sucursales que tienen (la otra está a la salida a la Recta Cholula) y las dos me encantan.
Las hamburguesas son hechas al carbón, hay 4 tamaños (mini, chica, mediana y grande), la grande es realmente gigante y es digna de un verdadero glotón.
Cuentan con una barra de ensaladas en donde tu mismo preparas la hamburguesa a tu gusto y elección y después de prepararla puedes partirla a la mitad para comerla más fácil.
Además venden alitas, hot dogs, papás a la francesa, malteadas, aguas y refrescos.
Los precios son decentes y el servicio es adecuado.