Difícil de encontrar y difícil de olvidar. En medio del ejido, una zona sin tradición culinaria en Playa del Carmen encontramos un placer oculto, un pequeño y encantador restaurante con un bufete sensacional y además a un precio increíble(se puede pedir más); Playita tiene platillos tradicionales mexicanos(chilaquiles, arroz perfecto y puerco en chile verde para chuparse los dedos), cocinados con amor y apego a lo tradicional, simplemente suculento. Hay que recordar que además es bufete, abre de siete de la mañana a seis de la tarde y el servicio es amable, el ambiente(suena la cuuumbia!!) muy bueno para comer y no le pide nada a cualquier lugar de la quinta avenida, al contrario, bien vale la pena viajar(cruzar la Carretera Federal) todas esas calles para encontrarnos en Playita y comer, sentarnos y pensar en nada más. Felicidades a los propietarios, lo están haciendo muy bien y van a llegar al corazón de los playenses.