Este es uno de esos lugares que frecuentaba mucho cuando era niña, venía con mis primos y nadábamos y jugábamos por horas, si bien todavía es el agua transparente antes era perfectamente cristalina. En la actualidad la «La laguna de Nogales» es ligeramente mas moderna que antes, pues ahora tiene un enorme puente colgante, trampolines para saltar a darse un chapuzón, llantas colgantes y demás. También hay unos hermosos patos que son alimentados por las mañanas y algunos peces japoneses en otra sección aparte. Aquí puedes comer en pequeños puestos comida típica de la zona como gorditas, chileatole, empanadas de picadillo y pollo, encuentras rapados, nanches y plátanos fritos. Una cosa que me desagrada muchísimo desde hace ya un buen tiempo es que no hay casi botes de basura y la misma gente de aquí se le hace fácil botar la basura en el suelo y muchas veces por el aire van a dar al fondo de la laguna y no les importa mucho pareciera que se sienten en ambiente así. También vi a unos tipos con una resortera dándole a los pajaritos, lo mas triste es que uno de ellos maneja un auto del ayuntamiento de nogales, como siempre quienes más deberían dar el ejemplo. Terminan haciendo cosas fuera de lugar y con evidente carencia de razonamiento. Una lástima lo que están convirtiendo l laguna y su entorno.