Torre Mayor

Ya con más de 10 años de vida este llego a ser el edifico más grande de México, cuenta con una área de comida y tiendas en la parte de abajo. Las vistas son increíbles desde el piso 15 en adelante además de ser uno de los edificios más seguro por tener unos amortiguadores enormes dentro de las oficinas se ven algunos el estacionamiento no es tan caro como otros solo que hay que dejarlo en el valet.

Edificio inteligente con certificación LEED obtenida en 2013. Muy organizado además de moderno y muy funcional.

Diseñada por el arquitecto canadiense Paul Reichmann, La Torre Mayor IXE se encuentra donde muchos años fuera el Cine Chapultepec, pero al igual que muchos cinematógrafos, mordió el polvo y cedió su paso para la creación de esta edificación que en su momento fue la más alta de Latinoamerica tras su inauguración en 2003 con una altura de 230.4 metros extendidos en 55 pisos, un centro comercial, 4 pisos de estacionamiento subterráneo, 29 elevadores y múltiples oficinas. No fue hasta 2010 que fue superada por la torre Ocean Two de la ciudad de Panamá con 246 metros y dicho edificio ahora es rebasado por Gran Torre Santiago en Santiago de Chile con aproximadamente 300 metros de altura.
La alza de la Torre Mayor se inició en 1997 y fue terminada sin ningún falecimiento o accidentes a finales de 2002, a nivel local superó a la Torre Pemex y en América Latina a las Torres de Parque Central en Caracas, Venezuela. Así mismo se le considera como uno de los rascacielos con más tolerancia sísmica a nivel mundial por sus 252 pilates de acero que tiene en la base hundidos a 60 metros de profundidad y un máximo aguante de 9.0 Richter.
Dicen las leyendas urbanas que en su momento tenía un mirador en su parte superior, pero desde que el austriaco Felix Baumgartner se subió con su paracaídas y aterrizó en los carriles centrales de Paseo de la Reforma, dicho segmento en la torre fue clausurado para el público en general. Y el 30 de agosto de 2007 vivió una amenaza de bomba donde 12 mil trabajadores fueron evacuados sin registro de bajas.
Es uno de los edificios emblema de la Capital en tiempos recientes y aunque no puedas admirar desde arriba la ciudad, esta lo admira desde abajo y desde múltiples puntos cardinales.

Sin duda alta en calidad, estatura, diseño y tecnología. Abriendo al público sus archivos fotográficos, este rascacielos celebró en 2013 diez años de ser un ícono en Paseo de la Reforma y referente de la ciudad.
Con 225 metros de altura y una ubicación privilegiada fue el más alto de América Latina hasta 2003 y antes ese espacio lo ocupaba el cine Chapultepec, por lo que originalmente se llamaría Torre Chapultepec.
Otro dato relevante es que se considera el edificio más sólido y resistente del planeta por sus implementos antisísmicos, básico en una ciudad y zona con alto movimiento telúrico.
Sólo para sus inquilinos la vista debe ser espectacular. Es una lástima que el mirador ya no esté abierto para el público desde hace seis años, pues era una oportunidad para comprobar visualmente el valle que ocupa la caótica, pero hermosa Ciudad de México.

La altura de este rascacielo es imponente y seguramente inimidará a quienes teman a las alturas, sin emabrgo deben saber que es el edificio más seguro, al menos en caso de sismos.
La Torre Mayor fue el primer edificio en utilizar una estructura de rombos que disipa la energía generada durante los sismos para que no haya puntos de quiebre.
La vez que subí para una entrevista pensé que sentiría vértigo, pero en realidad la vista desde el piso 23 ya era maravillosa.
En la planta baja de la torre hay bancos y cafeterías, pero este edificio principalmente alberga oficinas.

Me fascinan los rascacielos. Había escuchado que Hong Kong tenía cinco veces más riesgos de terremotos que la Ciudad de México, pese a ello está repleta de rascacielos. El problema con México es el suelo lacustre que multiplica cada movimiento. De ahí que sea un milagro –lo digo en serio, no como frase trillada– que en esta ciudad podamos ver edificios de estas dimensiones. En otras circunstancias cualquier otra estructura mayor a unos cuantos pisos tendría su destino sellado dada la inestabilidad de los suelos. Pero no es así.
No importa que ya no sea el edificio más alto de América Latina y Panamá tenga rascacielos de trescientos metros. El hecho es que lo tenemos aquí en el lugar más improbable y donde NO debería haber rascacielos. Es un desafío como lo fueron todos los iconos de la ingeniería en su tiempo, el Titanic, El Hindemburg…

Desde un inicio de su construcción este edificio me ha gustado mucho. Y hasta la fecha es el primero de los rascacielos de esta rumbo de Reforma. Con sus 55 pisos, helipuerto y pequeño centro comercial se ha convertido en una referencia del rumbo y de la ciudad. Ya ha mostrado su gran ingeniería antisísmica con algunos sismos que han afectado a la ciudad en años pasados.

En una de las avenidas más importantes y bellas de la Ciudad de México, sobre sale una edificación de 55 pisos, imagínate, es enorme y además es una de las construcciones emblemáticas no sólo de nuestra Ciudad sino del país entero. En algún momento de la vida he visitado este lugar y créeme es una experiencia única e inolvidable, lo que definitivamente no querrás es que cuando visites la Torre haya un sismo porque entonces si pensarás que es lo último que verás, aunque no tienes porque preocuparte porque es una construcción a prueba de todo y aguanta un sismo hasta de 9.0 grados en Escala de Richter. Se tiene el dato de que fue el edificio más alto de América Latina hasta el 2003.