Tándem Pub

Agradable lugar para reunirse a platicar con amigos. El precio moderado en cervezas y barato en comida. Se paga en barra lo que evita problemas con la cuenta

Hay palabras que evocan conceptos completos. Aromas que te traen a la mente recuerdos de hace 30 años… y la palabra PUB no es la excepción: en seguida nos imaginamos un tipo de decoración, una ambientación y música. Mucho más importante, esperamos que haya cervezas de buena calidad (ales, lagers, porters…), al menos un par de cervezas de barril– aunque sea las de Modelo!!– y un bartender capaz.
En este lugar te encuentras con la primera parte. Es decir, solo con la fachada. Las referencias brit-​irlandesas-​Beatles-​Rolling-​etc tan sobadas pero que siguen «funcionando». Un layout funcional. El espacio es amplio. La música casi de terror.
Pero cuando llegamos a la oferta de bebidas la cosa se pone fea. En serio. Ok. No hay cervezas de barril. Pero ni siquiera han oído hablar de la Guinness en botella. Ni de las artesanales. «Ok. Tráeme un Gin&Tonic» Y no hay opciones de gin! «Ok. Con Tanqueray» y resulta que le tienen que poner religiosamente una onza de gin a un vaso bastante grande que te llenan de tónica «porque nos ven por las cámaras, joven» Ya no me supo a nada.
No quería hablar de la reducida carta de la cual además solo tienen en existencia la mitad de los platillos, ni de las hamburguesas compradas de Sam’s, pero ya lo hice! Jaja.
En un ataque Godín podría ser que este lugar parezca aceptable, pero la verdad es que prefiero ponerme una de banqueta a la próxima.

Los dueños de este lugar entendieron que hay capitalinos que también disfrutan de lugares con buena música, donde se pueda platicar, en el que haya dónde sentarse cómodamente y sin pretenciones.
Aunque la selección de cervezas podría ser más amplia, podrás encontrar alguna que te guste.
La comida es buena, sin dejarte con la boca abierta, y el servicio también bueno. Lo mejor y que se agradece: tienen la facilidad de pagar cuentas individuales, directo en caja.
Jamiroquai, The Postal Service, The Stone Roses, Blur, The Libertines ‘viven’ en la selección musical de este lugar.

This place is a chill neighborhood bar. Nothing too fancy, though it’s certainly not just a cantina. It’s got a bit of hip vibe too it, and has a lot of space. It would be great spot for a party. Drinks are reasonably priced by U.S. standards, though I was personally disappointed to discover that they don’t offer Red Bull. The bar is a little small, so I can imagine there would be a wait if it ever got crowded. Yet, for a Friday afternoon (right now) it feels relaxed and low key. A nice change of pace from the bars in Condesa, Roma, and Zona Rosa.

que buen pub, me encanta que este todo oscuro y su deco tipo cabaret 50ero, kudos por eso! empezamos con unas perlas negras por que era una ocacion especial y de ahi seguimos con vodka, pensabamos ir a otro bar despues pero como pasaron las copas y la musica 90’era atrapa a cualquiera terminamos quedandonos desde que abrieron hasta las altas ja, bueno se sentian como las altas pero eran mas bien como las 12 jaja, buena peda, bailamos, lloramos yforevereamos

Así es como funciona un verdadero pub en el Reino Unido, se pide una cerveza, de preferencia una Guinness para estar a tono, se paga, se bebe, se charla y después se va uno a la casa a descansar.
Los del rumbo siempre hemos pensado que es una suerte tener en la Cuauhtémoc un pub como el Tándem, con tradición y alejado de las modas condechi.
Dato histórico yo y mis amigos de la antigua Ibero –Campestre Churubusco– solíamos atravesar toda la ciudad para beber unas chelas y pasarla a gusto, allá por los años 70… Ahora sólo nos queda tomar un English Breakfast.

Este bar es el primero en su tipo que yo conozco. Tiene muchos años en la colonia, antes de que se instalara en la ciudad esta tendencia del «Pub» tipo Celtic’s que resultan un tanto de utilería y que me recuerdan Disneylandia.
De ambiente oscuro y mobiliario sobrio, el Tándem, cuyo nombre proviene de las bicicletas dobles, es un bar discreto con cómodos taburetes y mesas altas. La decoración es interesante y el sistema es aún mejor ya que es de autoservicio, uno va a la caja a pagar lo que se tomará, el barman te despacha y te vas a tu mesa con tu trago. El lugar se puede utilizar en cumpleaños o para reuniones grandes, y un tip es que puedes llevar tu iPod con la lista de canciones que quieres que suenen y ahí lo conectan. Es ideal para grupos grandes porque cada quien paga su cuenta forzosamente y nadie se hace bolas con las cuentas al final.
Es un buen lugar para cita romántica pero también es buen lugar para ver deportes.

Las veces que he ido me ha tocado un ambiente bohemio: pocas personas, música suave. He tenido buenos momentos de charlas con amigos en este lugar. Otra ocasión me tocó un ambiente más animado y festivo. Es de esos lugares que se transforman de acuerdo al día, la hora y las personas que lo visiten.
Es un sitio cómodo en cuanto a instalaciones y con una buena oferta de bebidas de toda clase. En especial me agradan las cervezas. Tiene ese toque de intimidad que la decoración, el mobiliario y la luz hacen posible cosa que agradezco que me agrada. Tienen también cosas para comer. Yo más bien he pedido botanas y comida al centro para pasar el rato mientras me termino mi chela.

El Tándem Pub es un lugar ideal para venir en compañía de los amigos, o en plan de romance con quien tú quieras, pues la atmósfera de este sitio no sólo es agradable por la atinada selección musical del DJ, sino también por los tragos que ofrece en su carta pero, sobre todo, su variedad de cervezas.
Aunque los precios son un poco elevados, este sitio es mi favorito por conservar la esencia de los pub ingleses de antaño, además, aquí cada quien paga su consumo directamente en barra y, aunque a veces puede ser tardado, es ideal para todos pues a la hora de hacer cuentas cada quien sabe lo que ha gastado.
La comida es muy buena, cuentan con una variedad de alimentos como pizzas, papas fritas, platos con mini sopes, quesadillas y tacos dorados, hamburguesas, y otras delicias que puedes ordenar y acompañar con lo que tomes.
El encanto del lugar también está en su decoración: paredes revestidas con madera oscura, mesas y mobiliario iluminados por la tenue luz de las lámparas y algunos objetos antiguos que complementan este concepto que fue inaugurado en los años setenta, y que sobrevive al paso del tiempo sin perder su encanto.

Un ambiente ecléctico y divertido. Para muchos, el nombre es la única referencia a un pub inglés. Si es que reparan en este dato. Este sitio es ideal para venir en grupo. Tiene la ventaja que cada quien ordena y paga sus bebidas directamente en la barra. Así te ahorras los eternos cálculos de la cuenta al final. Desde luego, hay cervezas importadas como Guiness y Carlsberg o nacionales. El servicio, solo para alimentos es un poco lento, pero no importa. Aquí vienes a platicar, a reírte y desenfadarte después de la oficina o por la tarde del fin de semana. Hay que poner atención a la música que es una mezcla de todo: un poco de pop, de folk, hasta incluyen música disco. Sí de allá hace muchos años. Los alimentos son buenos: hay pizzas, hamburguesas. Y a medio día ofrecen un menú para los oficinistas de la zona.