ShuviLuna

Entrar a «El Diván» y relajarse, deberían ser sinónimos. En el momento en el que pones un pie en el lugar, no sabes si te gusta más por el concepto que tiene, o por el hecho de que encuentras exactamente lo que estabas buscando.
Este lugar tiene esa capacidad de atraparte y que las horas vuelen sin que lo notes, si miras a tu alrededor puedes ver la decoración mezcla de lo antiguo y lo moderno, hay tazas de té del estilo de la antigua Inglaterra, sillones, libros antiguos y una iluminación que cae sobre todos estos que vuelve este lugar mágico.
Lo mejor son los productos que ofrecen, que además de ser cien por ciento mexicanos, son diferentes de lo que normalmente vemos, entre mis favoritos están los anillos, los cuales cuentan con todo tipo de diseño y piedras de las más variadas formas y colores. También hay bolsas muy bonitas, hechas de piel en su mayoría.
Aunque casi todo lo que venden es para las féminas, si eres un chico que gusta de este estilo, también puedes encontrar algo que sea de tu agrado.
El plus que verdaderamente le encuentro, es que la atención es personalizada por lo cual debes sacar una cita para visitar el lugar, cosa que recomiendo no dejes de hacer y vivas la experiencia de ser el centro de atención de las vendedoras y recibir el trato más amable que puedas imaginar.

El Diván, es un shoroom de diferentes marcas cuyo objetivo es hacer de tu compra algo más placentero. Como lo dice su slogan «Comprar es más divertido que ir a terapia» por ello su forma de venta es a través de una cita, así la atención será personalizada y la mercancía es entregada en la puerta de tu hogar.
Entre las marcas que se encuentran en El Diván, está Shuvi-​Luna que son bolsos de mano, Ezkarren Joyería, Urbana que de igual forma son bolsas de mano con un toque más casual y Urbana muebles, muebles antiguos con un toque moderno.
Una de las marcas que encontré y ahora me convertí en fan es Amores y Sabores, deliciosas mermeladas, sales y granola de productos 100% naturales y orgánicos que te ayudan a cuidar tu salud sin sacrificar el sabor, eso me pareció delicioso y la experiencia bastante agradable, aunque en algún momento pensé que si no compraba nada me sentiría un poco incomoda porque solo por mi se había hecho la cita, sin embargo, las chicas que me atendieron fueron muy gentiles y me dijeron que eso formaba parte de su trabajo al vender. ¡Prueba la experiencia de hacer cita para comprar!