Restaurante Humbertos

Si de comida yucateca se trata Restaurante Humbertos es la opción. Este lugar se caracteriza por su amplia variedad de platillos de comida yucateca que van desde los típicos panuchos, salbutes, sopa de lima hasta tacos de lechón, cazón, de lengua… y por si no te gusta nada de eso también cuentan con arrachera y pechuga a la plancha. En fin, su carta es muy amplia.
También cuentan con carta de postres por si te quedo un huequito.
La mayoría de los platillos son una delicia ya que tienen buen sabor y sazón, algunos de ellos tienen más grasita que otros pero vale la pena.
El lugar es grande y con una decoración sencilla, cuenta con una pequeña sección en la parte de afuera para los fumadores y otra sección de espera.
El servicio es muy ágil y atento.
Cuentan con estacionamiento en el restaurante y uno alterno enfrente.
Los fines de semana trata de llegar antes de la 1pm lo más temprano que puedas ya que el lugar se atasca y la lista de espera aveces es muy larga.
Los precios son económicos y solo aceptan efectivo.

Aquí es muy rico comer, la mayoría de las cosas tiene un poco de gracita pero esta muy rico, pero algo que no puedes dejar pasar, son las marquesitas, la de queso del gallo azul esta super.

La comida ha decaído un poco, el sabor no me encanto como siempre, y el policía de la puerta fue muy prepotente, se puso en plan de policía granadero!!! Pésimo

Se ve medio sucio. La comida no es mala pero el servicio es demasiado rápido. Parece que tienen prisa de que ya te vayas. Te descuidas y ya se llevaron tu plato/​vaso. El estacionamiento es un desmadre. El ambiente está nacón. Lástima porque la comida es buena.
La verdad es que no lo recomendaría.

Puedo decir sin pausas que la comida es rica, si eres de buen diente las porciones te parecerán breves y no te dejarán satisfecho. Buen motivo para pedir más, pero no abuses si no traes mucho efectivo ya que a pesar de la buen clientela no tienen pago con tarjeta. Sorprendente para un lugar que regularmente está lleno! La arquitectura es simple y sin complicaciones, pero si vienes a pie tienes que entrar por el estacionamiento, lo cual me parece un desatino. Aún después del consumo cobran el estacionamiento. Los meseros son eficientes pero no particularmente amables, y no hay capitán de meseros por lo que la calidad del servicio no es observada. Si te acabas las servilletas que hay en la mesa te cobran el refill de servilletas, lo cual es peculiar porque en la comida yucateca la comida requiere de limpiarse en diversas ocasiones. Doy dos estrellas y pongo una adicional únicamente porque es un restaurante establecido.

De la misma escuela que la fonda 99.99 esta este restaurant que esta justo a espaldas. Que buen lugar, para iniciar no dejen de probar la sopa de Lima y para los amantes del caldo tlalpeño, como yo, esta para empinar el plato. Panuchos deliciosos y el salpicón no tiene abuela. En esta ocasión, como podrán leer, comí muy poco pero volveré y ya les contare. Escuche de la mesa que el pan de cazón estaba muy rico. Para cerrar yo me tome un café de olla que también me precio muy bueno. En resumen un buen momento familiar con excelente comida.
Pros: precios accesibles y muy buena comida realmente Yucateca
Cons: puedes tener un poco de complicación para estacionarte sí son fines de semana en horario de comida. Estacionate a una cuadra, caminale que necesitarás compensar caloría.

Son restaurantes hermanos Humbertos y el 99.9 (los separa un pequeño estacionamiento), el segundo es de comida yucateca, y el primero si bien cuenta con platillos yucatecos tiene comida mexicana más variada y servicio de Bar. Es de lo mejor para comer rápido y casualmente en la Del Valle. El servicio es ágil y atento, y los precios económicos. Hay que llegar temprano porque muchos de los especiales del día se acaban antes de las 3:00 pm. El arroz con huitlacoche es único, de entrada los Tacos Picosos (mini tacos Villamelón), los panuchos y la Cochinita Pibil excelente. Los platillos en general son los propios de una fonda con muy buen sazón. El único inconveniente es que no te dan mesa hasta que llegan todos los comensales y tienen un policía en la entrada con cara de pocos amigos. Los precios rara vez superan $ 200.00 pesos por persona.

¿Comida yucateca? Sin duda hay muchos restaurantes en la ciudad que ofrecen panuchos, sopa de lima, tacos de cochinita y demás platillos de esta deliciosa gastronomía, sin embargo, Humbertos es un restaurante que ha logrado posicionarse en el gusto de muchas personas gracias a su sabor y excelente servicio. Sin ser distinto a otros restaurantes con precios económicos y buena comida, a este sitio procura llegar con anticipación porque a veces tendrás que esperar unos minutos extra para poder entrar. La buena noticia es que en el estacionamiento tienen un pequeño anexo donde preparan tacos y otros platillos. Si el calor arremete y la espera ha sido larga, una cerveza bien fría llegará a tus manos como cortesía por tu valioso tiempo.

No te asustes si llegas y ves mucha gente afuera. Tampoco te indimides con ver muchos coches en el estacionamiento. Todo se mueve muy rápido. La espera es muy corta aunque parezca que pudieras quedarte horas esperando.
Una vez adentro el servicio es igual. Todos los meseros atienden todas las mesas y no payasean con eso de «ahorita le mando a su mesero» «no me toca esta área, un momento». Eso jamáaaas lo verás aquí. Me gusta como están todo el tiempo atentos con todos y tanto el servicio como la comida es de primera.
Un restaurante sencillo con muy buen sazón y buenos postres. No es buena idea asistir si lo que quieres es platicar y tener una sobremesa, por que amablemente te sacan en cuanto acabes, inclusive sin que te des cuenta.
Muy buena experiencia. Muy buena decisión si estás en horario de oficina y lo que quieres es comer bien, sin perder el tiempo para regresar a buena hora a tu trabajo.

Bueno, no ha palabras suficientes para terminar de hablar bien de este restaurante. Llevo yendo muchos años a comer ahí, y en ninguna ocasión he salido decepcionado. A veces, si va uno en hora pico, se encuentra con que hay gente esperando mesa en la parte de afuera. Pero una vez dentro, el tiempo ya no importa.
El servicio de los meseros es muy ágil y rápido, todos son amables y más si te reconocen de veces pasadas que hayas ido. La comida es exquisita y barata, además de que te toman la orden en cuanto te sientas y te sirven en menos de quince minutos.
Muy recomendable, además de que el dueño es propietario de la fonda de a lado (El Noventa y Nueve) donde también se pasan de amables.

El restaurante de comida yucateca que más recomiendo en el Distrito Federal, con excelente sazón, buen servicio y además muy barato.
Empieza con una sopa de lima y continúa con una orden de panuchos de cochinita pibil o lechón.
El platillo más exquisito son los tacos de camarón en chilmole, pero sólo los sirven de viernes a domingo y se suelen terminar temprano por la alta demanda.
Sobra decir que la mejor compañía para esta comida es una michelada bien fría, aunque el agua de Jamaica también vale mucho la pena.
Cierran los martes y el resto de la semana hay gente prácticamente a todas horas, quizá esperarás varios minutos pero una vez adentro el servicio es rápido, tal vez demasiado rápido que hasta sientes que te están presionando para que el resto de las personas puedan entrar.

Bueno, bonito y barato. Este restaurante es para mí y mi familia lo que el café «Central Perk» es para los de Friends.
Hace mucho, muchísimo tiempo que llegamos a la Fonda 99.99, que es la que está justo a un costado de este lugar y algún día que estaba llenísima decidimos probar el Humbertos.
Gran acierto. Los panuchos, salbutes, la sopa de tortilla o de lima, las micheladas, las picaditas de pollo, los tacos picosos, todo es una delicia yucateca que debes de probar una vez en tu vida.
Sin exagerar, aquí comes por menos de 100 pesos, justamente por eso siempre está lleno, así que mejor llega temprano y apúntate en la lista de espera (cuando hayan llegado todos tus acompañantes) y prepárate para comer lo mejor de Yucatán en la Colonia del Valle.