Mercado San Pedro de los PInos

Puede resultar toda una fascinación el mercado para las personas externas al barrio ya que se ha destacado por la venta de mariscos, en lo personal ha bajado de precio radicalmente.
Por lo cual, el mercado siguió abriendo sus puertas y los negocios de comida aumentaron en detrimento de los puestos de frutas y verduras.
Esto resulta complejo para el habitante ya que se reducen los sitios de compra.
Hace unos años se fue mi marchante favorito, Arturo, lo peor es que se fue sin decir adiós.
De emergencia, funciona ir por alguna cosa, pero la verdad, la central de abastos es la reina.

En una colonia lejana para mis rumbos, hace muchos años descubrí un mercado con una excelente oferta de restaurantes de mariscos.
Buenos, frescos y con precios asequibles; un lugar no muy limpio, pero bueno, es un mercado.
Al paso de los años, este sitio se ha convertido en una romería capaz de defraudar a cualquiera que se atreva a intentar comer ahí.
Basura, gritos, precios altos, cucarachas… y no sé qué más.
La incongruencia es que siempre está lleno.
Siempre lo he dicho: Los mexicanos no somos exigentes.
Adiós a esta opción gastronómica.

Devo confessar que eu sou fã do Mercado de San Pedro de los Pinos. Desde que morei no bairro frequentei o espaço para comprar frutas e verduras, almoçar no fim de semana, dar um passeio. Honestamente não é um ponto turístico, o próprio bairro é algo muito família e local mas este é sem dúvida um dos mercados mais limpos do México.
Um ótimo lugar para comer mariscos, sushi, comida mexicana (ainda que eu recomende a taqueria Green House logo em frente) por um preço camarada e de qualidade. O espaço também tem lojas com produtos para a casa, petshops e outros.
Vale a visita se você quer ver o México como um local e não um turista.

This marketplace, which is quite traditional by most standards, is renown because of its food stalls, particularly the seafood ones. While I amply –very, very amply– recommend those (La Fuente de la Juventud jumps to mind), there’s plenty more to choose from, like Japanese food, Argentinian meat cuts, desserts and even a couple of gourmet options.
Even the quesadillas (which may or not include cheese, as is the custom in Mexico City and never fails to annoy people from other states) that place themselves outside the marketplace on weekends are on the very tasty side of the scale.
If you are around, it’s always a good option. Parking may be tricky, but there always seems to be an army of «franeleros» ready to jump out at any corner of the city, so there’s that. Or try in the streets around the place.

Uno de los mercados mas «nice» de nuestra ciudad caracterizado por su orden, limpieza y tradición.
Lo caracteriza su curioso y colorido mural exterior que te anuncia de alguna manera que aquí puedes hallar pescados y mariscos listos para que te los lleves a tu casa o los consumas aquí.
Y efectivamente, este mercado es famoso por sus puestos de comida marina que van desde los pescados fritos, tostadas de camarón y los cocteles mas ricos de la zona, pero claro también puedes encontrar las tradicionales garnachas y tacos de mixiotes.
Lo ideal es que pases a comer aquí después de visitar tanto el Parque Pombo como la parroquia de San Vicente Ferrer.

Es el mercadito de la colonia. Verduras, abarrotes, carnes blancas y rojas, ropa, mercería, papelería, ferretería, santería. Hasta hace unos días solía pasar ahí para comprar las cosas del desayuno o la comida. Hay dos tortillerías alrededor.
Adentro hay un CENDI, un kínder guardería. Puedes dejar a tu hijo o hija ahí. Pides informes, pero la inscripción es en la delegación Benito Juárez.
Por cierto, frente al mercado está la Iglesia de San Vicente Ferrer, la de San Pedro de los Pinos. Y cerca de ahí hay un parque, por si tenías duda.

El mercado de San Pedro de los Pinos es, sin duda un mercado sui generi. Aquí los antiguos galanes de mercado con el libro vaquero y un peine en el bolsillo del pantalón trasero y una camisetita sin mangas, han cambiado por unos nuevos galanes que visten zapato fino y arreglan sus locales con pantallas planas.
Claro, este mercado tiene la fama de mariscos deliciosos bien en alto (Los buenos son los de La Fuente de la Juventud), y aún conserva la parte popular y tradicional de los puestos de verduras, carne, etc. Sin embargo, hay una sección de mercado (no es tan grande la encontrarás facilmente) donde hay puestos de café gourmet, sushi, tapas, cortes argentinos, etc.
Al parecer los nuevos galanes de mercado, emprendedores visionarios, no dejan de lado la tradición de nombrarle «güerita» a toda clienta, no importa su color de piel.

Cuando iba a quedarme de pequeñita con mis tíos a su casa los domingos eran muy peculiares primero debíamos de ir a misa a la iglesia que se encuentra en la Colonia de San Pedro de los Pinos y una vez que terminaba nos íbamos al mercado de la misma colonia y hacíamos el mandado y cuando ya daba la hora de la comida no podía faltar el ir a comer a los puestos de comida donde algunas veces eran fritangas otros caldo de gallina o los mariscos, han pasado los años y a mi me sigue encantando ir a comer a los mariscos tengo dos lugares el nombrado” Lo mejor del mar lo tienes en Altamar” este es una barra donde pides cocteles de camarón o tus pescadillas. Y tengo otro que también me gusta mucho y si tiene más mesas y sillas es «la fuente de la juventud» donde el ceviche es mi favorito y una ya que terminaste a en el mismo pasillo hay un local de postres donde el flan es riquísimo. La verdad es un mercado pero el área de comida está muy limpia y el servicio es muy bueno porque como hay tanta competencia entre los establecimientos se esmeran para atenderte. Los precios son accesibles y la calidad de los mariscos es muy buena y fresca. Es un lugar muy pintoresco para pasar un domingo familiar

El de San Pedro es uno de aquellos mercados que tristemente ha perdido sus viejos encantos al desaparecer los puestos de frutas y verduras. Sin embargo en su etapa «moderna» cuenta con algunas cosas que lo hacen muy especial, como sus negocios de pescados y mariscos, particularmente Mariscos Altamar, con gran variedad de alimentos y precios.
En el plan más austero se comen deliciosas tostadas, quesadillas o gabardinas de pescado y empanadas de jaiba. Junto con el sushi del restaurante El Salmón Dorado, los cocteles de mariscos y el caldo de camarón tienen fama más allá de la colonia.
El mercado también es famoso por sus locales de jugos de frutas y postres. Y para comida casera no hay como la fonda de doña Rosita, que ofrece romeritos y bacalao en temporada de cuaresma, así como un menú económico pero bien dotado. Hay un local con moles buenísimos de San Pedro Actopan, para preparar en casa sin necesidad de ir hasta Milpa Alta. Y la pollería es de muy buena calidad. También se venden bonitas plantas de ornato, pero a precios de boutique. Una recomendación sincera: Toma previsiones para evitar los baños del mercado.