Los Machetes de la Obrera

5 de 5 por el servicio, la rapidez con la que entras al lugar y, pese al tamaño, con la rapidez con la que te sirven las quesadillas.
Y qué quesadillas, unas cosas de aproximadamente 60 cm retacadas de lo que tu pidas, que puede ser queso, carne, hongos, chicharrón o combinadas y a un precio que va de 41 a 44 si las quieres de uno o dos ingredientes.
Lo particular que tiene tambien es que son tan grandes estas cosas que deben servirtelas hasta en dos plaros y las comas con cubiertos para poder disfrutarla. Sin duda es un lugar idoneo para romper con la dieta y zamparte algo sabroso que puedes bajar con refresco o una jarra con agua.
El palacio de la quesadilla pero en el corazón de la colonia Obrera y a unos pasos del Metro de la Linea 8 con el mismo nombre. En la esquina de Manuel Payno y Bolivar la encuentras y para todo un día tienes comiendo una triste «quesadillita». ¡¡Delicatencia pura!

Por mi nombre juro serle fiel a Los Machetes de la Obrera y educar a mis hijos y a los hijos de mis hijos a amar este lugar con cada molar de su dentadura. Desde 1964 los Machetes nacieron en la colonia Guerrero gracias a la creación sin igual de unas quesadillas que miden poco más de medio metro de extensión por la cabeza y corazón del hogar: doña Amparito. Al pasar de los años y tras el éxito obtenido, los herederos de Amparo no se quedaron de brazos cruzados y fue así como Los Machetes vieron la luz en la colonia Obrera. Mi favorita es la Champion-​especialidad de la casa-​, con su enorme tira de quesillo, sus pimientos, tocino, cebolla y bistec delicioso (no como aquellos que simulan ligas), ingredientes todos que se danzan entre ellos para ser abrazados por una crujiente tortilla gigante. Se debe llegar con anticipación pues el lugar es pequeño y rápidamente se llena, con un machete es suficiente para llenarse, de bajo costo y sabrosísimos.