Hace poco vi este lugar al pasar por lo que queda de Masaryk. Es un espacio bonito y bien aprovechado. En el interior hay locales de varios giros. Yo fui por café con el Canalla y valió la pena. Hay desde aguas de coco hasta kebabs. Muy al estilo del rumbo hay para todos. Ideal para un lunch de Godínez de Polanco. Elegantes y Chics. El lugar es muy interesante y aprovechó bien lo que acabaría de estacionamiento de patrullas o basurero. Tienen estacionamiento para poder llegar en auto y no arriesgarse a caminar entre coches, tractores y microbuses de la muerte.