La Guelegetza es una buena opción para venir a disfrutar de comida mexicana, sobre todo comida Oaxaqueña, ya que sabe muy deliciosa y como todos sabemos, este festival es típico de allá. El servicio es bueno y aunque pareciera que las porciones son pequeñas uno termina satisfecho. Es realmente agradable venir aquí con la familia. Yo recomiendo los panuchos, que son como gorditas, pero de carne molida. La cochinitia también es muy rica. Así qué vengan a disfrutar de los platillos que ofrece este lugar. No sé si haya más lugares como este, pues yo vengo aquí porque me queda muy cerca.
Francisco O.
Tu valoración: 4 Mexico City, México
Si de disfrutar de la comida oaxaqueña en el Distrito Federal se trata, el restaurante La Guelaguetza, en la colonia Álamos, es una muy buena elección. Se trata de un local amplio y bien acondicionado en una planta alta, con estacionamiento en la planta baja, adornado con motivos y fotografías de la ciudad de Oaxaca y sus alrededores. En este negocio fundado por la familia Maldonado en 1958 con el nombre de Cielito Oaxaqueño(que ocupaba un local adyacente al actual), se encuentra lo más genuino de esa rica gastronomía, ya que además de un profundo respeto a las recetas familiares la mayoría de los ingredientes son traídos directamente desde la Antigua Antequera. Una buena idea es ir a desayunar unas inigualables enfrijoladas con hoja de aguate, pan de huevo y chocolate de agua. Para la comida, te recomendamos antes que nada, como aperitivo, un genuino mezcal de gusano, para acompañar alguna botana tradicional, como el entremés surtido, que incluye quesillo, chorizo, moronga y chicharrón seco. También puedes optar por una tlayuda con asiento y queso, unos«pichones»(chile cuaresmeño rellenos de quesillo) o una orden de chapulines(en temporada), acompañada de un rico guacamole. Entre los platillos principales el rey es obviamente el mole negro oaxaqueño; pero también es estupenda la cecina de cerdo enchilada, el tasajo, las enmoladas, y una variedad de moles que se turnan como platillo del día: amarillo oaxaqueño, coloradito y verde. Deliciosas son las aguas frescas(melón, mango y en especial guanábana, con una bola de nieve dentro) y los postres igualmente genuinos: nieve quemada, vainilla, fresa, así como mamones y merengues. Hay un surtido servicio de bar.
Veronica G.
Tu valoración: 3 Mexico City, México
Un lugar tradicional, desde niña era el lugar preferido de mis abuelos que son oaxaqueños, ya que podían disfrutar de una rica sopa de guías, que son las hojas de la chilacayota. En lo personal siempre voy por una tlayuda básica, es decir tortilla, asiento y salsa, tal vez con un poco de queso fresco que su sabor es fuerte como el cotija, pero le da buen sabor, con una salsa molcajeteada de jitomate con chiles de árbol verde, cebolla, ajo y sal. Otra recomendación es «Almendrado de lengua», es un guiso espectacular y delicioso, a base de almendras, jitomate y pasas. La cocina oaxaqueña es muy pro, ya que combina sabores y especias, que crean platillos maravillosos, obvio no deje de pedir su mezcal para la digestión. Un lugar más oaxaqueño que no tienen dulces tradicionales y eso si es imperdonable.