Hace unos meses me mudé a un par de cuadras de donde vivía y me encontré con una joya callejera a la que me volví adicta: el puesto de garnachas que se encuentra justo en Tehuantepec y Tonalá, en la colonia Roma. La primera vez que fui tenía un antojo mortal de un taco y cuando llegué y vi las cebollitas sofritas en el comal, uff, no pude resistirme. Pedí un taco de bistec; me lo sirvieron en tortilla verde, con cebollitas y papas fritas. La salsa verde está buena, picosa para mi gusto(no como picante), pero aguanté unas cuantas gotitas. Un par de días después regresé por quesadillas. Estas también están deliciosas(especialmente las de pollo y picadillo). Los dueños del puesto ofrecen, además, sopes, tacos campechanos, tlacoyos y pambazos pero, sin duda, los aplausos son para los tacos de bistec tan exquisitos que hacen. El precio de cualquiera de estos manjares es de 12 pesitos.