El Pialadero de Guadalajara

La verdad es que me decepciono mucho el servicio y la calidad de los alimentos. 1000 recomiendo más la sucursal Chapultepec.

La carne en su jugo es buena, lo mas parecido a estar en Guadalajara, la torta ahogada también es buena. Si vas con mucha hambre ni seas penoso y pide dos!
Ten cuidado con lo picante por que medio picante es como para ponerte como caricatura de popeye explotando.
El servicio es bueno y rápido.

¿Cuántos fanáticos de las tortas por aquí? y ¿Qué tal de las tortas ahogadas? Hace mucho no probaba una excelente torta ahogada. El Pialadero de Guadalajara además de las famosísimas tortas ahogadas cuenta con un menú que no puedes perderte aunque para ser honestos, si visitas este lugar y no comes las tortas ahogadas estás muy mal.
La onda está así, te dan tu par de guantes, te sirven tu torta (tamaño medio) y te ponen una salsa de habanero que no puedes con ella. Puedes acompañarla de una deliciosa agua de horchata o de tu cocota para bajar lo sumamente picoso de la salsa. Al poco rato que se te haya quitado lo enchilado, te recomiendo ampliamente sus postres, son una verdadera exquisitez que vale la pena probar.
Los costos son moderados, bueno, depende de lo que vayas a comer. La atención no es la mejor pero digamos que todo está en orden. Vayan, coman y enchílense, ¡está bien rico!

El Pialadero es de mis lugares favoritos en las lejanas tierras de Santa Fe. Mis amigos de Guadalajara dicen que es una falta de respeto que te den un guante para comer la torta ahogada pero yo opino que es lo mejor.
Las ahogadas de carnitas son lo máximo, la salsa es deliciosa y la carne no tiene nombre, la atención de los meseros es rápida y eficiente.
Tienen además unos tacos de camarón gigantes que en lo personal también me encantan, el lugar ideal para celebrar un cumpleaños Godín.

Sólo conozco un lugar en el DF donde puedes encontrar una auténtica torta ahogada, es aquí: El Pialadero de Guadalajara. Esta sucursal me parece mejor, ya que cuenta con suficientes mesas para su alta demanda y decorado muy como hacienda.
Pide de entrada una michelada, si te gusta lo picante, pídela estilo pialadero, las sirven en un típico jarrito de Tlaquepaque. Y de ahí vete directo a ordenar todo lo que vayas a comer, te recomiendo muchas cosas: tostada de carne, taco de marlín, taco de pierna o tostada de aguachile. Éste último es espectacular aquí, hay tres variedades: verde, rojo y negro (con habanero). Yo pido el verde, pica bastante pero es adictivo. Esta bien preparado y tiene la cantidad perfecta de limón y chile, en especial, lo que me gusta de este plato aquí es que el camarón esta fresco pero le dan un toque rápido de cocción, así no te lo comes «gris» como en otros lugares.
Y bueno, la especialidad de la casa: torta ahogada de carnitas o de camarón. Y te la ofrecen «media» o «completa» esto no significa la mitad de una, sino la cantidad de salsa picante (muy picante típica de Jalisco, roja, muy líquida) que lleva la torta mezclada con la salsa de jitomate. Honestamente te recomiendo que la pidas solo con la salsa de jitomate que no pica y ya tu pides salsa picante aparte para que le pongas a tu gusto, porque si te pasas, todos los fluidos de tu cara saldrán sin parar. Te dan guantes de plástico para comerla sin batirte todo, me encanta ese detalle, porque repito, la salsa picante esta bravísima y si te tocas el ojo después, ni te cuento.
El servicio es muy rápido y amable, la cuenta al final no es nada grave y seguro regresas, lo recomiendo ampliamente.

La comida del Pialadero de Guadalajara es comida tapatía, puedes encontrar tortas ahogadas, carne en su jugo, aguachiles, tacos de camarón etc. Es excelente, me atrevería a decir que incluso es mejor que de muchos restaurantes en Guadalajara.
Es el segundo restaurante después del de la Zona Rosa, y aunque la calidad de la comida es la misma, el local es muy distinto. No es lo mismo estar dentro de un centro comercial que disfrutar una terraza en la banqueta. El mismo ambiente acorta las sobremesas. El otro está abarrotado todo el tiempo y este está vacío.
Tienes que probar la michelada pialadero, que te la sirven en un jarrito y tiene un sabor muy especial. No te puedes perder el taco de barbacoa que no tiene nada de grasa y es de los más ricos que me he comido. Para aquellos que se van a aventurar a pedir la torta ahogada les recomiendo pedir el picante aparte. Una cortesía del restaurante es que te ofrecen un guante de plástico para que la mano no te huela a torta ahogada todo el día.