Centro Óptico Madero

Un par de veces he perdido mis anteojos. Alguna vez caí en la propaganda de este pasaje en donde te dan los lentes en 1 hr. Mala desición.
Pero en la misma búsqueda me topé con el local 12 PB, debajo de los que me quedaron mal. Y como están de moda los armazones gruesos aquí he encontrado a capricho varios estilos diferentes a precios accesibles y siempre están en el momento en que me dicen que estarán sin fallas de graduación. Vuelvo con regularidad porque también aceptan tarjetas de crédito.
Es como muchas ópticas, pero la familia siempre suele ser amable y me han hecho regresar 2 veces para seguir cambiando de modelo.

De entrada les aviso que afortunadamente no uso lentes, o bueno, todavía no me he checado los ojos y las molestias que tengo en las noches, pero mis hermanos, mi papá, mi novio y su mamá son miopes (jeje en el e buen sentido). En mi familia se ha hecho tradición ir a buscar lentes al Centro Óptico Madero, por la cercanía, la variedad de modelos en las diferentes ópticas, la buena atención en todas, la rapidez de entrega y muy en especial por los precios súper bajos.
Es una muy buena opción alejarse de las famosísimas cadenas de ópticas y acercarse a este centro óptico en la colonia Centro de la Ciudad de México. Encuentras las mismas marcas de armazones, los mismos tipos de micas e incluso, hasta una variedad más amplia.
El centro óptico tiene una planta baja y un primer piso. En la planta baja hay una buena cantidad de ópticas y en el primer piso se encuentran los gabinetes en los que te hacen los exámenes, pero ojo, les recomiendo que no consuman líquidos antes de ir al centro óptico, pues todos les van a negar el uso de los baños.

Antes de operarme la vista con cirugía laser, hace como tres o cuatro años todavía usaba lentes y después de comprarlos en varios lugares donde, tanto el armazón como las micas me salían carísimas, descubrí el Centro Óptico Madero, en el corredor peatonal del mismo nombre, en el Centro Histórico.
Dentro de la Plaza Comercial Madero hay varios locales de ópticas y todos manejan los mismos precios. Venden armazones de marca y distintos tipos de micas, a precios aceptables. Por ejemplo, recuerdo que en ese entonces me llegué a comprar dos armazones, uno Tommy y otro Ray Ban, a sólo 1000 pesos cada uno y las micas en 400, el par.
Además, cada seis meses tenía que cambiar las micas y me hacían un descuento del 20 por ciento, razón por la que me salían todavía más baratas. Además, trabajan rápido, pues en menos de dos horas ya estaban mis lentes listos.