Yo no conocía esta pizzería hasta apenas un par de días atrás. Mi visita se dio cuando visité a mi primo en su casa en la colonia Nápoles. Decidiendo qué comer, la esposa de mi primo, quien es uruguaya, me preguntó si conocía las pizzas uruguayas, a lo que contesté que no. Ante esto, ella sugirió ir esta pizzería que, según ella, es de pizzas de aquel país sudamericano. Las pizzas están bastante buenas. No son delgadas, sino que tienen una gran capa de queso, pero este está bastante derretido, por lo que no se parecen en nada a las pizzas gringas. Además de las pizzas, te sugiero que pruebes las empanadas, en especial las de carne que están buenísimas. Por último, esa experiencia también me dio la oportunidad de probar la cerveza uruguaya Patricia. Es oscura y espesa pero no tiene el sabor amargo que muchas de esas cervezas, sino más bien tiene un dejo medio dulce, pero lo suficientemente tuene para no endulzar la cerveza. Pruébala, vale la pena.
Víctor G.
Tu valoración: 2 México, D.F., México
A diferencia de la mayor parte de los comentarios de mis compañeros Unilocalers sobre esta pizzería, tengo que decir que mi experiencia no fue la mejor, no sé si me tocó un día que no estaban finos o qué pasó. Un grupo de amigos me invitó a pasar una tarde culinaria en la Central de Pizzas de la avenida San Antonio, y como todo un enamorado de dicho alimento acudí puntualmente al deguste en aquel local. Hicimos nuestro pedido que tardó en llegar, ahí comenzaron los problemas. Una provoleta con jamón fue la orden, el sabor era bastante acartonado(y no es que haya probado ya el cartón), no comí más que una rebanada y media. Luego no traían mi bebida, la cuenta tardó en llegar y cuando por fin arribó hubo más dificultades para pagar. Algo por ahí no quería que mi experiencia con la Central de Pizzas fuera buena.
Veronica G.
Tu valoración: 3 Mexico City, México
Un lugar italo — argentino, que tiene buenas propuestas y sabor, por ejemplo te hipnotizan con e l agua de limón con menta, fresca y con buen nivel de azúcar, ni dulce ni simplón, algo decente. Después pueden seguir por una milapizza, que no es otra cosa que milaneza rellena de los ingredientes que puede contener una pizza. Después el lugar está bastante cool, hay que esperar un momentillo si piden pizza, ya que están hechas de manera artesanal y no estarán tan rápido, así que no ecomendable ir con una hambre feroz. Las empanadas se les antojarán seguramente, además de tener muy buena vista, junto con los calzones. Ya si llega al postre seguramente no podrá resistirse al helado de chocolate o bien, un licor para la digestión, además de pedir un buen espresso. Un lugar para el sábado relajado o una cenita entre semana después del trabajo.