Templo del Inmaculado Corazón de María

Este templo está ubicado en el barrio arriba en la ciudad de León, es uno de los más bonitos para mi, tiene su plaza con un kiosko y un mercado en esa misma cuadra.
Es un templo muy socorrido, siempre hay gente aquí porque todas las personas que viven cerca acuden a las misas, es muy amplio y tiene capacidad para grandes concurrencias así que si te casas y son muchos invitados a la iglesia, esta es una buena opción.

La esquina que ocupa este templo es una de las áreas más tranquilas de León. A pesar de ser aun zona céntrica los alrededores de este templo parecen siempre tranquilos. Las edificaciones que lo rodean son todas contemporáneas, la iglesia es el único edificio sobreviviente de ni más ni menos que el siglo XIX. Antes de esta versión del templo existió una, perteneciente a la orden Jesuita, este edificio que ahora no existe se construyó en el siglo XVIII, pero a finales del siglo XIX fue demolido para construir el actual. Su fachada es ejemplo de la sencillez del estilo gótico catalán. Las arquivoltas abovedadas de las tres puertas al frente es profunda, lo que hace que cuando pases a través la atmosfera solemne te envuelva por completo. Por fuera también es importante apreciar el trabajo de sillería en dos tipos de piedra, en tamaño y color. La torre del campanario es igualmente un elemento distintivo con vanos alargados y su pináculo liso. Es muy bonito apreciar que tanto en la forma de su planta como en la alzada de los muros sigue el modelo antiguo de planta de cruz, con tres naves, las laterales más bajas que la principal, en la que queda espacio para las vidrieras barcelonesas tan famosas de esta iglesia. Es increíble la riqueza arquitectónica en tan solo unas cuantas cuadras.

Cuando hablo de iglesias me gusta ser extenso en mis reseñas y con historia, porque se que sirve saber si fui a misa ahí o no o decir en que iglesia el padre habla más rápido y termina mas pronto la misa, conmigo eso no va así que empecemos. Este templo data del año de 1731 por la órden de los jesuitas pero su nombre original fue la Santa Escuela, cuando los jesuitas fueron expulsados en 1767 la iglesia estaba en ruinas aunque los encargados hacían mejoras, pero ya para el año de 1896 los misioneros hijos de María inmaculada solicitaron autorización para demolerlo y construir uno nuevo, pero siguieron los patrones del estilo neogótico catalán. Algo realmente hermoso son los vitrales con adversas advocacion es de la virgen María y éstos fueron fabricados en Barcelona.

Es uno de los templos más bonitos de la ciudad, conserva ese toque colonial que distingue a estas construcciones del resto.
Aquí celebramos las bodas de plata de mis abuelos, y la verdad es que tengo un lindo recuerdo de este bonito templo, aun recuerdo que me daban un poco de miedo algunas canciones que el coro de la iglesia entonaba, el tono de las melodías me parecían un poco siniestras, ahora solo me causa gracia ese pequeño trauma que sufrí, afuera de la iglesia según recuerdo venden las más ricas gelatinas que he probado en mi vida.
El templo es bastante amplio, dudo que se puedan quedar sin asiento en su vista. La decoración está muy linda, sin duda un lugar bastante interesante por visitar, un lindo lugar para los católicos, que gustan de disfrutar una ceremonia religiosa en compañía de su familia.

Este antiguo templo es una obra construida por los jesuitas cercad del año 1746, lo que lo posiciona como uno de los más antiguos de la región, tiene un estilo neoclásico por dentro, donde se resaltan sus columnas y la sencillez en cuestión ornamental, el lugar es apto para cerca de 200 personas en una celebración, es amplio su interior y los arcos de su bóveda le dan un efecto muy elegante como si de un palacio medieval se tratara.
Así mismo cuenta con cuatro capillas laterales con un bello estilo art decó, con elementos muy finos y armónicos, muy simétricos en ambos lados, lo que te hace transitar de un estilo completamente conservador y austero en la bóveda principal a un mundo muy simétrico y elegante en las capillas pequeñas.
Hade unos meses fui a una boda en este templo y quedo espectacular, parecía un sitio palaciego, con las luces colándose en los ventanales, y los arcos de cantera, además los adornos que pusieron en el largo pasillo al altar le dieron un toque muy especial, es un lugar maravilloso para este tipo de celebraciones.