Esta es la iglesia más bella que puede existir en Juchitán, desde que entras ves arte puro, lo digo por que tiene algunas decoraciones en dorado que aparenta ser oro y esas decoraciones van hasta el altar el cual es puro brillo, no sé si sea de oro pero todo es dorado y muy brillante. Esta iglesia es conocida porque fue utilizada como refugio cuando estaba la batalla contra los franceses y que esta misma fue construida por manos indígenas por lo cual incrementa su valor tanto cultural como histórico. Desde la fachada se puede ver que es una construcción simple ya que es blanca con rojo y dos torres, justo en medio esta una estatua y por la parte de afuera como a medio patio hay una estatua dedicada a San Vicente Ferrer, quien es el patrón de la Ciudad por lo que es una iglesia muy visitada y les recomiendo venir si andan por esta zona de Oaxaca, la región del itsmo.