Tu Párvula Boca

Anteriormente en este lugar era el Café Quimera, el cuál frecuentaba por lo menos una vez a la semana. Tiempo después quienes se encargaban de la cocina recuperaron el lugar, habilitando el garage con una preciosa cocina con un horno de leña, y poniendo unas cuantas mesas en la parte de afuera de la casa.
Su nueva propuesta comenzó con pizzas a la leña, pero no como cualquiera de las muchas que encuentras por la zona, pues se esmeran realmente en buscar sabores y tener excelentes ingredientes.
Las salsitas que ponen al centro de la mesa con pan mientras te traen tu platillo son deliciosas, y hacen sus propios aliolis.
Poco a poco han crecido su menú, primero añadieron swandiches con pan que ellos mismos hornean (en su horno de leña), y carnes y verduras que cocinan en el mismo horno, como su delicioso roast beef. Todos los swandiches los acompañan con unas papas que cocinan en unas cazuelitas con aceite y aromas.
La última vez que fui me tope con la sorpresa de una arrachera rostizada, que la sirvieron con un topping de ensalada de arúgula, podría decir que se convirtió en mi platillo favorito, pero más allá de eso, me pone en serios conflictos sobre qué voy a pedir la siguiente vez que vaya.
Los lugares donde se esmeran en las aguas frescas tienen ya 5 estrellas para mi, y las combinaciones como papaya con lavanda que he probado, son muy ricas. Si llegan al postre tienen un pay de chocolate delicioso, no es nada empalagoso y podrás compartir para cerrar tu rica cena.
Otra novedad son las comidas a medio día, por $ 70 sirven comidas completas, que no las he probado pero conociendo la cocina de Tu párvula boca deben de ser una delicia.

El plan original era cenar con los amigos en un popular restaurante de ramen, pero como los meseros estaban histéricos, decidimos buscar otra opción. Uno de mis amigos sugirió que visitáramos Tu Párvula Boca, yo no lo conocía así que con ánimos de experimentar acepté la invitación y estoy muy contento de haberlo hecho.
Este pequeño y encantador espacio fue una gran sorpresa, la cocina está bellamente instalada en la cochera de una vieja casona, de esas afrancesadas que te hacen imaginar la Guadalajara de hace 100 años. Este local es atendido por sus dueños, una joven y amable pareja que hicieron que mi visita fuera extraordinaria y que quisiera regresar lo más pronto posible, aquí preparan pizzas, tienen platillos veganos, ensaladas con mezclas deliciosas y vino de excelente calidad, todos los detalles estéticos están cuidados al extremo, es un lugar encantador que te recomiendo visitar de noche, tiene un ambiente romántico sin caer en lo cursi.
La cocina es un espacio encantador, está decorada con talavera y puedes ver cómo preparan cada uno de tus alimentos, me encantaría que le des una oportunidad, que conozcas a los dueños, que platiques con ellos, siempre están a cargo de la cocina, de atenderte y ofrecerte lo mejor para que tu velada sea encantadora.

Si buscas un rinconcito peculiar en la ciudad ésta es la opción.
El lugar es atendido por una pareja que también son los dueños, son muy amables y cordiales. Está ubicado en un pasillo al costado de una casona vieja hermosa. La cocina es espectacular tienes que verla en persona. La carta es pequeña pero peculiar. Todo está preparado con productos veganos y de plato fuerte la opción es: pizza. Es ideal para ir con amigos o en pareja, sobretodo en pareja tiene un mood muy romántico.
Las entradas también son deliciosas. Te recomiendo la pizza Margarita (albahaca y jitomate horneado). El pan es hecho en casa y delicioso.
¿De beber? Un Tisana fresa kiwi. O una agua del día.
Checa mis fotos para que se te antoje, aunque sé que en persona te sorprenderá la atmósfera.

Un concepto diferente para paladares exigentes y con un servicio de pocos, este es uno de mis rincones preferidos de Guadalajara. El lugar se encuentra en el corazón de la vía Americana — Expiatorio y cuenta con una de las vistas mas bonitas del paisaje urbano. No contaré más para que vayan y pregunten por los platillos, les recibirán siempre con una agradable sonrisa