Es un templo muy escondido en la ciudad, lo que pasa es que ni hay espacio para dejar los coches, además por lo general los templos tienen entrada y hay espacio, aquí no, sales del templo, y literal, a un paso ya está la calle. Tengo una teoría, como el templo se terminó de construir en 1882, es decir, cuando Guadalajara era un pueblo, pues no existían los coches. El problema fue que al crecer la ciudad y extender su territorio, tuvieron que trazar calles y eso fue lo que le afectó. El templo no está feo y se siguen ofreciendo misas, el problema, repito, es que está muy escondido y no llama la atención de muchos fieles, sin embargo sí tiene sus participantes, muchos o pocos, pero los tiene.