Reguera

Sevilla, España

4.3

6 opiniones

Acepta tarjetas de crédito

Contacto

Código QR, vCard

Teléfono:
+34 954 21 40 84
Dirección:
Calle Almirante Apodaca, 23, Sevilla, 41003
Encarnación - Regina
Paradas y estaciones de transporte público cercanas:
790 mPlaza Nueva
860 mRonda de Capuchinos (San Julián)
900 mRonda de Capuchinos (Avenida Miraflores)
Categorías:
Código QR
Descargar imagen QR Descargar vCard

Mapa

Vista de calles

Activar mapa

Información del negocio

Tarjetas de crédito
Sí

Hoy

Hoy –
Horario local (Sevilla) 7:07 domingo, 2 de noviembre de 2025

Horario de apertura

lunes 10:00 – 14:00
17:00 – 21:00
martes 10:00 – 14:00
17:00 – 21:00
miércoles 10:00 – 14:00
17:00 – 21:00
jueves 10:00 – 14:00
17:00 – 21:00
viernes 10:00 – 14:00
17:00 – 21:00
sábado 10:00 – 14:00
domingo –

Lugares relacionados

Explorar lugares similares:
80
m
Los Terceros
Plaza de Los Terceros,14 (Santa Catalina)
100
m
La Fragata Azul
Calle Francisco Carrión Mejías, 5 (Santa Catalina)
130
m
Antonio Castro
Calle Sol, 3 (Santa Catalina)
160
m
Sor Ángela Librería
Calle Santa Angela de la Cruz, 3 (Encarnación - Regina)
250
m
Rayuela
Calle Jose Luis Luque,6 (Alfalfa, Encarnación - Regina)
270
m
Argeryon
Calle Jose Luis Luque, 10 (Alfalfa)

Inmediaciones

Cerca de esta ubicación:
10
m
Ecofruta Andaluza
Barrio Juan Xxiii, 444
10
m
Aromas Selectives
Calle Almirante Apodaca, 27
10
m
Juan Antonio Cruz Ortiz
Barrio Juan Xxiii, 193
10
m
Suinan la Cadena
Barrio Juan Xxiii, 570
10
m
Calderon Ponce Antonio
Barrio Juan Xxiii, 811
20
m
Lopez Padilla Antonio
Calle San Felipe, 15

6 opiniones sobre Reguera

No se requiere registro
Tu valoración: 5
Sevilla
No puedo ser objetivo en un comentario sobre librería Reguera, porque con los años se convertido en mi librería. Esto se debe a que se trata de un librería cercana, que se esfuerza por mantener una buena relación con sus clientes ofreciendo un servicio atento y profesional.
Los escaparates de librería Reguera no paran de actualizarse y aunque su oferta es amplia (libros escolares, bolsillo, infantil, cine, teatro, novelas de estreno,…) si necesitas algo que no tengan en ese momento no dudarán en hacer las gestiones necesarias para conseguir el libro que quieres en la edición que buscas. Gracias a ellos he podido encontrar ejemplares descatalogados que había dado por imposibles.
Julio, al frente de la librería, ha conseguido un ambiente familiar. Cuando entras en Reguera y Yolanda te llama por tu nombre para decirte que el libro que pediste ha llegado realmente te sientes como en casa.
Tu valoración: 5
Sevilla
Me gustan las librerías pequeñas, con personalidad y sobre todo con un dueño al que se le note la pasión por los libros cuando te atiende. Julio, el dueño de Reguera, cuida de su clientela para que te sientas en una librería de toda la vida donde el trato es de tú a tú, de vecino del barrio sin importar si lo eres o no.
En su escaparate tenemos un fiel reflejo de lo que podemos encontrar en su interior: una selección variada que va desde el último éxito editorial a títulos para lectores más inquietos y ediciones especiales más cuidadas. Abundan los clásicos y los clásicos contemporáneos y puede que sea la librería de la ciudad que ofrece la selección más importante de títulos de teatro, tanto textos dramáticos como escritos sobre artes escénicas. También el cine es una de sus especialidades.
Reguera es una librería perfecta para bucear por sus estanterías y dejarte sorprender con algún título, pero si vas a tiro hecho a por algo y no lo tienen, Julio hará todo lo posible para encontrarlo y encargártelo.
Tu valoración: 4
Sevilla
Era un cinco de enero por la tarde. Yo ya llevaba unas horas dando vueltas por el centro en busca de un libro que mi padre me había comentado que le gustaría leer. Llovía a cántaros, el agua había calado mis viejos zapatos y me sentía realmente cansado. Maldije mil veces mi costumbre de dejar los regalos para última hora, pero ya que consiste en un mísero libro, pensé, al menos que no sea un best-​seller elegido rápido y mal para salir del paso, así que insistí en encontrarlo tras varios intentos fallidos en sendas librerías. La gente andaba de forma apresurada con la mirada perdida, presos de la extraña mezcla que suponía para sus turbadas mentes la compra indiscriminada de objetos con la fugaz y débil esperanza que había dejado en sus ojos haber observado durante unos minutos las caras fascinadas de sus hijos al ver pasar los reyes de oriente.
Había abandonado ya la idea de encontrar el título en cuestión, debido en parte a mi asumida aversión por las compras y las multitudes, cuando una imagen difusa de un escaparate que reflejaba quietud y sosiego entre un mar de paraguas agitados, me atrajo hacia su interior.
Allí una amable persona puso en mi mano rapidamente el libro tan anhelado por mis pies.
Siempre que paso por su escaparate me acuerdo de esa fría tarde de invierno
Tu valoración: 4
Sevilla
Cuando veo comentarios de librerías a las que hace tiempo que no voy –no por que hayan dejado de gustarme sino porque tengo cerca otras de similares características: pequeñas, independientes y con las referencias que busco– se me enconge un poco el estómago. Sé que no soy responsable de que les vaya bien o mal, pero en realidad creo que hay que diversificarse y apoyarlas a todas (las pequeñas) en la medida de lo posible. Porque es terrible la cantidad de estos negocios que han desaprecido en Sevilla en los últimos años.
Además, con Reguera siempre me ocurre algo sorprendente: aunque tengan un espacio pequeño y yo a veces vaya buscando títulos no muy comerciales, ellos siempre los tienen. No sé si es que coincidimos en gustos o que su almacén es grande, pero a juzgar por este hecho y dándome un poco de coba a mí misma, diría que tienen muy buen gusto en la selección de su fondo.
Aquí también encuentro siempre las pequeñas y cómodas agendas que cada año edita la editorial Horas y Horas de literatura feminista, «La Agenda de las Mujeres» que van dedicando a temas distintos (las maestras, mujeres árabes, mujeres y medicina, etc) y para las que también reproducen pinturas o dibujos de diferentes artistas. Suelen ser muy bonitas e instructivas. Vas leyéndolas poco a poco, a medida que pasa el año. Y ya se han convertido en una tradición para mí.
Tu valoración: 4
Sevilla
El escaparate de la Librería Reguera ha sido uno de los que más me he parado a ver en mi vida. Los escaparates que están a los lados de la puerta están llenos de libros recién publicados y los best selleres además de libros de niños pequeños y adolescentes.
El escaparate que está junto a la cervecería El Tremendo está lleno de libros de cine. Es una de las tiendas no especializadas en cinematografía con los libros más notables. Hay biografías, enciclopedias, libros especializados en épocas o movimientos cinematográficos además de libros sobre técnicas de cine.
Las dueños son de los libreros más simpáticos que he conocido en mi vida. Mi madre se lleva muy bien con ellos después de tantos años pasándose por la tienda y charlando con ellos.
Tu valoración: 4
Sevilla
Reguera es esa librería cuyo escaparate habréis mirado tantas veces mientras disfrutabais de un cervezón en El Tremendo. Varias generaciones han tenido esta misma experiencia y ahí continúa el negocio, soportando los envites de las Beta y de los grandes centros comerciales.
Su interior no es grande, al menos no en proporción al extenso y siempre atractivo escaparate al que hacíamos referencia. Libros de todas las temáticas tienen cabida aquí y si no das con lo que buscas te lo piden, detalle que hoy día solo puede esperarse de libreros como Julio Reguera, toda una vida en el sector.
Ediciones de bolsillo, no muy frecuentes de encontrar, también son muy comunes en esta veterana librería de Santa Catalina. Hace un par de Navidades, buscaba la biografía de Antonio Machado que acaba de publicar Ian Gibson: «Ligero de equipaje», por muchas vueltas que di estaba agotada en todas partes; en Reguera pude encontrarla, al menos en pequeño formato.
De pequeño recuerdo que tuvo una hermana menor dentro de mi Colegio San Francisco de Paula y una papelería del mismo apellido en la propia calle Almirante Apodaca. Ambas pasaron a la historia, pero la casa madre sigue viva, Dios quiera que por muchos años.