Mal! no m han dejado tomar tapas fuera en la terraza, algo q no puedo entender… el cortado era chapapote y la clara sabía a rodaja de limón… siento der tan dura pero no puedo decir otra cosa…
Pete R.
Tu valoración: 4 Karlsruhe, Baden-Württemberg
Als wir auf unserem Rundgang durch Sevilla über die ruhige Plaza de San Lorenzo schlenderten, entschieden wir uns spontan für eine Pause auf der sehr schönen Terrasse des Café El Sardinero. Wie so oft in spanischen Bars ist das Innere gelinde gesagt unspektakulär. Dafür sitzt man auf der Terrasse wunderschön unter den alten Bäumen und hat einen perfekten Blick auf die bekannte Iglesia de San Lorenzo. (Siehe Foto unten)(Siehe Foto unten)(Siehe Foto unten)(Siehe Foto unten) Der Service war freundlich und in Ordnung. Zum Essen können wir nicht viel sagen. Eine Gazpacho-Suppe(2 Euro) wurde unspektakulär serviert, war aber in Ordnung. Als Gäste waren sowohl Touristen als auch augenscheinlich einheimische Stammgäste anwesend. Letztere bekamen ein lecker aussehendes wie riechendes Mittagessen aufgetischt, leider mussten wir weiter.
Juan Ignacio B.
Tu valoración: 3 Sevilla
Un bar atemporal sevillano. Tapas clásicas. En este caso, los inconvenientes de la terraza son el autoservicio, con bandeja, cual comedor, y algo tan inoportuno e irremediable, las condecoraciones de los pájaros que se posan en los árboles, sin ser escatológico. Suelo ir a desayunar cuando visito la academia de mis amigos, frente por frente a la plaza. Así que a disfrutar, eso sí, con ojo en tostada y otra en las ramas.
Felipe r.
Tu valoración: 3 Sevilla
Mi experiencia en este bar no ha pasado de la cerveza y del café, no puedo hablar de sus tapas pero si de sus camareros que son amables y simpaticos, Desde que la plaza es peatonal gano mucho, la terraza es comoda y amplia, casi siempre que he ido a tomar cervezas esta la misma gente, tiene su propia clientela ademas de la gente de paso. Esta junto a una de las iglesias mas visitada de Sevilla, alli esta El Gran Poder, pocos bares pueden presumir de tener un vecino tan importante. El bar es amplio y espacioso y al estar en la misma plaza es muy recomendable para personas con niños chicos, ya que pueden correr por la plaza y se pueden aparcar los carritos sin que molesten mucho. En primavera, llegando la Semana Santa aquelo es un hormiguero, no para de entrar y salir gente y muy apropiado tambien para los que se escaquean de las bodas, por eso es muy frecuente encontrarse en el bar gente vestida de chaquet y señoras con pamelas.
Jesus v.
Tu valoración: 2 Sevilla
Un bar típico, con una comida típica, en un sitio típico, por dentro no muy bonito, con la decoración de los ochenta que todavía se nota, pero con una terraza maravillosa por su enclave san Lorenzo. El servicio rápido, pero no vayas a desayunar el jueves, que es casi imposible, ya que es típico en esta ciudad visitar al señor del gran poder su día de salida. Bueno tan poco es recomendable en época de bodas ir un sábado por la tarde porque muchas chicas sevillanas, le gusta casarse delante del señor de Sevilla(como se denomina al gran poder). yo he tomado aquí ensaladilla, la verdad que buena y he desayunado muchas veces, el café y la tosta económico y muy buena . Te recomiendo que vayas después de tomarte un café a ver al señor de Sevilla, no es algo religiosa, son solo costumbres aquí en Sevilla.
Óscar H.
Tu valoración: 4 Madrid
Este bar se encuentra en la plaza de San Lorenzo, justo al lado del templo del Gran Poder. Lo que más me gusta de este bar es su terraza, dentro casi nunca hay nadie, si no es por necesidad. Y lo que más me llama la atención es el microaseo que tienen, que tiene 1metro cuadrado si llega. La primera vez que entré me pareció de coña, es como si abres el armario empotrado de tu casa y tienes la taza allí misma. Salgamos a la terraza que es lo guay. La terraza está muy bien, porque es amplia y está desparramada por la plaza, y no te da la sensación de agobio, ni estas oliendo los calamares fritos de la mesa vecina, sobre todo si tú tienes una triste tapa de aceitunas. Como está donde está, la afluencia a esta terraza es masiva en horas punta. La cocina, sin pretensiones y simple, está buena, pavía de bacalao, cazón en adobo, puntillitas, etc. los clásicos de siempre a precios populares. Los camareros aunque estresados están al quite. Me gusta este sitio.