El Capricho Andaluz

No sé si a los guiris le ven cara de pardillos o si a nosotros nos ven cara de listillos, pero la realidad es que esta tienda es de las que cobran el agua a precio de rioja. Por eso, los de la tierra, apenas entramos ni a saludar.
He de reconocer que su ubicación en pleno centro de la capital, en un lugar transitado y plagado de monumentos y con todo lo que quieras a tu alrededor; es un lujo. Pero, amigo, para lujos vete mejor al Corte Inglés.
Lógicamente de algún apuro de sed te puede sacar, ya que tienen refrescos de todo tipo y botellitas de agua de casi todos los tamaños. Pero yo, por si acaso, me suelo llevar el agua de casa (que para eso pago el impuesto correspondiente).
Es verdad que tienen algunos artículos curiosos para llevar de recuerdo. Hay varios botes de miel y mermelada artesanal que merecen la pena. Incluso si me apuras, los licores tienen bastante buena pinta. Pero cuando el dependiente abre la boca para decir el precio, me echa la sal encima.
Así que por mi parte, me retiro del Capricho Andaluz y le dejo paso a los turistas. Que para capricho andaluz ya estoy yo.

Una nueva modalidad de souvenirs, los souvenirs gastronómicos, bueno, nueva no, eso existe desde siempre, cuando era pequeño recuerdo unas botellas de licor con forma de futbolista, casas colgantes de Cuenca. flamencas y la mejor, la Torre del Oro, que soy fans y tengo algunas, ninguna llena.
Esta tienda tiene gran variedad de artículos para que los extranjeros se los llevan de recuerdo, casi todos de gran calidad, miel artesana, mermeladas artesanas también, variedad de vinos de clases y procedencias, Rioja, el mas conocido fuera de España, de la comarca, Rivera del Duero…
Tienen refrescos fríos y helados para salir del paso, viendo el sitio que están que desde su puerta se ve la Puerta del Perdon de la catedral pues es paso de extranjeros todo el día y para los extranjeros tiesos que también los ahí y no se quieren sentar en ninguna terraza porque piensan que los engañan pues pueden comprar a precio un poco mas caro que en las tiendas de barrio pero hijo, seguro que pagan muchísima contribución al ayuntamiento por el pequeño escaparate.

En pleno casco antiguo de Sevilla, justo al ladito de la Catedral, en una calle plagada de tiendas de souvenirs encontramos esta tienda de bebidas y comestibles destinada a saciar el hambre y calmar la sed de todo guiri dispuesto a pagar lo que sea por una fresquita botella de agua.
La pequeña tienda vende muchos productos típicos de Andalucía, también licores y vinos de toda España, conservas, helados y bocadillos. Pero está clarísimo que el gran negocio de El Capricho andaluz es las botellas de agua fría, y los refrescos a precios disparatados especialmente dirigidos a guiris, en otra parte de Sevilla menos turística no funcionaría como lo hace aquí.
Latas a 1 euro, botellas de agua a 1.50 y bocadillos a 2.50, para cualquier sevillano medio es casi un insulto, pero para muchos turistas en pleno casco histórico donde todos los restaurantes son caros, una tienda así es buena cosa.