Das Brot

Conocí a la gente de Das Bröt hace años en la costa de Cádiz, tenían tienda y obrador por la zona y cuando veraneaba por allí me acerqué varias veces. Sus panes, los saboreaba como la hambrienta de una miga y una corteza diferente que era (si hace una década examinamos el panorama panarra sevillano era para llorar, las cosas han cambiado afortunadamente). Si habéis pasado una temporada en Alemania u otro país del norte de Europa, me entenderéis.
Luego comenzaron a vender sus panes en el mercado de productos ecológicos de la Alameda y abrieron su tienda en Sevilla. Vivía por la zona y los visitaba de vez en cuando a comprar los brezel (me gustan mucho), tartaletas de frutos rojos y alguna que otra empanada dulce o salada. Poco a poco llegaron otras alternativas para el pan en Sevilla y la verdad es que corroboro lo que dice Rosana, sus panes son sosos y demasiado densos, y dejé de frecuentar la tienda tan habitualmente. Es cierto que este tipo de pan denso existe en Alemania, pero también tienen otras deliciosas alternativas.
No obstante, de vez en cuando y aunque ya no viva por el barrio, me acerco por allí a pillarme un brezel. Otra cosa que me gusta de su tienda, al margen de la bollería, son las frutas naturales desecadas sin edulcorar que venden.

Soy muy fan de esta panadería alemana. Todos los productos son naturales: panes, tartas, pasteles… además de los productos que preparan tienen unas pequeñas estanterías donde puedes comprar un poco de todo. Es un poco caro, eso sí, pero la calidad de los productos es muy buena.
El personal es muy amable y, si no tienes mucha idea, te explican cómo están preparados todos los pasteles y panes.
Truco: hay productos que no están siempre, por ejemplo, los brezels… que están espectaculares. Son los típicos lazos alemanes salados, valen 0,80 € y están muy ricos, pero son productos que tienen que traer de fuera y hacerlos el mismo día, por lo que solo puedes comprarlos los lunes y los jueves. Se acaban en poco tiempo, por ello recomiendo encargarlos unos días antes, aunque siempre tendrás que recogerlos los lunes o los jueves porque es cuando les llegan a la tienda de Sevilla.
Nota: de momento no se puede pagar con tarjeta, lo que es un poco rollo :(

Das Brot es una panadería artesanal y ecológica. De origen alemán, su especialidad es el pan artesanal, aunque también ofrecen dulces, tartas y pasteles caseros.
Lo destacado de Das Brot es que todo es ecológico, y muchos de los productos son sin lactosa. Casi todos los panes tienen gran cantidad y variedad de cereales. Y también hay panes sin gluten.
Por el sabor de los panes que compré, yo estoy acostumbrada a hacer pan en casa, así que me resultó un sabor familiar y conocido :) El pan que elaboras artesanalmente, no tiene nada que comparar con el pan industrial, ni su sabor ni su consistencia. El pan de Das Brot es un pan espeso, denso y no muy aireado, y cuando lo pruebes seguro que te gusta.
También en Das Brot tienen una zona con otros productos artesanales, como miel, mermeladas o productos en conservas naturales. Si te gusta comer zano, cuidarte y que tu alimentación sea saludable, debes ir, al menos una vez, a Das Brot.

Muy buena selección de bollería y panes de elaboración propia siguiendo la tradición Alemana

Había oído hablar del pan de Das Brot, pero después de comprar variado en dos ocasiones, la verdad es que no creo que vuelva (a menos que tenga hambre y no encuentre nada cerca).
Lo bueno del sitio, en mi opinión, es la variedad de panes. Los panes en sí, a mí me han decepcionado un poco, los he encontrado densos y poco sabrosos.
La segunda vez que fui era viernes y me ofrecieron pan de la hornada del lunes a la mitad de su precio. Sinceramente, por muy bien que se conserve un buen pan bien tratado, vender el viernes el pan del lunes a esos precios no me parece de recibo. Claro que el negocio no es mío, pero yo tengo claro que hay cosas mucho más provechosas que hacer con ese pan :)
De camino a casa me comí un hojaldre con brócoli que estaba rico.
No he probado el resto de cosas que tienen en la tienda.

Panadería ecológica en plena calle San Luís con una amplia variedad desde centeno puro a espelta, trigo, pan de semillas, linaza o pipas de calabaza. El precio es quizás un poco elevado pero a la vez comprensible por la agricultura ecológica y la elaboración casera. También puedes encontrar típicos dulces alemanes como Apfelstrudel y otros cuyo nombre no recuerdo.
Lo mejor, que los panes duran perfectamente 1 semana en el frigorífico y admiten congelación, una maravilla! Y si no intenta con uno de las panaderías de hoy en día con panes precocinados. Así mismo, también tienen un espacio con productos ecológicos. Interesante.

Das Brot is the place for all of your bread needs– you can go two ways here: first, you can buy the heavy German breads that are behind the counter. These are really, really hearty– the kind of bread that constitutes a meal. Have a thick slice of this stuff, and you’re good for the rest of the day. I will say, I’ve had the onion and sesame, and both are very good, but they don’t actually taste that different to me. I should also say that I think if you want to preserve these breads, the best route is to slice and freeze them, because they get hard very quickly otherwise. Second, you can buy the bread that’s in the window (on the San Luis side). This bread is lighter, usually white, and almost always cheaper (1 € instead of 3 – 4 €). Either way, you can’t go wrong. Das Brot is consistently serving up really delicious bread.
Note: like many places in Sevilla, the folks at Das Brot seem to dislike if you pay them with a «large» bill (e.g. a 20). On numerous occasions, I have been met with furrowed brow and shrugged shoulders when trying to pay for a 3 € item with a 20 € bill.
(They also have a selection of other baked goods– croissants, tarts, and cookies.)

Spaniards are fan of white baguettes. But for those whom enjoy a thick wholewheat bread with seeds and nuts this is the place to go. The bread here is organic and it has sunflower seeds, pumpkin seeds, hazelnuts, multi-​grain… made of spelt, rye or other wheats. The kilo (2 pounds) of bread costs about 4,5 € and the half kilo 3,5 €. So I buy the kilo and freeze half of it. They also make tarts, pastries, croissants and sweets from Germany and Switzerland.
You can also buy few organic groceries like local honey, goat cheese, «freaking good» goat yogurt, some brands of beer, tea, stevia sweetener, tahini, pasta… and some more.

Uffff… sitio exquisito, pequeño, dulce y salado y con mucho encanto como sus productos que además son ecológicos y de comercio justo.
Si, Das Brot es una ¿‘panadería’? especial. Me he topado con ella casualmente, me da vergüenza, pero iba a mirarme en el espejo de sus puertas y ya me he parado y al leer la cantidad de panes que ofrecían y el cartel en alemán, pues entras…
Pan & Alemania = acierto seguro… es como las regañás y Sevilla ¿no?
Total que finalmente me he decantado por la tarta de zanahoria… maravillosa — ah! y he comprado panes variados (frutos secos y cereales) que esperaré a tomarme con mi madre que es otra fanática del pan…
Además de la variedad de productos que ofrecen (también para personas con intolerancia como celíacos), me ha hecho gracia una clienta. Una señora francesa italiana que le decía a la chica (encantadora) de la tienda: «Mira estos son elementos verdaderos. Yo soy francesa e italiana y sé cuando es verdadero o no. Y ésto lo es. Es como los de mi abuela, auténtico»… Me ha encantado la fuerza de la francesa… y es verdad que si nosotros tenemos un paladar bueno, los franceses con el pan y las pastelería son más finos aún…
Además Das Brot es de los sitios que uno compra pan o tartas o quiches, pero tienes la seguridad de comer algo saludable, y eso siempre está genial.
Por cierto, se me olvidaba, me he llevado Kombucha (kombu en japo es alga y cha té), que es una bebida oriental como infusión pero con fermento natural… Así que después de los panes beberé mi Kombucha, que me ha comentado que es como ‘sidra’. Ya os contaré… Y hasta entonces Auf Wiedersehen!

Conocí esta tienda el sábado por la mañana y me he quedado prendado, pues aunque estas tiendas son relativamente frecuentes en Madrid, donde vivía, aquí en Sevilla (al igual que en Córdoba donde viví con anterioridad) comer un buen pan es misión imposible.
Me encanta que el pan lo puedas comprar por piezas o comprar una parte de la misma. Que decir que es buenísimo, tanto como el que hago yo en casa, aunque utilice masa madre.
No sólo es pan DAS BROT, también son tartas y panecillos, probad los palillos de comino y desterrareis las regañadas de vuestra mesa.
Compré porciones de varias tartas, porque aunque por la de calabaza (que me encanta) se me iban los ojos (aproximadamente cada porción son dos euros). Compre casi de todas las que tenía, salvo la de queso chocolate, que fue la que me recomendó Rafa y menos me llamó a los ojos. Calabaza, manzana, zanahoria (sobresaliente) y de amapola. La que menos me gustó, aunque estaban todas buenas, fue la de manzana, supongo que por lo familiar que me resultaba, sabía como la de mi vecina (que es de Benacazón, pero vivió durante 15 años en Munich).
Me quedé con ganas de probar la de «piquete de abejas», pero la dependienta me comento que esa y algunas otras las tienen solo por encargo.
Además de todo esto, en la tienda puedes encontrar algunos productos como leche de arroz, soja, etc., y otros productos para personas intolerantes.
Que decir que son amabilísimos.

Como bien lo dice su nombre en alemán Das Brot es EL PAN así, con mayúsculas. Hace tiempo lo frecuenté bastante ya que una amiga vivía por la zona y era fanática de esa panadería. Aquí encontraréis el pan de pueblo que ya ni se encuentra en los propios pueblos. Como ya han dicho en comentarios anteriores, una mujer alemana muy maja se encarga de hacer los panes y tartas. Yo que no soy muy ‘panero’ me encanta el de centeno y el de pipas de calabaza. Pero mi perdición es el brownie de chocolate y los muffins. La relación calidad/​precio está muy bien ya que estás pagando por un producto artesanal que va a dejarte muy satisfecho.

Tuve el placer de conocer a la dueña en un encuentro cultural que hubo en Málaga hace un año.
Es una mujer alemana mayor muy pintoresca que vive en Facinas (que como ha dicho Lucía tienen una tienda allí, la primera creo recordar), que nos contó como empezó a hornear panes y dulces más sanos (y por ello me refiero al uso de la espelta en lugar de trigo y demás) y como poco a poco fue «extendiéndose».
Nos contó también que ella hornea todos los panes y que cada 2 ó 3 días coge su furgoneta y hace el reparto a todos sus tiendas, ya que este tipo de productos no aguantan mucho más tiempo, y de que pronto necesitaría a alguien que la ayudase, ya que esto la cansaba mucho y a veces tenía que dormir en la furgoneta y que ya no estaba para esos trotes.
Recomendar cualquiera de sus pasteles porque están muy buenos y con eso de que nos más sanos el complejo de culpa por haberte atiborrado es un poco menor ;).

Si prefieres el pan integral, ecológico y artesano a los sucedáneos precocinados que cada vez inundan con mayor insistencia tiendas, supermercados y hasta panaderías, y además te gusta probar con variedad de cereales y sus propiedades nutrientes, además de sabores y texturas, en la calle San Luis funciona desde hace pocos años una panadería alemana, que de esto saben mucho los teutones. Panes de centeno, de espelta, de trigo con linaza, con pipas de calabaza, panes dietéticos, sin gluten o los que hacen por encargo: de avellanas, nueces o almendra, trigo sarraceno, aceitunas, ajo o zanahoria y maíz, como ves hay donde elegir. Yo los conocía porque su panadería original está en Facinas, Cádiz y siempre que iba a la maravillosa playa de Bolonia he comprado este pan, que puedes encontrar en las tiendecitas del poblado. Siguen haciéndolo allí.
Enfrente de la bocacalle de Amargura encontrarás el establecimiento, que además de pan ofrece dulces: mis preferidos, la riquísima tarta de manzana típica del país, la de zanahoria y almendra suiza y los muffins de chocolate.
La primera vez que entré lo hice preguntando por levadura de panadería seca, algo que parece prácticamente imposible de conseguir en esta ciudad. Allí tampoco pudieron ayudarme, pero fueron muy amables, lo intentaron y en el camino quedé totalmente seducida por sus pasteles y sus panes. Además, tienen otros productos como leche vegana, patés vegetales, miel y jalea real, cous cous o cereales. Como es lógico, sus precios son un poco más caros que los de una panadería o pastelería al uso pero merece la pena darse ese lujillo y pasar por Das Brot.