CdB Sevilla Store

Recientemente el Caja de Baloncesto cambió de nombre, ahora vuelve a ser el Club de Baloncesto Sevilla, como siempre. Si bien hace años tuvo aquí la tienda oficial del club, cerró y hace no mucho volvió a reabrir. Es un espacio muy bien situado (junto a la Campana, en una calle con muchísimo tránsito, en todo el meollo comercial) aunque pequeño, aunque da la impresión de que todo el merchandising cajista está allí a la mano.
Fui allí para comprar un regalo, y la atención fue buena, aunque el dependiente era un poco… digamos, relajado al despachar. Menos mal que no había demasiada gente (solo yo).
Ojo, consejo, si eres socio, tienes descuento en las compras.

A mi hermana le hacía muchísima ilusión ir a un partido de baloncesto. No porque le fascine el deporte de la canasta, sino porque decía que nunca había ido a un espectáculo de este tipo y quería ver el ambiente que lo rodea. Así que el año pasado, por navidades, le regalé un par de entradas, para que pudiera cumplir su ilusión (para qué están si no las navidades) y vivir lo que un partido de la ACB.
Para que estuviera más metida en el ambiente, también le regalé una bufanda del equipo. Dar con ella fue tarea harto complicada. Primero me desplacé al Pabellón de San Pablo, ya que antes estaba allí la tienda, al lado de la garita de seguridad. El guardia me dijo que hacía tiempo que la habían trasladado al centro, al pasaje de Villasís. Así que me encaminé al corazón de Sevilla.
Dejé el coche en el Prado y me fui andando tranquilamente. Cuando llegué se me vino el mundo al suelo. Se trata de una tiendecita minúscula, en la que hay (casi literalmente) cuatro camisetas, dos polos, dos bufandas y algún que otro balón, aparte de vender entradas para los partidos. No sé si pillé a la muchacha en un mal día, pero me contestó de muy mala gana que éso era todo lo que tenían.
Cogí una bufanda, pagué (me costó muy barata, la verdad sea dicha) y me marché de allí. Bastante decepcionado. Esperaba mucho más de un equipo con el nivel que se le presupone a uno de los equipos clásicos del baloncesto español, que además está patrocinado por una entidad tan seria como es Cajasol. Al final, lo importante es que a mi hermana le encantó el partido, que pudo disfrutar con su bufanda… aunque a mi la experiencia de comprarla me resultase un tanto desagradable.