Solo he venido un par de veces para rematar un día de tapas y vinos. Siempre hemos aprovechado las ofertas de los flyers: copa en vaso ancho con chupito por 4 €. Aunque sea un sitio pequeñito tiene encanto, te puedes sentar en las mesitas de fuera o en los sillones dentro. La decoración es curiosa: frases en las paredes, jardines de cucharas… La música es la típica de un bar de copas y el trato al público es bastante bueno. Además de la localización, espectacular. Cabe decir que, cuando te pides la oferta, el alcohol no es aguachirri, te ponen la marca y sabe a eso.