Alameda Multicines

Solo por la atmósfera que se respira con ver los carteles de néón, merece la pena ir a este cine.
No es el más cómodo ni el más moderno, pero en plena Alameda, a precios más económicos que en el vecino plaza de armas y con una oferta de cartelera probablemente de mejor calidad, es una buena alternativa para ir al cine.
Teniendo éste y el cercano Cervantes, considero un crimen acudir a la proyección de películas en grandes centros comerciales pudiendo disfrutarlas en estos espacios. Defendámoslos señores!

El alameda es otro de los cines míticos del centro, aunque no tiene el atractivo del VOSE que tiene el Avenida ni la caduca majestuosidad del Cervantes.
Este es un multicines sencillo pero que me gusta sobre todo por su ubicación, en plena Alameda de Hércules muy cerca de la calle Trajano. Las salas no son nada fuera de lo común, pero cumplen su cometido.
Los precios son bastante económicos como todos los de Unión cine ciudad y puedes ver una película por poco más de 6 euros o por 5 si eres estudiante desempleado, jubilado, etc.
Si prefieres la solera de los cines de antaño y huyes de los centros comerciales, este cine te ofrece películas actuales en un ambiente agradable.

Puff, no sabría que decir sobre este cine, en serio no sabría por donde empezar. Tendré que remontarme a la época en la gente iba al cine Fantasio, al Emperador, al Regina, al Delicias, al Becquer, en fin, historia pura de nuestra ciudad.
Pues bien, uno de los primeros multicines fue el Alameda, ah, ¡qué ricas! las primeras hamburguesas devoradas en el Burguer Alameda. Sí, para el que no lo sepa en la parte de enfrente del cine, había una hamburguesería con un ambiente un tanto peculiar, vamos que estaba lleno de prostitutas y toxicómanos. Eso sí, de entrar en el baño había que olvidarse si no querías pincharte con las decenas de chutas que adornaban el suelo. Era un momento en la que la heroína estaba destrozando a una parte importante de la juventud de la época.
Pero todo aquello pasó, la heroína y la prostitución se trasladaron a otras zonas de la ciudad. El que ha seguido y espero que siga es el Alameda Multicines. Es cierto que están muy ajados y dejados de la mano de sus dueños, pero son tantos y buenos los recuerdos que tengo de este lugar que me apenaría muchísimo que los cerrasen y se convirtiesen en apartamentitos. No sé si sabéis que la familia propietaria de estos cines, El Avenida y el Cervantes han ganado un pleito en el Tribunal Supremo y quizás tiren por el sumidero una parte de la memoria e historia de la Sevilla reciente.
Como he comentado no son unos cines especialmente cómodos, aunque no están mal. Sobre todo la sala 1, la más grande y amplia. Sé que parece una tontería, pero siempre que voy me releo los carteles del hall. En el que se rememora el primigenio festival de cine de Sevilla, evento que unos cuantos locos intentaron que se consolidara hace unas décadas.
Que sí, que no es el mejor lugar para visionar una película, pero tienen tanta intrahistoria, que espero que pueda seguir yendo los miércoles a disfrutar del cine en mayúsculas.
Un saludo.

Cuando llevas in tiempo sin pasar por este cine es como si t faltase algo. Como si echases d menos algo en tu vida. Siempre me fascinará como s mantiene a flote pese al envite de las multisalas gigantes con 3Ds y digital. Venir aquí es como volver ser chico y viajar 20 años atrás. Salas en doble vertiente desde el centro, la barra del ambigu, accesos… todo al mas puro estilo de los 80s.

Empecemos por partes, le doy cuatro estrellas por lo que este cine significa para mi. Creo recordar que la primera vez que me puse frente a la gran pantalla fue aquí, ‘Mira quién habla’ para mas señas que no reseñas.
Es uno de los cines por excelencia de Sevilla, aguantando el tirón del tiempo y el embiste de los enormes multicines de los alrededores y el Aljarafe, se podría decir que es un coloso cual Cine Cervantes o Avenida.
Por otro lado cierto es que son antiguos, no los han arreglado mucho y la verdad es que un limpiado de cara no le vendría mal, incluso de los asientos si me apura pero luego las palomitas y los refrescos son de lo más asequible de la ciudad. Va compensando.
Así que como yo soy muy alamedero y un poco romántico pa estas cosas, si puedo elegir siempre elijo los cines del centro de Sevilla, los de toda la vida.

_​un cine de los de toda la vida, no se asemeja mucho a los nuevos cines estándar que da igual donde los coloques porque casi todos son igual. Las butacas están colocadas en horizontal y como te toque cerca de la pantalla no es que sea muy cómodo ver la peli, pero por lo general se ven muy bien a partir de la 5ª fila. Siempre me resultó curioso el sonido parpadeante de su luminoso que parece el de un hotel de carretera en una película de miedo y que sigue hoy en día haciendo ese ruido… hoy he visto el Lobo de Wall Street, que os aconsejo que no os la perdáis y que por fin llevará a Dicaprio a su primer Oscar.

Un multicines más un tanto antiguo.

Hace pocos segundos hablaba de uno de los cines más emblemáticos de la ciudad «Cine Avenida» y ahora me pongo ante el teclado para hablar de otro de los baluartes del panorama cinematográfico en Sevilla, el cine Alameda.
Este cine reúné varios aspectos que lo hacen especial. El primer de ellos es la ubicación, situado en plena Alameda de Hércules; uno de los lugares más transitados de la ciudad y que tanta historia tiene. El segundo es el carácter de cine clásico que aún conserva. El tercero, y último pero no por ello menos importante, es que ha sabido renovarse (al menos en su interior) amoldando sus salas a una demanda más actual.
Tiene uno de los halls de cine más elegantes que existen en nuestra ciudad con un toque años veinte que es de admirar.

Antiguo. Aunque los otros cines que tiene la empresa son de lo mejor.

Puede que no sea el cine más cuidado de la ciudad, pero lo prefiero mil veces a un inmaculado, pulcro e hirientemente aséptico multicine de centro comercial que sólo ponga los últimos taquillazos de todos los colores, los que no están mal y los que son una auténtica basura.
Este cine tiene cierta inquietud al elegir sus títulos, mezclando algunos más comerciales con otros en los que los criterios artísticos han tenido más peso. Su punto decadente a mí me gusta, con ese sofá y esos espejos dignos del «buen gusto» reinante a finales de los 70 y principios de los 80. Todo esto me recuerda un poco a la película Good Bye Dragon Inn, que narra el último día de un cine de toda la vida. Esperemos que éste corra mejor suerte y lo podamos disfrutar por muchísimo tiempo. Eso sí, un lavado de cara pero conservando au decadencia viejuna estaría muy bien.

Ojalá lo cuidaran más.
Ir al cine se está convirtiendo en algo imposible. Económica y socialmente. Me explico, me encanta ir al cine, me gusta la experiencia de compartir una película con un montón de desconocidos que están disfrutando el mismo momento que yo, y con los que, sin querer, se crea una conexión extraña; el problema es que hay mucha gente que no sabe comportarse en el cine, por eso, además de por la cuestión económica, hay salas y centros comerciales que tengo vetados.
La opción que presenta Unión Cine Ciudad en Sevilla no está mal, con algunas ofertas interesantes y salas antiguas con un toque clásico que tienen un encanto especial, soy una romántica, no puedo evitarlo. El Alameda es una de esas opciones interesantes, ya que, además, es multisala. El problema es que está poco cuidado, y la proyección no se puede decir que sea buena, por eso no puedo darle más de tres estrellas.
Pero es uno de los sitios en los que se puede disfrutar de una buena película.

La Alameda se remozó hace relativamente poco. La época (dicho así parece que hace mucho y hará al menos dos décadas) en la que daba un poco de miedo pasar por allí, ya pasó. Se echó más o menos educadamente a todas las señoritas que trabajaban las gastadas esquinas por la noche y se llenó aquello de bares de copas y un ambiente muy agradable.
La pena es que se les olvidara el Teatro Alameda. El que en su tiempo fue prácticamente el primer multicines, ahora se ha quedado como el hermano pobre de las pantallas de cine de Sevilla. Todo está bastante anticuado y descuidado. Podría decirte que eso tiene cierto encanto, que la relación entre lo decadente y el cine es, hasta cierto punto, evocadora. Pero no te lo voy a decir. La decadencia prefiero verla detrás de la pantalla y no debajo de mi trasero. De hecho, no hay ni mucho control dentro de las salas, por lo que no seríà la primera vez que veo a alguien meterse en otra película habiendo pagado sólo por una. Yo no, yo nunca haría eso.
Aún así, es uno de los poquísimos sitios de Sevilla donde se pueden ver películas en versión original y eso siempre le va a dar un punto positivo, esté como esté el lugar. Además, uno le guarda tanto cariño por haber visto allí películas tan grandes de la época (y tan pequeñitas ahora) que no puede más que guardarle cariño. Eso sí, rara vez voy ya al Alameda teniendo el Avenida para las VO donde además es más fácil aparcar y otros multicines donde es más todo lo demás. Quizás mi amiga la nostalgia sea la única capaz de conseguirlo.

No es que sean las mejores salas de la historia, pero para mi estos Multicines significan mucho y tienen mucha historia. El centro cuenta con varias tiendas de chucherías y aunque hace unos 20 años era considerado el primer centro comercial de Sevilla hoy es un pequeño centro donde hay 4 salas, donde ponen películas en versión original, muchas películas europeas y poco cine comercial.
Sólo con ver el Cine Alameda desde fuera entran ganas de verlos desde dentro, con tantas luces de colores, que más que un centro comercial parece un puticlub. Y entras y lo primero que hay junto a las taquillas es un Oráculo de esos que te lee la mano y te predice el futuro.
Un lugar auténtico, que ofrece lo que más me gusta en este mundo, cine (películas muchas veces precedidas por un corto, algo prácticamente imposible en cualquier otra sala de cine). Si encima se añade que es más barato que si vas a grandes centros comerciales y no tienes que aguantar al grupo de niños quinceañeros tirando palomitas y tonteando entre ellos, ¿qué mas se puede pedir?

Cines Alameda es un vestigio de los antiguos cines que había en el centro de todas las ciudades y que los cambios de costumbres a favor de los aborrecibles centros comerciales con sus multisalas abarrotadas de multicanis medellones se han encargado de cepillar.
Yo prefiero ir a ver versión original, pero cuando no es posible desde luego prefiero acudir a cines como el Alameda que con su pinta de trasnochado y antiguo (sólo hay que ver el luminoso de la entrada) siguen siendo cómodos y confortables y te permiten disfrutar del rato de ocio. El cine tiene cuatro salas bastante grandes, es tranquillo (no hay superyenis), y si tienes carnet de estudiante, eres mayor de 65 años, etc., te hacen descuento

Ese cine es aquel en el que puedes encontrar peliculas que fueron unos grandes exitos y pudiendo hacerlo en el cine.

en su época si fue una gran sala, pero actualmente se queda pequeño, aún así es normalmente más barato que el resto de los cines aunque las alas son un poco pequeña