Vietnam Mekong

Me encantísima la comida vietnamita, en especial después de probar por vez primera la sopa Phở. ¿Cómo puede ser algo tan rico? Madre mía, qué delicia. Así que cuando entré por la puerta de este restaurante, ya sabía prácticamente qué iba a pedir, por mucho que fuese la cena y pudiese terminar con un pequeño problema digestivo (que no fue el caso, pero bueno).
El Vietnam Mekong está en la calle Isabel La Católica, una de las menos atractivas de la ciudad, pese a lo cerca que está de la Gran Vía. Y el mismo restaurante, por fuera, no es gran cosa: tiene unos cristales como traslúcidos que no permite que se vea nada. De hecho, hay un cartel que certifica «Sí, estamos abiertos».
Por dentro la cosa cambia: no deja de tener el típico sabor a mesón de toda la vida, pero con alguna decoración vietnamita consistente en lámparas de papel y en sombreros vietnamitas. Éramos un grupo grande y yo pedí sopa Phở. Cuando llegó, pese a que tenía muy buena pinta, he de decir que tenía poquito sabor. La Phở no es el parangón del sabor fuerte, pero le faltaba un poquito de sal, a decir verdad. Así que intenté suplirlo con una cantidad absurda de salsa picante que luego me hizo sudar la gota gorda hasta que me acabé la sopa.
Volveré, sin duda, aunque igual optaré por alguno de los platos con arroz.

He ido varias veces a este vietnamita pero ayer fue la primera con gente de Unilocal y todavía no había hecho reseña. Supongo que porque las otras veces todavía no era de Unilocal.Así que ya ha llegado el momento.
Siempre que he ido me ha parecido que todo está bueno. Ayer probé los espaguetis de arroz con langostinos y la ensalada de papaya. Sobretodo la ensalada estaba riquísima. Muy refrescante y para mi con el aliño perfecto.
Las raciones me parece que son de buen tamaño. Al menos yo con mi plato de fideos tuve de sobra.
En cuanto al restaurante es sencillo pero me gusta que sea amplio y las mesas no estén muy juntas. Limpio y los camareros atentos sin ser agobiantes. Incluso estuvimos un rato hablando y sin pedir la factura y ninguno vino a preguntar si queríamos postre o café y meternos prisa para que nos fueramos.
En otra ocasión probé el café y aquí no le echan leche condensada por lo que no esperéis un café dulce si lo pedis. Pero sí lo hacen con la cafetera tradicional vietnamita.
No tengo ninguna duda de que seguiré yendo a este restaurante.

No conocía este restaurante, pero a la hora de organizar la primera edición del Club del Viaje, y buscando un restaurante de comida solo vietnamita, céntrico con buenas referencias y no demasiado caro, me topé con este, que escondido en una bocacalle de la Gran Vía, la Calle Isabel La Católica, frente a una discoteca archiconocida, no lo dudé. Tenía que ser éste.
Desde fuera el restaurante no tiene muy buen aspecto. De hecho, casi pasa desapercibido o tiene más bien pinta de restaurante chino.
Una vez dentro la cosa tampoco cambia demasiado. Aunque me gustó la decoración, no muy recargada, con cuadros con estampas vietnamitas y sombreros cónicos, y del techo una infinidad de farolillos de colores dando luz. El ambiente es agradable, aunque en el tema de la luz es mejorable.
Pero como decía, nada más entrar te topas con una sala no muy grande y al fondo la barra. Cuando entré pensé que ese era el único espacio y que, al ver que no había una mesa grande preparada, pues éramos diez personas, aunque luego nos juntamos hasta doce, temí que hubieran olvidado la reserva. Pero el camarero, el único que atendía, nos recibió amablemente y al preguntar por la reserva, nos pidió que le siguiéramos, y es que al fondo a la derecha hay un pasillo que da a otra sala, un poco más grande que la primera y donde sí, estaba preparada la mesa.
A la hora de pedir la bebida, me sentí un poco huérfano. Esperaba encontrar refrescos vietnamitas o zumos de frutas, que sé que allí son excelentes preparándolos; pero no, solo agua, refrescos convencionales, alguna cerveza vietnamita y vinos. Así que pedí agua.
A la hora de pedir, lo tenía claro: Sopa Phở Bo. Si hubiera tenido un poco más de hambre hubiera pedido rollitos vietnamitas, aunque fuera para compartir, pero no era el caso. No tenía demasiada hambre, así que ya el Phở Bo me parecía demasiado. Y lo fue.
Cuando empezaron a traerlos me dije que no iba a poder con él, aunque al final pude.
La sopa te la sirven en un cuenco donde en el caldo nadan verduras (cebolla, cebollino, la carne de ternera troceadita y nada dura y los tallarines de arroz. De manera separada, y creo que es un gran acierto, aunque en Vietnam yo así no lo vi, te ponen en un plato unas hojas de hierbabuena, soja, cilantro y lima para que le eches. Y, para los más atrevidos, salsa picante.
Así que la sopa se convierte en un festival de sabores. Picante pero a la vez fresco por la hierbabuena, suave con los tallarines, contundente por el caldo y la carne y original por el cilantro y las verduras.
El lugar no es que sea demasiado barato, la sopa Phở Bo unos 10 € y su alternativa con pollo, la Phở Ga, otros tantos.
No pude quedarme a los postres o a tomar el famosísimo y dulcísimo café vietnamita, pero espero volver una próxima vez a probar muchos más platos, porque, sinceramente, tienen todos una pinta estupenda.

On a trip to Spain with the craving for some phở, I couldn’t help check this place out. Overall, it was fine though it wasn’t the style of phở I was accustomed to. I ordered the phở bo since it was the only phở dish with beef. I found it strange there was a very limited selection of phở dishes. I reside in southern Califonia where phở restaurants pretty much grow on trees, so I expected more. The noodles are larger yet the portions are considerably smaller. The broth is ok, and the meat comes fully cooked. There isn’t much variation offered, i.e. no tripe, meatballs, tendon, sliced raw beef, etc. If you’re content with this, then it’s worth checking out but be prepared to possibly order a second bowl. There’s apparently only one small size! At 10 € a pop, it isn’t cheap.

Food: The phở was delicious and flavorful prior to ‘doctoring up’. The rollitos were perfectly cooked as well. They were not soggy, they were quite crispy and flavorful. The portions are very large (or normal for most Vietnamese restaurants).
Staff: Incredibly attentive and nice. It was a bit awkward because I was the only one there so I felt like I was being watched but thats ok! It just means they were ready to pounce if I needed anything! lol
Price: I consider the price acceptable since the portions were decent.
Overall: I would definitely go back! I just wish it was closer!

El mejor restaurante de phở en madrid! Te recomiendo el phở de pollo! Ademas, el dueño es muy simpático! Creo que es mejor que Pho26.
Best phở restaurant in madrid!!! I tried another restaurant called Phở 26 but this place is way better and a lot more options! I recommend the chicken phở and the one with the bean noodles! Also, the service is really good. The owner is very nice and attentive.

Super tasty Vietnamese food. We were really impressed — everything was delicious, the server was super nice, and the restaurant was very clean. We will be back :) Would definitely recommend!
Queeee rico!

Creo que cometieron el error de abrir un local demasiado grande en esta calle, llena de restaurantes chinos. La comida de este vietnamita es muy buena, recomiendo especialmente las albóndigas de pescado! Buena calidad y buen precio, pero es un poco desalentador entrar y que a veces no haya ni una persona.

Al fin otro restaurante vietnamita en Madrid y de cocina bastante auténtica según me ha parecido.
El restaurante tiene look de chino de barrio, con poquitas mesas, regentado según parece por una familia. La carta es amplia y viene con fotos, para ayudarnos a hacernos una idea.
Mi gozo en un pozo con el entrante, que no tenían, ensalada de papaya. Lo entiendo, suele pasar ya que la papaya verde es difícil de encontrar en Madrid, pero la otra ensalada con brotes y pollo estába fresquísima con unos sabores típicamente del sudeste asiático.
Luego hemos pedido un bun cha, uno de mis platos vietnamitas preferidos. Se trata de cerdo a la brasa, con unos fideos de arroz y unos brotes verdes, que se sirven por separado y el comensal lo mezcla a su gusto, junto con una salsa. La verdad es que estaban muy buenos.
Para acabar otro tipo de noodles, esta vez con ternera. Suaves, demasiado para mi gusto, pero no todo va a tener que tener unos fuertes sabores especiados.
Lo malo ha venido en la lentitud en cuanto se han llenado las poquitas mesas. El único camarero no daba a basto, así que me he tenido que ir sin probar el café vietnamita.

This restaurant offers the most authentic Vietnamese food I have had in Spain in almost two years. Looking forward to come back.

Vietnam really hit the spot. I enjoy Asian food, and hadn’t had a bowl of Phở in months. Arriving without a reservation on a Friday night, I was a bit concerned we’d be in for a long wait. Surprisingly, we were the only diners, which perhaps made me even more concerned… But the menu looked good, with a pretty wide variety of salads, tofu, fish and meat, and a friend had guaranteed me the food was authentic, so we stayed. I was glad we did. My bowl of phở really hit the spot, arriving with plenty of veggies, gently cooked chicken and a good portion of lemongrass. They even had sriracha, which I have not found previously in Madrid. We also tried some rice paper beef and noodle rolls and some duck, which were both decent. Definitely recommend it if you have a phở craving!

Sitio recomendadísimo por un amigo que ha vivido en Vietnam. Tienen platos típicos vietnamitas, aunque no soy un experto.
Si quieres probar una cocina con sabores frescos (usan mucho cilantro y hierbabuena) este sitio es obligatorio.
Encima está en pleno centro de Madrid.